Ford planea lanzar un coche ‘secreto’ de 23.000 euros, y este es el principal perjudicado
Ford ha atrasado la producción de un SUV eléctrico para lanzar un nuevo y secreto vehículo por menos de 25.000 euros. Objetivo: acabar con el monopolio chino.
La casi reciente imposición de los fabricantes chinos en el Viejo Continente, así como en Estados Unidos, está provocando algunos cambios de planes entre los diferentes fabricantes de automóviles, quienes están lanzando nuevos modelos, así como precios realmente bajos, con el fin de no quedarse atrás en un mercado casi monopolista chino.
Entre ellos, destaca Ford. Y es que este fabricante estadounidense ha dado a conocer que está preocupado por los cambios en la demanda, así como por la creciente competencia de los fabricantes chinos. Por ello, ha anunciado el retraso de sus planes de crear un SUV eléctrico de tres filas de asientos para dar paso a un coche eléctrico más asequible.
El coche eléctrico de Ford por 25.000 euros
El nuevo eléctrico que entra en la lista de planes de Ford rondará los 25.000 euros, rango de precios sobre el que girarán en los próximos años los modelos del resto de marcas Europeas. Un informe de la consultora estadounidense, Bloomberg, profundiza en todos los detalles sobre el nuevo proyecto.
Entre dichos detalles, destacan: el equipo dedicado al proyecto, sus implicaciones para la nueva gama de Ford, así como el calendario de lanzamiento previsto para finales de 2026. Entre otras cosas, subraya la amenaza que supone la presencia y actuación de los fabricantes de coches chinos, en particular BYD.
Dicho monopolio por parte de China en el sector automovilístico es un factor clave que impulsa el cambio estratégico de muchas compañías y fabricantes de coches. El desarrollo del proyecto del eléctrico asequible se ha confiado a un pequeño equipo de menos de 100 personas, que trabajarán en Irvine (California, Estados Unidos).
Al frente de esta iniciativa está Alan Clarke, conocido por su anterior liderazgo en ingeniería del exitoso Tesla Model Y. En la actualidad, el Model Y es el coche más vendido del mundo, por lo que es comprensible que Ford confíe a Clarke un proyecto como éste.
El objetivo principal del equipo es construir una plataforma que utilice una batería de litio hierro fosfato (LFP), mientras que el fin último de este vehículo es dar cabida no sólo a coches compactos o crossovers, sino también a pequeñas camionetas. Lo más sorprendente es que Ford se ha empeñado en sacar este vehículo a finales de 2026, por lo civil o por lo criminal.
Objetivo: acabar con el monopolio chino
Sin embargo, el informe de Bloomberg no aclara si esa fecha se refiere a su primera aparición pública, es decir, a su presentación, o a su salida de la cadena de producción. Lo que sí aclara es que Ford quiere que el vehículo eléctrico genere beneficios durante el primer año de producción.
¿Cómo podría lograrlo si se tiene en cuenta que este año prevé pérdidas multimillonarias asociadas al VE? Se espera que la selección de componentes sea fundamental para lograr este objetivo. Por un lado, las baterías LPF pueden costar aproximadamente un tercio menos que las de iones de litio.
Construir una plataforma capaz de soportar varios vehículos es otra forma de reducir costes y maximizar la oferta de productos. Jim Farley, consejero delegado de la empresa, ha aclarado que sus equipos de VE están "realmente centrados en el coste y la eficiencia" y que la "competencia definitiva" va a ser Tesla y los fabricantes de automóviles chinos.
De hecho, Bloomberg señala a los fabricantes chinos como la razón del actual y repentino interés por los vehículos eléctricos de bajo coste. El BYD Seagull cuesta sólo 10.000 euros y ofrece asientos para cuatro personas, un sistema central de infoentretenimiento giratorio y 300 km de autonomía, según afirma el informe.
Si las marcas chinas se abren camino en Estados Unidos, la industria automovilística en su conjunto tendrá que estar dispuesta a dar un giro radical para seguir el ritmo. Y esto mismo es lo que está sucediendo en Europa, y más aún teniendo en cuenta la reciente postura de la imposición de leyes antidumping.
Etiquetas: Unión Europea, China, SUV, Coches chinos, Estados Unidos
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