Con un diseño más atractivo que el Fiat Multipla y seis plazas, lo tienes por menos de 4.000 euros de segunda mano

Hacerse hueco en el mercado del motor es algo complicado. Por norma general las marcas no dejan de presentar nuevos modelos de manera regular, lo que hace que la ventana de oportunidad de según que automóviles pueda ser escasa. Eso hace que vehículos que son bastante interesantes, en muchas ocasiones pasen desapercibidos.

Es el caso del coche que os traemos hoy, el Honda FR-V, un monovolumen que está considerado como el Fiat Multipla nipón porque, como el poco agraciado italiano, presentaba una configuración de seis plazas repartidas en dos filas de asientos, lo que es una auténtica rareza en la industria.

A pesar de tener dicho planteamiento, tenía unas dimensiones relativamente compactas que no eran impedimento hacer hueco en el interior: 4.285 mm de longitud, 1.810 mm de anchura, 1.610 mm de altura y 2.680 mm de distancia entre ejes.

Además, el hecho de repartir las plazas en solo dos filas en lugar de en tres, permitía que ofreciera un maletero mayor que rivales de siete asientos en configuración 2+3+2: tenía un volumen de 439 litros que se ampliaba hasta los 1.049 al abatir los posteriores.

Su trayectoria fue bastante corta, de apenas cinco años en el mercado, tiempo en el que solo se puso a la venta una generación que, eso sí, recibió una puesta al día de mitad de ciclo de vida.

En su lanzamiento solo se vendía con motores de gasolina, concretamente un 1.7 de 125 CV y un 2.0 de 150 CV; pero poco después incorporó a su gama una alternativa diésel de 140 CV que destacaba por ofrecer el menor consumo del trío (6,3 l/100 km).

Fue en 2007, para la recta final del modelo, cuando se estrenó la puesta al día, con ligeros retoques estéticos, una ampliación de su dotación de equipamiento y, sobre todo, reemplazando los dos motores de gasolina existentes hasta el momento por un nuevo bloque 1.8 de 140 CV, dejando una oferta conformada por dos bloques de idéntica potencia.

La nueva opción podía combinarse con una caja de cambios manual de seis velocidades o con una automática de cinco, registrando un consumo de 7,5 l/100 km en el primer caso y de 8,1 en el segundo.

Con todo lo comentado, no es de extrañar que su oferta entre los coches de segunda mano sea bastante escasa. De hecho, actualmente hay poco más de dos decenas de ejemplares a la venta en todo España.

Son ejemplares con una antigüedad alta, puesto que el modelo solo se fabricó entre 2005 y 2009. Sin embargo, al ser de aquel periodo, es posible encontrar versiones equipadas con motor diésel que tengan la etiqueta B de la DGT, así como algunos gasolina que lucen la C, por lo que especialmente estos últimos son una opción a considerar si se vive en una ciudad grande.

En términos generales acumulan bastantes kilómetros a sus espaldas, siendo los que tienen menos uso los que rondan los 150.000 km y pudiendo superar los 300.000 km los que tienen más.

Por lo que respecta a precios, la horquilla arranca en unos 3.000 euros, mientras que las unidades más caras pueden subir hasta los casi 8.000 euros.