BMW i3 o Volkswagen ID.3 ¿cuál de los dos eléctricos comprar?

Si estás entre comprar el BMW i3 o el Volkswagen ID.3, enhorabuena porque para empezar demuestras que eres un conductor concienciado con el planeta que está dispuesto a sacrificar algunos parámetros de las prestaciones de tu coche con un gran fin: proteger el planeta. 

Para ser justos, hay que indicar algunas de las diferencias entre el BMW i3 y el Volkswagen ID.3 que son necesarias antes de apuntar los motivos que deben decantarte por comprar uno u otro. El primero de ellos es que el BMW es un coche que se lanzó allá por el año 2012 y que, a pesar de sus actualizaciones, es básicamente idéntico desde hace 8 años. 

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Por su parte, el eléctrico de Volkswagen ha llegado al mercado apenas hace unos meses, por lo que, no lo dudes, el ID.3 es más moderno que el i3. Mucho más, de hecho, aunque esto no significa necesariamente que gane por goleada al eléctrico bávaro que, por su parte, es tan peculiar que va a merecer su propio capítulo en la historia del automóvil. 

Eso sí, pocas personas pensarán en comprar un coche eléctrico porque vaya algún día un clásico de valor histórico. Eso sí, si ese fuera tu caso, ni lo dudes, porque el i3 de BMW lo tendrá -dentro de muchos años, eso sí. Aunque hay muchas más razones por las que optar por el i3 en lugar del ID.3 si lo que te va es la peculiaridad. 

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La principal es que el BMW i3 es un coche único, es decir, no se asienta sobre una plataforma, la base sobre la que hoy en día pueden construirse varios modelos diferentes de una o varias marcas. El utilitario eléctrico tiene su propio bastidor y casi por completo está fabricado en fibra de carbono reforzada con plástico CFRP, motivo por el cual es mucho más ligero (1.345 kg) que casi cualquier otro coche eléctrico. 

Especialmente, si comparas el BMW i3 con el VW ID.4, que pesa 1.794 kg, más de 400 kg más. Por otro lado, si buscas un coche con acabados más bien lujosos, tampoco dudes que el BMW es tu mejor opción porque el modelo que finalmente ha lanzado Volkswagen no solo es tremendamente sencillo, también ofrece unos acabados robustos, pero muy normales. 

Datos que diferencian el BMW i3 y el VW ID.3

De hecho, sorprende ver en el eléctrico de Volkswagen sistemas de apertura de ventanillas copiados y pegados de los que tenía un Passat de hace varias generaciones. Eso sí, el ID.3 se controla a través de un cockpit digital sencillo, pero con mucha tecnología y tiene un sistema de infoentretenimiento de última generación. 

El i3, como todos los BMW, no tiene nada que envidiar a su rival en cuanto a funciones, aunque a más de uno su funcionamiento le puede resultar algo más complejo. Por otro lado, el precio base del modelo de BMW (40.600 euros) es algo más bajo que el de VW (43.110 euros). Eso sí, a partir de aquí, todos los datos que diferencian al BMW i3 del Volkswagen ID.3 caen a favor del segundo. 

Para empezar, el más importante de todos los parámetros cuando uno busca un coche eléctrico: la autonomía. Mientras que con el i3 puedes llegar a recorrer hasta 308 km, con el ID.3 ese dato se supera con creces hasta llegar a los 420 km. Además, el Volkswagen es 25 cm más largo (4.261 mm frente a 4.011 mm), así que ofrece mucho más espacio en su interior. 

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Esto se traduce en que la segunda fila del ID.3 tiene de sobra espacio para tres ocupantes y cuenta con puertas de apertura normal, no como sucede en el i3, que solo homologa cuatro plazas y tiene un extraño sistema que te obliga a desbloquear la puerta delantera para poder abrir la trasera. Evidentemente, todo ello se traduce en un maletero más digno en el caso del VW: 385 litros frente a 260 litros. 

El ID.3 de VW, frente al i3 de BMW, es además más potente gracias a sus 204 CV (310 Nm) comparado con su rival (170 CV y 250 Nm), que tampoco es que se traduzcan en mayores prestaciones, eso sí, porque ambos coches aceleran de 0 a 100 km en poco más de 7 segundos y tiene casi idéntica velocidad máxima: 160 km/h frente a 150 km/h. 

Finalmente, otro aspecto importante que diferencia al ID.3 del i3 es la capacidad de recarga. Mientras el VW se puede llegar a enchufar a 100 kW y a 7,4 se recarga en 9,5 horas, el BMW solo tiene un máximo de 50 kW y no ofrece recarga a 7,4 kW, sino a 11 kW, en cuyo caso su batería se llena en 4,3 horas.