Así es el nuevo Citroën C4 2020: 7 virtudes y dos defectos

Ya se saben muchas cosas del nuevo compacto de Citroën, hemos estado en la presentación, nos hemos subido y está dando mucho que hablar. Por eso, del nuevo Citroën C4, aquí van 7 virtudes y dos defectos, a bote pronto. 

Una de las estrellas del calendario de lanzamientos para finales de este año... o principios del que viene, según se mire y según esté finalmente disponible en los concesionarios, el Citroën C4 2020 se espera como agua de mayo. Y hay que reconocer que no va a dejar a nadie indiferente.

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1 Estética

Para gustos, los colores. Pero hay que reconocer que a pesar de ser un modelo de lo más rompedor desde la primera generación, sobre todo en su carrocería de tres puertas -incluso su volante en el que sólo se movía el aro llamaba la atención-, las últimas versiones habían resultado quizás demasiado conservadores. 

El nuevo C4 2020-2021 resulta imponente e innovador desde el primer vistazo. La zaga deja a todo el mundo pensativo -por lo menos- antes de decidir si gusta o no. Y aunque aún no esté en las tiendas, pensamos que habrá más de lo primero que de lo segundo. 

2 Segmento ¡compacto!

Hay vida más allá de los SUV... y este es en realidad un compacto, un segmento C de toda la vida, a medio camino entre los eficientes utilitarios y las denostadas berlinas. Pero un mercado que sigue liderando las ventas en España, al fin y al cabo.

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3 Aires SUV

Una de las cosas que más nos gustan del nuevo Citroën C4 es que se ha intentado ser un poco original en cuanto a sus formas, con lo que ellos llaman CUV (Coupé Utility Vehicle).

Esto significa, según los propios diseñadores -con los que hablamos hace un mes-, carrocería elevada tipo SUV, pero con un toque deportivo gracias a un techo descendente hasta el pilar C que recuerda a un coupé.

Las molduras '360º' de plástico en negro mate también acentúan ese toque seductor para no renunciar a la moda imperante.  

4 Guiños al GS

¿Te acuerdas del Citroën GS? Pues si te fijas y eres capaz de evadirte un poco ante tanta modernidad, puedes encontrar ciertos parecidos con aquella futurista berlina de hace medio décadas. 

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Por ejemplo, el frontal con las ópticas en 'v', el progresivo descenso en altura de la trasera, las ventanas laterales que acompañan a esta parte... y las formas en 'x' de la delantera y la zaga. 

5 Electrificación

Sin duda, en el nuevo Citroën C4, entre sus 7 virtudes (y dos defectos), está la electrificación, porque eso, al igual que en el Peugeot 208 y Opel Corsa, supone usar la plataforma flexible CMP del Grupo PSA.

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Esto supone que el cliente pueda elegir entre estos modelos con motorizaciones gasolina, diésel o 100% eléctricas... y, a su vez, el fabricante pueda responder rápidamente y en tiempo real en la misma línea de producción dependiendo de la demanda del mercado. 

6 Se fabrica en España

El nuevo Citroën C4 2020 se fabrica en la planta que tiene PSA en Villaverde (Madrid). Esto ha supuesto una inyección económica de 144 millones de euros y supone una inyección de seguridad y confianza a la hora de asegurar puestos de trabajo en nuestro país.  

7 Comodidad interior

Desde hace años, la firma del 'doble chevron' ha querido volver a potenciar uno de sus argumentos más potentes de cara a distinguirse dentro del Grupo PSA y respecto a la competencia exterior: "coches muy confortables con ese punto diferenciador" de los orígenes, como nos cuentan desde la marca. 

En este caso, la última generación del Citroën C4 tiene además un habitáculo que puesto de conducción apadrinado por el concepto Citroën Advanced Comfort, basado, como comentábamos en la presentación estática del modelo en cuatro pilares. 

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Concretamente, como nos contaba nuestro compañero Gabriel Jiménez de primera mano, tal y como le transmitían sus creadores: "confort de rodaje (libre de perturbaciones exteriores tanto a nivel de suspensión como de nivel sonoro para que se sientan a bordo como en una burbuja), confort de vida (volúmenes generosos, prácticos espacios de almacenamiento y una disposición inteligente de todos los elementos del habitáculo), confort de espíritu (reduciendo su carga mental mediante la organización y priorización de la información para presentarle únicamente aquellos datos que sean realmente útiles) y confort de uso (fluidez al uso del coche y de sus equipamientos con tecnologías intuitivas)".

...Y dos defectos

Por último, más allá de los detalles que tenemos que estudiar despacio cuando lo testemos a fondo, como una botonería quizás demasiado pequeña, podemos mostrar reservas ante otros aspectos de los que sí tenemos ya información. 

• Por ejemplo, el hecho de que no haya prevista una mecánica híbrida ni híbrida enchufable (PHEV), sino que la electrificación pase necesariamente por el Citroën e-C4 (100% a pilas). 
• Y por supuesto, para los amantes de la historia, el automovilismo y el ADN de Citroën en competición: tampoco va a haber un C4 WRC, como el que llevó a la gloria Sebastien Loeb... y que muchos aficionados pudieron disfrutar, salvando todas las distancias, con una edición conmemorativa pero de calle del Citroën C4 de Rallys.