El Ford B-Max llega para consolidar la fuerza de Ford en el mercado de los monovolúmenes. El B-Max mide poco más de cuatro metros, es sólo 13 centímetros más largo que el Ford Fiesta con carrocería de cinco puertas y un total de 30 centímetros más corto que el Ford C-Max. El Ford B-Max establece un nuevo punto de referencia para los monovolúmenes compactos mediante un concepto de carrocería único, con un diseño dinámico y un práctico interior. El original sistema de acceso tiene unas características poco convencionales, con bisagras en las puertas delanteras y puertas traseras corredizas. La estructura tradicional del pilar central está integrada en las puertas delanteras y traseras, en lugar de formar parte de la propia carrocería. Cuando ambas puertas están abiertas se puede acceder sin igual al interior, con una apertura de más de 1,5 metros de ancho. Esto supone unas dos veces la anchura ofrecida por los competidores con conceptos alternativos de puertas y hace que sea mucho más fácil entrar o salir de los asientos traseros.
Ford ha aplicado su 'Kinetic Design' para crear un coche compacto, polivalente y con estilo que añade su propio carácter a la gama del fabricante. Su diseño exterior cuenta con un frontal en el que destaca una nueva interpretación de la parrilla en forma de trapecio. Otros elementos distintivos del Ford B-Max incluyen unas ópticas voluminosas, la musculosa línea a lo largo de la carrocería, y unos pasos de rueda prominentes. El interior también cuenta con el mismo enfoque. Las superficies interiores desarrollan ciertos rasgos que se encuentran en los recientes coches pequeños y medianos de la gama Ford. Los rasgos distintivos incluyen la sección fina y parte superior del panel de instrumentos que llega hasta los paneles de las puertas, o la prominente consola en el centro hasta llegar a la parte de abajo, entre los asientos delanteros. Los materiales de alta calidad ponen el énfasis la atención a los detalles. La elección de materiales de primera calidad incluye un tapizado completo en cuero con labrados de primera calidad, mientras que la opción del techo panorámico completo incrementa la sensación de espacio.
El sistema flexible de asientos cuenta con asientos traseros dividisibles en 60/40, que se pueden plegar hasta quedar planos. El asiento del pasajero delantero también se puede plegar, creando un extenso suelo de carga en su interior, adecuado para cargas con longitudes de hasta 2,34 metros. El maletero del Ford B-Max no es amplísimo, pero sus 304 litros dan de sobra para un par de maletas grandes y, además, esconde un pequeño hueco bajo el suelo. El borde de carga está a 70 centímetros del suelo y al abatir los respaldos el fondo queda plano, porque las butacas cuentan con un sistema especial de plegado que las desplaza de forma automática ligeramente hacia abajo. En materia de seguridad, el Ford B-Max ofrece siete airbags: airbags para el conductor y pasajero delantero, airbags laterales para tórax, airbags de cortina que ocupan toda la cabina y airbag para las rodillas del conductor. Así mismo, el Ford B-Max puede ir equipado con un conjunto de tecnología y asistencias para ayudar al conductor en cualquier aspecto de la conducción. Entre otros, destacan: un exclusivo sistema de sonido 'Sony' de ocho altavoces, el nuevo sistema automático para el control de la climatización, el sistema de acceso y arranque sin llaves 'Ford Key Free', la cámara trasera para asistencia al estacionamiento, el parabrisas calefactado 'Quickclear' o el sistema de repostaje sin tapón 'Ford Easy Fuel'. El Ford B-Max es el primer vehículo del fabricante en ofrecer el sistema 'Sync' de la compañía. Es un avanzado sistema de control por voz, integración de dispositivos e interfaz de conectividad. Permite a los usuarios conectar teléfonos móviles y reproductores musicales vía Bluetooth o USB, realizar llamadas con manos libres y controlar la música y demás funciones usando comandos de voz. Además incluye el asistente de llamada de emergencia 'Ford Help SOS': un dispositivo que emplea automáticamente el teléfono móvil para avisar a los servicios de emergencia cuando detecta que el vehículo sufre un accidente.
La gama de motores que ofrece el Ford B-Max va orientada claramente a la eficiencia. Al que más importancia le quiere dar la marca del óvalo es al tricilíndrico 'EcoBoost' de 999 centímetros cúbicos, que está disponible en dos rangos de potencia: 100 y 125CV. Este segundo cuenta con 'Start-Stop', lo que le permite ofrecer unas emisiones reducidas, de las mejores en su categoría. Aunque la gama de gasolina también cuenta con un propulsor 1.6 'Duratec' y cambio automático 'Powershift' de seis velocidades con 105CV de potencia. En el apartado diésel, se ofrece un nuevo propulsor 1.5 'TDCi' de 75CV y el 1.6 'TDCi' de 95CV, que también logra unas emisiones contenidas. Todas las versiones del Ford B-Max cuentan de serie con la tecnología de ahorro 'ECOnetic', que incluyen la dirección asistida 'Electric Power Assisted Steering', que requiere de menor energía que los sistemas de dirección asistida hidráulicos, el 'Gear Shift Indicator' para señalar los momentos de cambio de marcha más eficientes, y el sistema de información al conductor 'Ford Eco Mode', que ayuda a los conductores a adoptar un estilo de conducción más económico. Además del 'Smart Regenerative Charging', que carga la batería en el punto más económico de un viaje.