El futuro del Audi TT es eléctrico y más grande, ¿acierto o error?

A poco que tengáis unas cuantas primaveras a vuestras espaldas, seréis conscientes de que el Ford Puma que acaba de ponerse a la venta tiene poco que ver con el que se vendió principalmente a finales de los 90. ¿Pero no íbamos a hablar del Audi TT? Sí, claro. No obstante, el ejemplo del modelo de Ford nos sirve más o menos para escenificar lo que va a suceder con el coupé de origen alemán. En el futuro será más grande y totalmente eléctrico. Es decir, será otra cosa.

El TT es un modelo que llegó también a finales de los 90, concretamente en 1998. Desde entonces le hemos visto cambiar de forma y poner a la venta diferentes versiones, a cada cual más deportiva. Su filosofía siempre ha sido la misma. Tamaño contenido, motores de cierta o mucha potencia y un comportamiento dinámico en el que se ha priorizado el rendimiento sobre el confort (lo que no quiere decir que carezca de esto último). En definitiva, un coche para emocionar. Por desgracia, sus ventas no son todo lo positivas que deberían, razón por la cual Audi ha decidido que su tiempo en este mundo ha acabado. Al menos en la forma que ahora lo conocemos.

Según han declarado no hace mucho desde el fabricante de los cuatro aros, el Audi TT va a ser sustituido por un nuevo modelo de mayores dimensiones y con motor eléctrico. O motores, puesto que está por ver cómo se estructurará la gama. Eso quiere decir que se basará en la plataforma MEB del Grupo Volkswagen, puesto que la PPE está pensada para vehículos de mayor rango como el Porsche Taycan y compañía. Eso sí, se intuye que el nuevo TT, o como quiera que se llame, va a ser de mayores dimensiones que éste, que recordemos que en su actual variante Coupé tiene una longitud de 4,19 metros.

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Es evidente que si Audi anuncia un coche que va a ser eléctrico y de mayores dimensiones que el TT, es imposible que se comporte como un TT. Y la firma teutona tampoco lo va a pretender. Aún no está claro si va a mantener esta denominación o simplemente va a ser un cambio de vehículo dentro de la oferta del fabricante, pero lo que sí podemos asegurar es que el que venga no va a ser un coche con las mismas pretensiones que el que nos deja.

El crecimiento que anuncia el sustituto del Audi TT, las pocas ventas que registra éste, y la moda SUV que está instaurada entre los compradores de coches, nos hace sospechar que desde Alemania valoran añadir un nuevo todocamino a su oferta. Y no sólo eso, sino que actualmente las baterías que podría utilizar el coche no permiten una carrocería muy pegada al suelo, lo que prácticamente 'obliga' a crear una unidad sobreelevada.

Ver cómo responde el público ante el cambio de carácter del TT de Audi va a ser interesante. Seguramente, si mantiene su actual denominación, haya mucho fan del modelo actual frustrado. Pasa con el Puma que nombrábamos al principio y eso que han pasado casi 20 años desde que se dejó de vender el original. Pero no quedará más remedio que adaptarse. La industria y el público se encaminan hacia los SUV y hacia los coches eléctricos. Hay que aceptarlo.

¿Acierta o se equivoca Audi?

Todo apunta a que será en el año 2022 cuando el nuevo Audi TT vea la luz. Entonces será momento de analizarlo como tal. Pasados unos años podremos ver también si ha sido un error o no este cambio de tercio que ahora se está gestando. Sin embargo, no hay que esperar tanto para dar una primera opinión acerca del proyecto. No vamos a discutir el camino tomado por Audi porque nadie mejor que ellos saben lo que necesitan y, sobre todo, lo que quieren. Sin embargo, harían bien en mantener la denominación TT impoluta. Una despedida con honores para un vehículo que ha dado muchas alegrías y que tiene muchos seguidores. Un nuevo TT de diferente tamaño y concepción no sería un TT. Mejor llamarlo de otra forma, aunque sea su sustituto en la gama alemana.