Algo tan salvaje ha preparado Hyundai que hace temblar al coche eléctrico común

Los coches eléctricos siguen teniendo muchos detractores, pero le pese a quien le pese son un exponente de hacia donde va la industria, no solo con los modelos comunes, si no también en materia de alto rendimiento. Por eso no es de extrañar que las marcas empiecen a caminar en esta dirección y Hyundai es el último ejemplo de ello.

La firma coreana está haciendo crecer su familia de cero emisiones, pero por el momento solo el Ioniq 5 ha recibido una versión deportiva en forma de variante ‘N’. Ahora, ésta muestra todas las opciones de personalización que podrá tener ya desde este mismo año gracias al Hyundai Ioniq 5 N NPX1.

Es un prototipo, pero a la par hay que considerarlo como un expositor de todas las “chuches” que va a poder recibir si así lo desean sus compradores.

Lo cierto es que entra por los ojos y seguramente cumpla con las expectativas de aquellos que esperaban un diseño más arriesgado para el Ioniq 5 N, que a grandes rasgos tampoco radicalizó demasiado la imagen del modelo convencional. 

Eso se solventa en esta variante, que ha recibido un tratamiento de tuning intensivo, con la fibra de carbono como principal protagonista en lo que respecta a piezas exteriores.

Sus formas son perfectamente reconocibles, pero son bastante más agresivas. La parrilla permanece inalterada, pero los grupos ópticos parecen perder los intermitentes. El paragolpes si recibe modificaciones importantes, variando el entramado de la entrada de aire, que aumenta su tamaño, sumando dos adicionales en los extremos y creciendo en la parte inferior.

Particularmente llamativas son las aletas verticales delanteras, situadas en los laterales y que se extienden hasta los pasos de rueda. Éstos parecen algo más anchos, pero no podemos afirmarlo con seguridad, y alojan unas llantas específicas envueltas en unos neumáticos Pirelli P Zero. 

Los faldones laterales también llegan hasta más cerca del suelo y cuentan en la parte posterior con una entrada de aire, pegada al paso de rueda trasero.

Por último, en la zona trasera no falta un enorme alerón, así como un difusor que también llama la atención.

Hasta ahí lo habitual en el tuning y las prepraciones (a lo que sumarán también piezas para poder personalizar el interior del vehículo), pero lo realmente interesante es lo que Hyundai tiene preparado basándose en la naturaleza eléctrica del modelo, algo que abre un nuevo abanico de posibilidades.

Lo comenta Joon Park, vicepresidente de N Brand Management Group: “En 2024, Hyundai Motor Company dará un paso adelante como líder en nuevas piezas de tuning adecuadas para la era de los vehículos eléctricos de alto rendimiento, como lo demuestra el modelo conceptual 'NPX1'”.

Y la clave está en lo siguiente: “No nos limitamos al tuning de piezas, también estamos desarrollando la personalización del software, como sonido y calibración del vehículo mediante actualizaciones remotas, que abrirán una categoría completamente nueva de personalización de vehículos eléctricos para un futuro emocionante para la comunidad del tuning”.

Y es que aunque las OTA se utilizan cada vez más, darles un giro extra para ofrecer nuevas posibilidades de personalización parece el camino a seguir en el tuneo de coches eléctricos.