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Prueba Mercedes EQA 250: un SUV eléctrico con una estrella casi brillante

Se puede acoger al Plan Moves 3

Prueba Mercedes EQA 250. De un tiempo a esta parte no hago más que probar coches eléctricos, lo que pone de manifiesto que la electromovilidad ha llegado para quedarse. En esta ocasión me voy a poner a los mandos del segundo modelo eléctrico 100% de Mercedes.

Se trata del Mercedes EQA, SUV eléctrico 100% y que deriva del Mercedes GLA. No voy a entrar en detalles estéticos, pues hace tiempo que la marca de la estrella dio el giro necesario para rejuvenecer su público objetivo, y desde entonces los Mercedes son coches con un gusto exquisito. Al fin y al cabo, su lema de 'Lo mejor o nada' también es extensible al diseño.

Lo que sí voy a recordar son sus datos técnicos más relevantes para todo aquel que esté pensando en comprarse un coche eléctrico: potencia de 140 kW (190 CV), tracción delantera, autonomía de entre 399 y 424 km –en función del uso que se le vaya a dar, ya sea combinado o solo urbano– en ciclo WLTP; aceleración 0 a 100 km/h en 8,9 segundos; consumo combinado entre 17,9 y 19,1 kWh/100 km; y carga del 10 al 80% en 30 minutos en un punto de recarga rápida. Y lo más importante: el Mercedes EQA es legítimo acreedor de la etiqueta cero emisiones de la DGT.

Hasta aquí las presentaciones. Es momento de catarlo como manda Irlanda. Accedo a su interior, en donde confirmo que estoy a bordo de un Mercedes: diseño interior cuidado, con excelentes acabados, mejores materiales, ergonomía de 10 y unas grandes pantallas que destilan modernidad por todos los poros.

 

Vídeo: comparativa entre el Mercedes EQA y el Lexus UX 300e

Eso sí, me choca el touchpad que ya he visto en otros modelos de la competencia premium como Lexus, y que me parecen poco útiles y eficaces sobre todo cuando quieres usarlo mientras estás conduciendo. Pero, como todo, supongo que al comprador del Mercedes EQA quizá le parezca un gran invento. Para gustos, los colores.

Echo un vistazo a la instrumentación: parto con 368 km de autonomía y por delante tengo un recorrido de más de 100 km. Vamos a comprobar de lo que es capaz este SUV eléctrico.

Prueba Mercedes EQA 250 eléctrico
Rodrigo Fersainz
Prueba Mercedes EQA 2021

Y los primeros compases me confirman que estoy a bordo de un Mercedes una vez más. Y es que no solo es por el silencio de marcha, sino también por el confort. Quiero aclarar que con silencio de marcha no me estoy refiriendo a cero decibelios; y lo comento porque un lector me dio recientemente una clase magistral del 'no ruido', y no está en mi ánimo ofender a ningún colectivo, y menos faltar a la verdad, aunque se trate de un recurso periodístico-literario.

Sea como fuere, los primeros compases de esta prueba del Mercedes EQA son con un aislamiento acústico y una comodidad como solo Mercedes sabe hacerlo. Me meto en carretera y comienzo a jugar con los modos de conducción. 

Empiezo en Confort, mientras voy adecuándome al sistema de infotainment, y lo cierto es que o bien soy un poco cenutrio –que lo soy, para qué negarlo– o bien el sistema de navegación del Mercedes EQA no goza del nivel de 'Lo mejor o nada' de Mercedes. 

Y es que me resulta poco preciso, en ciertos desvíos se anuncia el cambio de dirección justo en el momento de hacerlo con el estrés que ello genera, sin olvidar que el grafismo no es nada del otro mundo. ¿Tan difícil es replicar el modo en que lo hace Google Maps?

mercedes eqa virtudes defectos

Dejo el apartado tecnológico para centrarme en las características dinámicas del Mercedes EQA. Y lo primero que me llama la atención es la falta de 'push', la falta de empuje inicial. A ver, no nos rasguemos las vestiduras. Como todo, hay que aplicar la ley de la relatividad, y no la de Einstein, sino la de que todo es relativo. 

Y en este caso, esta falta de push inicial me surge porque recientemente he estado probando el Volvo XC40 Recharge y, lo cierto, es que en el caso del SUV sueco, es el empuje inicial es descomunal.

En esta prueba del Volvo XC40 Recharge puedes leer a lo que me refiero

Y es que incluso en modo Sport, el Mercedes EQA 250 carece de una salida fulgurante, de esas que te provocan en el estómago una suerte de montaña rusa muy adictiva. A ver, hay que tener en cuenta que el EQA tiene menos de la mitad de potencia que el Volvo XC40 (190 vs 408 CV) y casi la mitad de par también (375 vs 660 Nm). Es de esperar que ahora que se han anunciado nuevas versiones de 168 kW (228 CV) y 215 kW (292 CV) las prestaciones mejoren considerablemente. 

En cualquier caso, y esto pura especulación, supongo que los desarrolladores de Mercedes, a falta de una mejora en la gestión de la batería de 66,5 kWh, quieran cuidar por encima de todo la carga, y para ello hay que renunciar a sensaciones de infarto.

Prueba Mercedes EQA 2021

Por otro lado, además de la falta de 'push' inicial, otro dato que me deja como un perro sin su hueso es que una vez llegados a los 160 km/h, se acabó la fiesta, ya no hay más, por mucho que quieras seguir pisándole. ¡Simplemente, 'Auf Wiedersehen! Una vez más, hay que cambiar el enfoque: el Mercedes EQA es un coche eléctrico y eso implica también un cambio de hábitos al volante, así como de mentalidad.

Por lo demás, el EQA tiene un comportamiento exquisito: dirección precisa, que te lleva el coche por donde le dices, muy comunicativa, el paso por curva no provoca excesivas oscilaciones de la carrocería –las baterías en el suelo ayudan–, y sus suspensiones lo filtran todo todo todo. Es, como buen Mercedes, una alfombra rodante.

En cuanto al consumo en esta prueba del Mercedes EQA, y tras 114 km de recorrido por autopista y tramos urbanos y exigiéndole en subidas con el aire acondicionado activado, el gasto se ha quedado en 23,2 kWh y una autonomía de 195 km.

Prueba Mercedes EQA 2021

En cuanto a los precios, el Mercedes EQA tiene una factura de acceso de 49.900 euros (se puede acoger al Plan Moves 3, pues su precio sin impuestos es inferior a los 45.000 euros), y en renting la cuota mensual a 36 meses y con una entrada de 10.704,79 euros queda fijada en 625 euros.

En resumen: me ha gustado el Mercedes EQA. Eso no quita para me guste con un poco más de picante para que sea una estrella brillante.

Valoración

Nota8

Prueba Mercedes EQA 250. Este SUV compacto y eléctrico, derivado del GLA, demuestra el buen hacer de Mercedes, pero le falta brío y otros aspectos son mejorables.

Lo mejor

Silencio de marcha, confort a bordo, acabados de primera categoría

Lo peor

Le falta 'push' inicial, el sistema de navegación a veces no es muy preciso

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