Aunque no lo creas, estos 9 motores de cuatro cilindros son más potentes que un V8

Seguramente has leído el titular y has dicho: ‘¿Qué?’ Pero sí, aunque nos cueste creerlo, hay algunos motores de cuatro cilindros realmente potentes que pueden superar a un V8. Una cosa es cierta y es que, aunque tengan más potencia, no suenan igual que los clásicos V8 atmosféricos que todos y todas conocemos. 

De toda la vida, para conseguir montar motores potentes, lo que había que hacer era aumentar la cilindrada así como el número de cilindros. Sin embargo, estos métodos han cambiado, y otra de estas soluciones ha sido la sobrealimentación. Pero, sin más rodeos, te mostramos los 9 motores de cuatro cilindros. 

9 motores de cuatro cilindros más potentes que un V8

K20C1 2.0 (Honda)

La versión  más reciente del Honda Civic Type R (aquí te dejamos la prueba) está equipada con un motor K20C1 de cuatro cilindros y 2.0 litros turbo, el cual entrega una potencia de 315 CV de fuerza a 6.500 revoluciones por minuto y un torque de 420 Nm, logrando así una impresionante relación de 157,5 caballos por litro. 

Y lo cierto es que esta potencia se logra gracias a la tecnología de inyección directa y a un sistema turbo de flujo elevado y baja inercia, el cual incorpora una válvula de descarga eléctrica para lograr un control exacto de la presión de sobrealimentación.

Asimismo y para garantizar un funcionamiento óptimo, el vehículo también está equipado con un sistema de refrigeración de alto rendimiento, que administra eficazmente el calor generado por el turbocompresor y la combustión en este motor de cuatro cilindros.

4B11T-type (Mitsubishi)

Este motor, reconocido por su legado, muestra que no es necesario tener una gran cilindrada para generar una potencia considerable. El Mitsubishi Lancer Evolution X, aunque no alcanzó la misma fama que sus predecesores, se destacó como una berlina excepcional en su época. 

Diseñado para el rendimiento deportivo, ganó reputación gracias a su motor turboalimentado de 2.0 litros, el cual entregaba 295 caballos de fuerza y 406 Nm de par motor, resultando en una relación potencia/litro de 147,5 CV por litro.

B48 2.0 (BMW)

Se trata del motor que impulsa el BMW serie 7 en su variante iPerformance xDrive. Y es que, aunque no llegue a desarrollar una potencia superior a 300 CV de fuerza, sí alcanza los 258 (equivalentes a 128 CV por litro). 

Asimismo, como decimos, se trata de un motor de 2.0 litros que produce un par de 406 Nm. Esto es más que suficiente para proporcionar un buen rendimiento a la berlina alemana, así como también cabe resaltar que cumple con las regulaciones de emisiones.  

EJ257 2.5 (Subaru) 

Este motor, que se encuentra debajo del capó del Subaru WRX STi, es uno de los motores de cuatro cilindros más potentes, que incluso llega a superar a algunos V8. Gracias a la sobrealimentación, produce 315 CV de fuerza y 393 Nm de par motor. 

Con una cilindrada de 2.5 litros, alcanza los 125,7 caballos por litro, una cifra impresionante que, de hecho, supera los 119,6 caballos por litro del Lamborghini Aventador. Seguro que esto no te lo esperabas. Una de las peculiaridades de este motor radica en su configuración de cuatro cilindros en disposición bóxer, lo que le otorga una mayor fuerza y un funcionamiento notablemente suave.

Por si no conoces que es una disposición bóxer, te lo explicamos. A diferencia de un motor de cuatro cilindros en línea, donde los pistones se mueven en la misma dirección, en un motor bóxer los pistones se desplazan en direcciones opuestas, logrando un equilibrio de fuerzas.

Este diseño bóxer contrarresta las fuerzas secundarias inherentes a los motores de cilindros en línea, lo que resulta en menores vibraciones y un funcionamiento más suave. Es por esta razón por la que el motor de 2.5 litros de Subaru ofrece una experiencia de conducción más suave. 

EA888 2.0 (Volkswagen)

El Volkswagen Golf R monta el potente EA888 2.0, el cual es capaz de generar hasta 320 CV de fuerza, así como un par motor de 420 Nm. Este bloque hace que, bajo la apariencia discreta del típico Golf que te puedes estar imaginando ahora mismo, se halla un cuatro cilindros con mucha potencia. 

Su capacidad de aceleración de 0 a 100 km/h en tan sólo 3,9 segundos es un dato que, quieras o no, confirma lo que venimos diciendo. No sólo lo monta el Golf R, sino que también se encuentra en el Passat, o en el Jetta GLI. 

MA2.2 2.0 (Porsche) 

Si hay algún fabricante de coches “especializado” en hacer motores turbo, ese es Porsche. Y esta “Estrella Michelín del automovilismo” se puede ver representada en el 911. De hecho, el clásico 911 siempre ha montado motores de cuatro cilindros. 

Algo curioso es que, cuando Porsche montó el motor MA2.2 de 2.0 litros en el 718 (tanto en el Boxster como en el Cayman), en lugar del bloque de seis cilindros anterior, se vio como un retroceso en la marca. 

Pero lo que la gente no sabía es que este motor logró aumentar las prestaciones gracias a un turbocompresor. Y el resultado de todo esto es una potencia de 355 CV (que no se dice poco) y 419 Nm de par motor. 

Ingenium I-4 2.0 (Jaguar)

Jaguar es una de las marcas más conocidas por sus coches de alto rendimiento. En este caso, el motor Ingenium I-4 de 2.0 litros logra un equilibrio perfecto entre potencia y eficiencia, el cual monta el Jaguar F-Pace. 

Genera exactamente 300 caballos de fuerza y un par motor de 400 Nm, lo que se traduce en una asombrosa relación de 152 caballos por litro, una cifra realmente extraordinaria y que seguro que tampoco te esperabas. 

Ford EcoBoost 2.3 

Ford ha sido reconocida a lo largo de su historia por su habilidad en la fabricación de motores V8 de calidad. Al mismo tiempo, la marca ha liderado la tendencia global del Downsizing, es decir, crear motores pequeños pero potentes a manos de su tecnología EcoBoost.

Aunque el Ford Mustang EcoBoost de 2.3 litros pueda pasar desapercibido en comparación con el imponente V8 de 5.0 litros, es importante dejar atrás cualquier prejuicio al respecto, sobre todo por su gran potencia. 

Este motor desarrolla 315 CV y un impresionante par máximo de 434 Nm, lo que resulta en una relación de potencia por litro de 136,8 caballos. Sin duda, este motor se sitúa entre los más potentes del mundo dentro de la categoría de motores de cuatro cilindros.

M139L 2.0 (Mercedes) 

Este es el motor de cuatro cilindros de mayor potencia disponible en la actualidad. Este motor desafía los límites de la física y la ingeniería, representando un hito para Mercedes. Se trata del M139L, un bloque de 2.0 litros con la designación 'L' que indica su disposición longitudinal.

Es pionero a nivel mundial en utilizar la sobrealimentación mediante un turbocompresor eléctrico, una tecnología directamente heredada de la Fórmula 1, (el equipo Mercedes-AMG Petronas F1 la emplea). Esta tecnología asegura una respuesta instantánea a todas las velocidades del motor.

Gracias a su turbo eléctrico, este motor logra producir 476 caballos de fuerza y 545 Nm de par motor. Se encuentra bajo el capó del Mercedes-AMG C 63 S E Performance, junto a otro motor eléctrico de 204 caballos de fuerza, dando como resultado una potencia combinada de 680 caballos.