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Prueba Lexus ES 300h 2021: ¿sus retrovisores digitales son el espejo de su alma?

Prueba Lexus ES 300h 2021. Aunque llegó a Europa en 2018, lo cierto es que el Lexus ES es uno de los modelos, junto al LS, que vieron nacer a la división de lujo de Toyota. De hecho, se trata de la séptima generación de este Elegance Sedan, que es lo que se esconde tras las siglas ES. 

Ahora le llega el momento al sedan de Lexus de mostrar una novedad que afecta al exterior y sobre todo al interior. Y es que el nuevo Lexus ES estrena en exclusiva –y de serie– en el acabado Luxury los espejos retrovisores digitales (digital mirrors).

La de los espejos digitales es una solución destinada a los amantes de los gadgets tecnológicos y que ya hemos podido ver en modelos como el Audi e-tron o el Honda e, más recientemente, ambos dos coches eléctricos y cuyo público –early adopters– abraza con sumo gusto.

En este vídeo puedes descubrir cómo funcionan los espejos retrovisores digitales del Lexus ES 300h.

He de admitir que aunque me fascina la tecnología, creo que soluciones como los espejos retrovisores digitales como los del Lexus ES 300h no me parecen a día de hoy un capricho imprescindible y, sobre todo, me mantengo en la postura –quizá esté equivocado– de que a más tecnología, más riesgo de que falle un 'fusible' y comprometas la seguridad, en este caso, por falta de visibilidad.

Sea como fuere, el movimiento se demuestra andando y la mejor manera de medir la utilidad de los espejos retrovisores digitales es probándolos al volante del Lexus ES 300h. 

El Lexus ES 300h 2021, que está basado en la plataforma GA-K, más rígida y ligera, monta el motor híbrido de 160 kW (218 CV), capaz de catapultar al sedán japonés de 0 a 100 km/h en 8,9 segundos. Antes de acceder a su interior, le echo un vistazo general al ES 300h. Sin duda, aunque sea una carrocería en horas bajas en Europa, es una berlina elegante, a la japonesa, pero elegante. Destacan los espejos retrovisores, finos, como un par de cuernos.

Prueba Lexus ES 300h 2021

Cuando accedo al interior del Lexus ES 300h, sentimientos encontrados. Por una parte, todo el mimo que han puesto los maestros artesanos takumi de la marca premium ofreciendo un interior de altísima calidad, excelentes materiales y aún mejores acabados, se ve algo ensombrecido por una ubicación de las pantallas de los espejos retrovisores digitales a mi juicio mal resuelta por parte de los diseñadores de Lexus. 

Y es que los 'digital mirrors' están 'pegados' al pilar A del Lexus ES 300h. En el Audi e-tron están en incrustados en la parte superior de las puertas, y aunque desde un punto de vista de diseño está bien integrados, en lo que a funcionalidad se refiere, obliga a a bajar la vista y requiere cierto aprendizaje. En el caso del Honda e, los espejos retrovisores digitales están integrados en ambos extremos del salpicadero, integrados de forma natural. Pero en el caso del Lexus ES, parecen un 'pegote'. Una lástima, porque ensombrecen, como decía, un interior elegante.

Prueba Lexus ES 300h 2021

La pregunta que surge entonces: ¿al menos funcionan bien? Y la respuesta es: claramente sí. El día de la prueba del Lexus ES 300h 2021 llueve copiosamente en Madrid, y en la sierra, donde se hace la prueba de verdad, aún más. Inicio la marcha con cierta cautela porque la cabra tira al monte y a la hora de maniobrar mi vista se dirige automáticamente al exterior, pero las pantallas de los espejos retrovisores digitales captan inmediatamente mi atención. 

Y a medida que voy avanzando y tomando más velocidad, lo cierto es que mi vista se acostumbra rápidamente a fijarse en esas pantallas que, aunque desde el punto de vista de diseño no es una solución brillante, lo cierto es que cumplen con creces en cuanto a funcionalidad se refiere.

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¿Y qué hay del resto del vehículo? En el apartado tecnológico, nuevo tirón de orejas en lo que al sistema de infotainment se refiere. Es de alabar que el Lexus ES 300h esté disponible con Android Auto y Apple Car Play, pero no entiendo la utilidad del touchpad que, según me contaron técnicos de Lexus, tanto fascina en Japón. Es más, el espacio dedicado al touchpad lo podrían haber aprovechado para instalar la carga inalámbrica del smartphone y olvidarnos así de una vez de los engorrosos cables.

Al volante de Lexus ES 300h: sensaciones dinámicas

Si nos centramos en los aspectos dinámicos del Lexus ES 300h, lo cierto es que el sedán japonés me ha gustado. Por una parte, se aprecian los trabajos realizados en la parte inferior del chasis y que ha reducido enormemente la rumorosidad y, sobre todo, la –a mi gusto– poco agradable sonoridad del motor acoplado a la evolucionada transmisión CVT.

Por otro lado, también se aprecia mucho las mejoras realizadas en cuanto a la rigidez del chasis, sobre todo en el paso por curva, donde las carrocería apenas experimenta oscilaciones. Al mismo tiempo, el tren de rodaje es más confortable. La dirección, sin ser la de un Porsche, tiene una dureza más que aceptable y aunque me gustaría que fuera más comunicativa. 

En general, el Lexus ES 300h sobre todo en modo Sport responde son solvencia cuando hay requieres par y potencia, aunque sonoramente no sea muy del todo agradable. Lo mejor, circular en ciudad, con el módulo eléctrico activado, con sumo silencio. Ahí, el Lexus vence y convence. Es más, y los espejos retrovisores digitales demuestran todo su potencial al maniobrar marcha atrás al aparcar, pues tienen zoom automático y aportan las referencias necesarias, aspecto en el que, por ejemplo, fallan los del Audi e-tron.

Y sería un coche híbrido definitivo, elegante, moderno, sostenible y, sobre todo, diferente a los premium de la competencia, si en la próxima generación se olvidan del touchpad y mejoran la solución de ubicación de las pantallas de los espejos retrovisores digitales. Solo así se cerrará el círculo que persigue Lexus: ser una marca de estilo de vida. Y ya sabe que la cara –el diseño– es el espejo del alma... 

El Lexus ES 300h 2021 está disponible desde 47.900 euros, mientras que el acabado Luxury, que es el único que ofrece los 'digital mirrors' (de serie) cuesta 72.200 euros.

Valoración

Nota7

Prueba Lexus ES 300h: en su acabado Luxury ofrece de serie los espejos retrovisores digitales. Funcionan bien, pero no su ubicación no está elegantemente resuelta.

Lo mejor

Buen dinamismo de marcha, chasis más firme y suspensiones más confortables. Los espejos retrovisores digitales funcionan muy bien, pero...

Lo peor

...  'pegarlos' al pilar A no parece la solución más elegante. El sistema de infotainment se ha quedado algo obsoleto, y el touchpad sobra.

Etiquetas: lujo

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