Prueba del Land Rover Discovery Sport P300e: híbrido enchufable potente, refinado y 'offroad'

El Land Rover Discovery Sport P300e que hemos probado es el punto de entrada, por precio, para quien quiera conducir un híbrido enchufable de la marca. La P significa Petrol (gasolina en inglés), los 300 para los caballos de fuerza aproximados, y la “e” indica discretamente la capacidad de conducir de forma puramente eléctrica este Land Rover. 

Un vistazo a la lista de precios muestra que incluso el híbrido enchufable más barato de Land Rover no es realmente barato: este modelo cuesta más de 60.000 euros. Al menos, este precio base ya incluye detalles caros de fábrica: gran sistema de navegación, llantas gruesas de 20 pulgadas, control de crucero adaptativo, asientos ajustables eléctricamente, potentes faros LED o acceso sin llave, todo sin cargo.

Y aún puedes hacer que el P300e sea considerablemente más caro, por ejemplo, ordenando asientos de cuero típicamente ingleses. Pero incluso el  tapizado de tela estándar no parecen en absoluto barato y destila un aire refinado.

Motor

El Discovery Sport corresponde estructuralmente a categoría del Volkswagen Tiguan. Con un motor delantero instalado transversalmente, adopta los principios de diseño de esta clase de SUV compactos, incluso cuando el Land Rover es casi diez centímetros más largo que el líder de la clase alemana.

Pero el Land Rover es más sofisticado que el Volkswagen bajo el capó, con sus sistema híbrido enchufable con tracción total. 

Con este modelo,  Land Rover implementa la tracción a las cuatro ruedas de una manera técnicamente relativamente simple: dado que los coches híbridos requieren dos motores de todos modos, simplemente han colocado uno en cada eje. En la parte delantera, debajo del capó, se encuentra el motor de combustión más pequeño actualmente de la empresa: un gasolina turbo de tres cilindros que cubica 1,5 litros, lo que suena a poco, pero extrae una impresionante potencia de 200 CV.

Y en el eje trasero se encuentra el accionamiento eléctrico adicional, un motor eléctrico de 80 kW, es decir, 109 CV. Por lo tanto, este Land Rover no tiene conexión mecánica entre la tracción delantera y trasera, ni eje cardán, ni tracción total mecánica.

Comportamiento 

Al acelerar, el pequeño motor turbo de gasolina tira de las ruedas delanteras, mientras que el accionamiento eléctrico empuja desde atrás. Suena más inarmónico de lo que realmente es. Porque en realidad, el tres cilindros en la parte delantera funciona mucho más cultivado de lo que generalmente se cree que es el caso de este tipo de motores. 

El pequeño propulsor de gasolina, además, está hábilmente adaptado a su transmisión automática de ocho velocidades. Casi siempre cambia de forma correcta y apropiada, excepto cuando se conduce al límite en carreteras de montaña, pero en general el P300e siempre responde extremadamente armonioso.

Y el accionamiento eléctrico adicional en el eje trasero también encaja en esto. Con sus 109 CV y 260 Nm, permite una conducción puramente eléctrica sin parecer un motor “improvisado”. 

Un arranque rápido es tan natural como un tramo corto de autopista a 130 km/h. Pero a partir de 80 km/h consume mucha energía de la batería de iones de litio de 12,7 kWh, y la autonomía eléctrica apenas llega a 30 kilómetros. Si moderas el ritmo, puedes alcanzar los 49 kilómetros, como hicimos nosotros en la prueba. El fabricante incluso promete 57 kilómetros según la medida estándar WLTP.

Si tienes tiempo y no tiene que ir más lejos, el P300e puede cargarse con hasta 7 kW de corriente alterna (CA) en un ‘wallbox’ en casa. En la práctica, esto significa que después de unas dos horas vuelve a haber suficiente energía para los próximos 50 kilómetros eléctricos. 

Cualquiera que se tome en serio la conducción eléctrica, incluso en distancias más largas, y quiera aprovechar una estación de carga pública en el camino, puede hacerlo con hasta 32 kW de corriente continua (CC).

En el mejor de los casos, la carga completa se reduce a poco menos de media hora; Por supuesto, no puedes recorrer más de 50 kilómetros después. Sin embargo: esta opción de carga rápida de CC es una excepción digna de elogio en el ámbito de los híbridos enchufables; muchos competidores no la tienen.

