Que no te engañen: esto es lo que realmente consumen los coches clásicos más conocidos

Hay muchas leyendas urbanas en torno al consumo de combustible de los coches clásicos. Los valores oficiales de consumo de los fabricantes tienen décadas de antigüedad. La forma en que alguna vez se midieron no siempre es comprensible hoy en día. Si le preguntas a los dueños de estos clásicos, a menudo obtendrás una respuesta idealizada, porque nadie va a hablar mal de su joya rodante. En cualquier caso, a pesar de kilómetros de disfrute de conducción, el consumo también es un problema con los clásicos. 

Así hemos hecho el test

El recorrido de pruebas estándar de  AUTO BILD CLASSIC también ha revelado grandes cargueros bastante económicos. Cada automóvil tuvo que completar el recorrido estándar de 155 km al noreste de Hamburgo (Alemania). Este recorrido consiste en tramos iguales de tráfico urbano, vías secundarias y autopistas. Antes y después de la prueba de conducción, el tanque se llenó meticulosamente hasta el borde y luego se calculó el corte a partir de la cantidad de combustible utilizado.

VÍDEO: ¡Qué pasada de clásicos! Con cuál te quedas tú...

En vista de la antigüedad de estos clásicos, les ahorramos pasar por la prueba de aceleración máxima en tramos de la Autobahn sin límite de velocidad, por lo que solo se les exigió el 70 por ciento de la velocidad máxima posible. El objetivo que perseguíamos era proteger la tecnología, además de que se corresponde con la forma en que hay que conducir un vehículo de esas características. Para asegurarse de que todo estaba técnicamente correcto, las unidades probadas fueron revisadas minuciosamente antes de la prueba de conducción: compresión, ajuste del carburador, espacio libre de la válvula, presión de los neumáticos... Tras obtener el visto bueno del taller, los llevamos a la carretera, ¡con algunos resultados sorprendentes! ¡AUTO BILD te muestra a continuación los clásicos más económicos y también los más sedientos!

Volvo 850 R: mejor no pasarse con el acelerador 

Las malas lenguas afirman que el Volvo 850 R (1995-96) fue la venganza de los ingenieros de la vieja escuela de la marca sueca  por tener que pasar a la tracción delantera. De hecho, este familiar de Volvo muestra las limitaciones que presenta este tipo de diseño con una excesiva y provocadora potencia: si cuando a tope de vueltas el par completo recae brevemente en el eje delantero, olvídate de la tracción y que el consumo sea de un solo dígito. En este familiar con motor de cinco cilindros y 226 CV –en vez de 250– y con transmisión automática, se puede aplicar el aforismo de 'Turbo en acción, turbo glotón'. La cantidad de combustible consumido depende en gran medida de cómo te comportes con el acelerador. En nuestra prueba logramos un consumo de 9,9 l/ 100 km gracias a que practicamos un estilo de conducción suave en las llanuras del norte de Alemania. Cualquiera que confundió el pedal derecho con el martillo de Thor duplicó el consumo al instante.

VW Scirocco GL: en las autopistas el consumo se dispara

El Volkswagen Scirocco verde colibrí ha estado realizando kilómetros de prueba de larga duración en la redacción de nuestros compañeros de AUTO BILD CLASSIC desde la primavera de 2019. Para los trayectos de trabajo a menudo se utiliza la autopista, donde el motor 1.6 de cuatro cilindros y 85 CV gira a 4.500 vueltas circulando a 120 km / h. Al coupé de Volkswagen le falta una quinta marcha, lo que explica el promedio de consumo relativamente alto de 8,9 l/100 km en todo el kilometraje realizado hasta el momento. Este valor se amortigua fácilmente en el consumo mixto. En nuestro recorrido estándar, el Scirocco de 807 kilogramos de peso se sació con solo 7,5 l/100 km, un valor bastante decente teniendo en cuanto el ritmo de conducción que llevamos. Sin embargo, el carburador sigue siendo una desventaja en lo que respecta al consumo de combustible, como lo muestra la comparación con la versión de inyección GLi, que probamos anteriormente. El 1.600 de 110 CV con K-Jetronic sólo gastó 6,2 l/100 km en ese momento,  es decir ¡1,3 litros menos!

Mercedes 560 SEC (C 126): disciplina con los costes totales 

Nuestro colega Lars, propietario del Mercedes 560, nos va preparando antes de la prueba de conducción: se pueden alcanzar cifras de consumo de 16 a 18 l/100 km; menos de 15 l/100 km lo considera simplemente utópico. Después de todo, su Mercedes Coupé no fue diseñado para ser un modelo ahorrador, sino para ser el buque insignia de Mercedes, además de llegar a haber sido en su momento el automóvil de producción más caro de Alemania. A ello se une que no es liviano: la báscula muestra casi 1.800 kilos, y un motor V8 de 5,6 litros no se alimenta aire... y amor. Como en la berlina 126, el gigante M 117 monta una transmisión automática de cuatro relaciones. En comparación con el Mercedes 500, la relación del eje que se eligió era más corta (2,65 en lugar de 2,24 m), lo que implica una aceleración más agresiva, pero no es propicio para los giros del motor y el consumo. Los consumos homologados por la marca  (14,4 y 12,4 l/100 km) difieren en consecuencia con los reales.

VÍDEO: Aquí tienes la prueba a fondo del Mercedes S 560

Pero aquellos que se gastaron en 1988 unos 80.000 euros de la época por un automóvil –extras incluidos– no creemos que estuvieran preocupados por pasar mucho por la gasolinera. Para sorpresa de nuestro colega Lars, logramos un gasto medios por debajo de los 15 l/100 km, concretamente, 13,7, una cifra más apropiada para un transatlántico de lujo, aunque tampoco es exactamente poco. Por tanto, no te pases con el acelerador y los otros costes asociados, y es que el C 126 de dos puertas no es para nada considerado el champán entre los coupés de los años 80, más bien un buen vino espumoso...

Aquí tienes el ranking de consumo de coches clásicos

Pincha en la galería de imágenes y podrás conocer lo que ha consumido de media cada modelo, y cuál es el más gastón y el menos sediento.