Así va a afectar a los coches europeos la irrupción de los chinos eléctricos

¡Que vienen los chinos! Este puede ser el grito que más se esté escuchando en estos momentos en el seno de la industria automovilística europea. Y tienen motivos para estar preocupados. ¿Cómo va a afectar a los coches europeos la irrupción de los coches chinos eléctricos?

Un gigante amenaza la industria del automóvil en Europa, un sector muy potente que, hasta ahora, nunca se había visto realmente amenazado. Pero las cosas están cambiado a pasos agigantados y sólo hay dos opciones: o Europa reacciona o se puede ver muy perjudicada. 

Hasta hace unos años, los coches chinos no suponían ninguna amenaza para los fabricantes europeos. Fabricantes que, durante ese tiempo, han trasladado a China sus fábricas para conseguir mano de obra barata y aumentar los márgenes de beneficios. Cada vez se venden menos coches, sí, pero más caros, de modo que la cuenta de resultados sale siempre en positivo.

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Pero, durante todo este tiempo, los chinos han aprendido a fabricar automóviles de mayor calidad, hasta ofrecer un producto de características similares al europeo y, lo que es más importantes, con unos estándares de seguridad que cumplen con lo que se exige en Europa. 

Y todo esto acompañado de unos precios muy competitivos. Pero hay más: China ha sido uno de los países pioneros en la investigación y desarrollo del coche eléctrico, debido a sus elevados índices de contaminación y sobrepoblación. 

China, una potencia en el desarrollo del coche eléctrico

De modo que, para acabar con esa contaminación sin limitar la movilidad privada de su población, el estado chino se inició en el mundo de la electrificación, también porque los coches eléctricos no requieren de tanta tecnología como los de combustión y son más fáciles de producir. 

El resultado es que China se ha convertido en una potencia en electromovilidad (y en muchas más cosas), así como en la producción de baterías. Tanto es así que el gigante asiático es el principal productor de baterías y el resto de países y fabricantes del mundo están obligados a llevarse bien con Pekín. 

Además, China se ve favorecida por la decisión de la Unión Europea de abandonar el motor de combustión en 2035 y apostar por el coche eléctrico. China lleva varios años de ventaja en el desarrollo de esta tecnología, mientras Europa pretende abandonar una tecnología que domina (el motor de combustión) por otra que no (el coche eléctrico).

"El gigante asiático es competitivo en la tecnología de electrificación porque lleva muchos años fabricando vehículos eléctricos y suyas son las principales multinacionales de baterías", explica ANFAC a Business Insider España.

Por su parte, el director de comunicación de FACONAUTO, Raúl de Morales, indica que "está por ver si estos argumentos pueden poner en jaque a las marcas europeas tradicionales que, lógicamente, están viendo una amenaza por la fuerza con la que están llamando a las puertas de Europa".

España, un mercado interesante para China

En este contexto, España emerge como un mercado muy importante para China. ¿Por qué? Los motivos los explica Fernando Carranza, profesor de marketing en el ESIC: "Europa es uno de los mercados más interesantes a nivel global. Y dentro de ese contexto, España es uno de los cinco grandes mercados europeos que ofrece unas características ventajosas para los fabricantes chinos en términos de ventas”. 

“Además, ofrece otras características especiales, como la predisposición del cliente español a comprar coches asiáticos", añade.

Según el experto, esto se debe, por un lado, a que los españoles invertimos menos dinero en la compra de un vehículo nuevo que otros países, como Alemania, Italia, Francia o Reino Unido. Y, por otro, a "que en España el sentimiento de pertenencia a una marca local no está tan acentuada".

A esto hay que añadir que en España el mercado del coche eléctrico pequeño está mucho más abierto que en el norte de Europa, como explica Laia Pagès, responsable ejecutiva y científica de CARNET (el hub de investigación e innovación en movilidad urbana creado por la UPC, VW Group Research y Seat, y liderado por CIT-UPC).

Así va a afectar a los coches europeos la irrupción de los chinos eléctricos

La llegada del coche eléctrico chino es una noticia positiva para los usuarios, que podrán acceder a un vehículo cero emisiones a un menor coste, pero afectará a las marcas europeas. El sector de la automoción no crece mucho y, si aparecen nuevos actores, hay menos tarta que repartir.

El vehículo eléctrico chino "va a afectar muchísimo, porque un coche de explosión es muchísimo más complicado de fabricar y de mantener que un coche eléctrico", explica Laia Pagès. 

En la misma línea se expresa Raúl de Morales: "Respecto a las ventas, hay marcas chinas que ya van teniendo un peso para tener en cuenta en nuestro mercado. Este año puede ser importante porque algunas de sus marcas más destacadas ya van a empezar a operar y sus crecimientos pueden ser exponenciales".

Podemos ver lo que ocurrió en su día con las marcas japonesas y coreanas para vislumbrar lo que puede pasar con las marcas chinas dentro de unos años: "En el año 2000, entre todos los japoneses vendían solo el 3% de todas las matriculaciones de coches en España. Al cierre del 2022 solo Toyota alcanzó el 9% del mercado, siendo la marca más vendida en España y superando a marcas tradicionales como Seat o Renault", señala Fernando Carranza.

"De hecho, en 2022 la segunda y la tercera marca más vendida en España por detrás de Toyota fueron Kia y Hyundai. Es decir, el podio lo coparon las marcas asiáticas", añade. 

Segmentos pequeños

En otro orden de cosas, conviene subrayar que las marcas chinas no vienen a Europa a rivalizar con las marcas premium, sino con las generalistas y, especialmente, aquellas que ofrecen modelos económicos. 

"Los fabricantes chinos van a ir por la parte baja del precio en el mercado de los eléctricos y sufrirán más la marcas generalistas", afirma Fernando Carranza. Por tanto, son marcas como Seat, Skoda, Renault, Fiat… las que pueden verse más perjudicadas. 

Ante esta situación que se viene, las marcas europeas se lamentan de estar desprotegidas y piden medidas proteccionistas a la Unión Europea que les permita trabajar en igualdad de condiciones. 

De la misma manera que Estados Unidos ha aplicado la Ley IRA (para la reducción de la inflación) y China ha desarrollado políticas de apoyo a sus industrias, “Europa debe hacer lo mismo para que nuestra industria continúe siendo competitiva”, señala ANFAC.

"Es crucial que en Europa busquemos fórmulas que permitan equilibrar la irrupción de las marcas chinas, como pueden normativas que igualen las condiciones de producción de los mercados chino y europeo", concluye la asociación de los fabricantes.

Aún es pronto para saber con certeza cómo quedará el tablero automovilístico en Europa con el desembarco de los coches chinos eléctricos, pero está claro que tienen suficiente potencial como para hacer tambalear los pilares de una industria que, no olvidemos, es muy potente en el viejo continente y genera millones de puestos de trabajo.