Cuando la batería híbrida está definitivamente vacía en viajes más largos, el pequeño motor de combustión tiene que trabajar solo para mover los 2.236 kilogramos de peso en vacío más la tripulación. 

Hasta unos 140 km/h, el P300e no parece flaquear incluso cuando se agota la batería híbrida. Pero por encima de este rango de velocidades hay que tener paciencia y dejar que el pequeño motor turbo de gasolina gire con ganas. Por supuesto, eso cuesta gasolina, y no muy poca. Esto solo es un problema en autovías alemanas sin límite de velocidad, claro. En nuestro país no es el caso.

De media, el motor de gasolina consume solo unos aceptables 8,6 litros/100 km sin asistencia eléctrica, pero a velocidades más altas en autopista también puede tener una sed significativamente mayor: en nuestra prueba, hasta 14,4 litros/100 km. 

Es bueno que Land Rover también se haya abstenido de reducir el tamaño del tanque de gasolina en este modelo híbrido. Con su capacidad de 57 litros, se puede lograr una autonomía aceptable del motor de combustión: unos buenos 650 kilómetros con una batería vacía, que anteriormente permitía casi 50 kilómetros más puramente eléctricos si estaba cargada. 

Al desacelerar o al frenar leve o moderadamente actúa un generador y, por lo tanto, bombea electricidad nuevamente a la batería; Energía que, de otro modo, los frenos de las ruedas habrían convertido en calor inútil. 

Especialmente en rutas montañosas, puedes ver en los instrumentos cuánta energía cinética hay en un automóvil que rueda cuesta abajo y cuánta de ella se puede recuperar.

Al desarrollar este híbrido enchufable, era muy importante para la gente de Land Rover que la tracción total también funcionara cuando la batería está descargada. El accionamiento eléctrico adicional en el eje trasero también debería avanzar cuando la batería está vacía. La prueba muestra que también lo hace de forma fiable. Pero, ¿de dónde viene la electricidad necesaria para esto?

Por un lado, el generador de arranque alimentado por el motor de combustión envía inmediatamente la electricidad que produce al accionamiento eléctrico del eje trasero. 

Y por otro lado, la batería híbrida aparentemente siempre mantiene una reserva de electricidad para tales situaciones de emergencia, incluso cuando el indicador de la batería señala que está vacía. En cualquier caso, el accionamiento eléctrico adicional siempre se realiza de forma espontánea, potente y sencilla. 

El hecho de que Land Rover se tome en serio la capacidad todoterreno de sus modelos electrificados se puede ver en el sellado cuidadoso de todos los componentes de la transmisión para evitar la entrada de agua. Por eso, los británicos anuncian la misma profundidad de vadeo de 60 centímetros que para las versiones de combustión convencional del Discovery Sport.

Modos de conducción ocultos

Pero este Land Rover también está a la altura de su marca cuando se trata de otros valores todoterreno. 21 centímetros de distancia al suelo son los mejores en esta clase de SUV. 

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Y los británicos también pensaron en el diseño de los voladizos de la carrocería: prescindieron por completo de los spoilers en forma de pala. En su lugar, la proa y la popa se han redondeado inteligentemente para reducir el riesgo de tocar fondo y de sufrir daños. Los ángulos de salida de 25 grados en la parte delantera y 30 en la trasera son dignos de honor en esta clase.

Además, Land Rover también tiene disponibles varios modos de conducción para este modelo híbrido que el conductor puede seleccionar. No todos los encuentras de inmediato. Se esconden en la perilla de control de clima derecha, que se convierte en un control de potencia cuando la presionas. Solo entonces aparecen los pictogramas para los diferentes modos de conducción, incluido un programa para arena.

Este modo a menudo resulta ser un salvavidas cuando estás atascado; incluso si el suelo es fangoso o está nevado. En el programa Sand, la electrónica de control asigna una cantidad particularmente grande de par motor a las cuatro ruedas cuando intentas arrancar. 

Factores para decidir la compra

Incluso el híbrido más barato de Land Rover no es barato, pero a pesar del pequeño motor de combustión de tres cilindros, es cualquier cosa menos un vehículo improvisado con tracción en las cuatro ruedas: es sorprendentemente potente, refinado y capaz en condiciones offroad. Aunque los 49 kilómetros eléctricos no son para tirar cohetes.