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Prueba Toyota RAV4 Plug-in Hybrid: ¿el mejor híbrido enchufable?

prueba toyota rav4 plug-in hybrid

La experiencia de Toyota con coches híbridos es innegable. Con este RAV4 Plug-in Hybrid de la prueba quieren demostrar que han pasado de nivel...

Todo el que quiere comprarse un coche hoy en día es un mar de dudas: ¿es mejor híbrido normal? ¿enchufable? ¿es el momento ya de un coche eléctrico? ¿o es mejor esperar? No hay una respuesta clara, porque depende del tipo de uso que le vayas a dar. 

Pero sí existe una opción que desde ya se adapta a las necesidades de una buena parte de los conductores: un híbrido enchufable te da autonomía eléctrica suficiente para el día a día y te permite viajar sin preocuparte de los puntos de recarga. Y si, para colmo, es un SUV, que es lo que quiere todo el mundo, el conjunto empieza a ser bastante redondo. 

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¿A ver qué te parece este Toyota RAV4 Plug-in Hybrid de la prueba?

Prueba Toyota RAV4 Plug-in Hybrid

No quiero entrar en exceso en el apartado estético. Juzga tú mismo si te gusta o no, pero  sí quiero valorar el prestigio que aporta este Toyota RAV4 a quien lo conduce. Que sea SUV, como decía, ya es un plus. 

Pero es que esta generación tiene mucho empaque. Eso no se puede negar. Y no hay que olvidar que el todocamino compacto japonés fue el primero en apostar allá por 1994 por este concepto de vehículo recreacional de aspecto todoterreno que tanto éxito tiene ahora.

En este caso monta un conjunto mecánico formado por un motor gasolina atmosférico de 2,5 litros con 185 CV de potencia, que está apoyado por dos motores eléctricos (uno en cada eje), que tienen 134 kW (182 CV) el delantero y 40 kW (54 CV) el trasero. 

La potencia conjunta de todo el sistema es de nada menos que 306 CV. Y, como puedes entender, al tener un motor en cada eje, la tracción es a las cuatro ruedas.

Cuando lo conduces todo resulta muy suave. Empuja de manera lineal y sin tirones. No deslumbra por su despliegue de potencia, pero el caso es que sus prestaciones son realmente buenas (6,1 segundos en el 0 a 100 km/h). 

Y lo mejor de todo es que no comprometen el consumo, que es bajo tanto en el caso del motor de combustión, como en el del conjunto eléctrico. En el recorrido de pruebas, con la batería al completo (realizando un 40% del trayecto en eléctrico y un 60% en modo híbrido) le ha bastado con una media de 4,0 litros y 8,0 kWh/100 km

Vídeo: todos los accesorios disponibles en el nuevo Toyota RAV4:

Y no creas que cuando la batería se descarga el gasto es de locos. En nuestro caso ha consumido 6,6 litros. Y otro dato interesante, y que habla muy a su favor, es que la autonomía en modo eléctrico que declara (75 km) es muy realizable en condiciones reales de circulación.

El elemento que menos que gusta es la caja de cambios CVT, cuya respuesta no genera sensación de potencia y sí mucha rumorosidad. Pero eso es algo con lo que hay que contar siempre que hablemos de un híbrido de Toyota, que prefiere apostar por la eficiencia antes que por una mejor respuesta.

Respecto a su comportamiento dinámico debes tener claro que se trata de un coche en el que prima el confort, es decir, que debes esperar de él suavidad de movimientos y una suspensión blanda más que un tacto incisivo cuando afrontas zonas de curvas. Y la configuración de la dirección sigue este mismo patrón.

En este sentido, hay que mencionar que, además de poder elegir si circulas en modo eléctrico (EV) o híbrido (EV/HV), por medio de un selector puedes optar por las posiciones Eco, Normal, Sport y Trail (para terrenos con poco agarre).

¿Cómo es por dentro?

Una vez analizado su conjunto mecánico y su respuesta dinámica, paso ya a hablarte de aspectos más prácticos. Y comienzo por el espacio disponible, que es bastante amplio. La posición de conducción es relajada y sus asientos bien contorneados hacen que enseguida te sientas cómodo. 

En la segunda fila ofrece hueco de sobra tanto para la cabeza como para las piernas y más centímetros que la media en este segmento, gracias a su distancia entre ejes de 2,7 metros. En cambio, el maletero, aunque no es pequeño (de 520 a 1.604 litros; 60 menos que el RAV4 HEV), sí que cuenta con una capacidad inferior a la de otros SUV híbridos enchufables.

Y para terminar solo me quedaría hablar de la calidad de sus materiales y acabados, así como de los asistentes. Los materiales son correctos y los ajustes bastante precisos, aunque creo que Toyota debería refinarse en las botoneras, cuyo diseño no resulta muy premium. 

Además, usa grafías muy grandes (algo común a los fabricantes japoneses) y los gráficos del sistema multimedia parecen ya muy antiguos si los comparo con los que ofrecen algunos modelos de la competencia.

Mucho mejor es su equipamiento de seguridad, con el paquete de asistentes Toyota Safety Sense, que viene de serie y cuenta con frenada de emergencia, control de velocidad adaptativo, aviso de cambio involuntario de carril con centrado en el mismo y reconocimiento de señales de tráfico.

Mi opinión

Me gustaría darle más nota, pero no puedo pasar por alto que cuesta casi 50.000 euros. Es cierto que luego hay descuentos oficiales y Plan Moves, pero hay margen de mejora en eso. Por lo demás, un SUV cómodo, pintón y, lo más importante, ahorrador tanto en el día a día como en los viajes.

Valoración

Nota8

La experiencia de Toyota con coches híbridos es innegable. Con este RAV4 Plug-in Hybrid de la prueba quieren demostrar que han pasado de nivel...

Lo mejor

Autonomía, consumo, conducción y habitabilidad

Lo peor

Maletero, precio y sistema multimedia

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