Cuatro motores gasolina de cuatro cilindros etiqueta C

Aunque los motores tricilíndricos han ganado protagonismo en la última década, los de cuatro cilindros nos siguen pareciendo la opción más recomendable. Ya te explicamos aquí por qué elegir un motor de cuatro cilindros en lugar de uno de tres y ahora mostramos cuatro coches con motor de cuatro cilindros y etiqueta C que siguen siendo una gran compra. 

La presencia de coches con etiquetas ECO y CERO es cada vez mayor en los catálogos de los fabricantes y, ciertamente, es recomendable la compra de estos vehículos por aquello de los beneficios que proporcionan de cara a circular por las ZBE, ventajas fiscales, etc. 

Pero también son modelos más caros y, por el momento, los coches con etiqueta C se salvan de la mayoría de las restricciones. Además, siguen siendo interesantes de cara a una futura compra. 

Nosotros hemos elegido cuatro coches con motor de cuatro cilindros y etiqueta C que abarcan un amplio abanico de necesidades, desde el conductor que busca un vehículo práctico y económico al que quiere diversión al volante. 

Así funciona un motor de cuatro cilindros

Hyundai i30, uno de los coches con motor de cuatro cilindros y etiqueta C más interesantes

El Hyundai i30 es un modelo muy interesante, en general, porque es uno de los compactos más baratos que hay actualmente en el mercado. Su precio empieza en 17.970 euros en la versión básica, denominada Essence, que cuenta con climatizador manual y control de crucero con mandos en el volante de serie.

Esta versión tiene el motor de acceso a la gama, que consiste en un bloque de cuatro cilindros atmosférico de 1.5 litros y 110 CV, asociado a un cambio manual de seis relaciones.

No esperes prestaciones en este motor, pero sí fiabilidad y un funcionamiento muy suave y silencioso, con un consumo normal (6 litros de media, según el ciclo WLTP).

Seat León 2.0 TDI

Si hay un motor de cuatro cilindros con pedigrí es el 2.0 TDI del Grupo Volkswagen que se monta en numerosos modelos, como el Seat León. Este motor ofrece unas prestaciones generosas en el compacto español, gracias a sus 150 CV y 360 Nm de par.

Combinado con un cambio automático DSG de siete relaciones y doble embrague, el León acelera de 0 a 100 km/h en 8,5 segundos y alcanza los 215 km/h de velocidad máxima. Todo ello acompañado de un consumo medio de 4,5 litros cada 100 km.

Es un motor que ofrece un gran rendimiento, aunque entrega la máxima potencia en la zona media del cuentavueltas, entre las 3.000 y las 4.200 rpm, pero ya desde más abajo entrega fuerza suficiente para mover al León con soltura. 

Kia Sportage

Otro coche con motor de cuatro cilindros y etiqueta C que es una gran compra es este Kia Sportage. Hemos escogido la versión diésel de acceso, la menos potente y sin ningún tipo de electrificación.

Se trata de un bloque de 1.6 litros que entrega 116 CV y se combina con un cambio manual de seis velocidades que envía la potencia a las ruedas delanteras. A priori, puede parecer una potencia modesta y es cierto que no te pega al asiento al acelerar, pero a cambio ofrece un consumo moderado, de apenas 5,2 litros según datos oficiales.

Es un motor que responde bien en la mayoría de situaciones y muy indicado para quien priorice el consumo sobre las prestaciones. Si unimos esto a otras características del Sportage, como su diseño llamativo, su interior tecnológico y gran nivel de equipamiento, el resultado es un coche más que recomendable.

BMW M135i xDrive

Si lo que quieres es divertirte al volante, pocas opciones mejor hay en el mercado, con los criterios establecidos, que el BMW M135i xDrive. Este compacto monta un motor de cuatro cilindros y 2.0 litros turbo desarrollado por la división M Performance y cuenta con una serie de modificaciones para mejorar sus cualidades dinámicas. 

Está sobrealimentado por un turbocompresor, con un sistema Valvetronic de apertura variable de las válvulas de admisión que permite eliminar la mariposa de admisión y control variable de los árboles de levas. 

Entrega una potencia de 306 CV y 450 Nm de par, enviados a las cuatro ruedas. Con este motor, el BMW Serie 1 acelera de 0 a 100 km/h en 4,8 segundos y alcanza los 250 km/h de velocidad máxima (autolimitada).