La Comisión Europea registra las oficinas de BMW por su posible implicación en un cártel

Desde verano la Comisión Europea investiga un cartel del mundo del motor en el que podrían haber estado implicados los principales fabricantes alemanes: Porsche, Audi, Mercedes, Volkswagen y BMW. En los últimos días ha habido novedades, con la organización registrando por sorpresa las oficinas de BMW, algo que la propia marca ha corroborado, apuntando que está “asistiendo a la Comisión Europea en su trabajo”.

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Desde Bruselas se ha expuesto que esta redada por sorpresa tuvo lugar el pasado lunes 16 de octubre como consecuencia de las declaraciones de que diversos fabricantes alemanes de coches se habían aliado formando un cártel ilegal. Éste habría conspirado durante décadas para acordar el precio del diesel y de distintos tipos de tecnología.

Ante el hecho, BMW ha querido aclarar la situación declarando que “El Grupo BMW quiere dejar clara la diferencia entre la potencial violación de las leyes antitrust y la manipulación ilegal del tratamiento de escapes. El Grupo BMW no ha sido acusado de esto último”.

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Además, la comisión antiomopolio ha declarado que uno de los integrantes de dicho cartel, con el objetivo de obtener inmunidad, habría dado el chivatazo, presentándose ante ella con suficiente información como para justificar las inspecciones. Aunque no ha querido revelar cuál ha sido, la propia Daimler afirma haber sido ella. El pasado viernes la compañía declaró haber “rellenado una solicitud de inmunidad respecto a las multas hace mucho tiempo”, motivo por el que considera innecesario reservar fondos para posibles multas antimonopolio.

En caso de ser así, y de haber sido la primera en tirar de la manta, obtendría inmunidad pero, si alguna otra se le hubiera adelantado, aportar información de manera voluntaria serviría para reducir hasta en un 50% las posibles multas.

Fuente: Reuters.