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Land Rover Freelander de segunda mano: cuatro virtudes y dos defectos

Land Rover Freelander

Si estás pensando comprar un SUV o un todoterreno, una de nuestras recomendaciones es el Land Rover Freelander de segunda mano. Te mostramos cuatro virtudes y dos defectos para que te decidas o no por este modelo con el que poder salirte del asfalto con total confianza.

Precio

Land Rover Freelander

Fue en febrero de 2015 cuando la firma británica dejó de comercializar el modelo en nuestro país. Por este motivo no podrás adquirirlo nuevo en el concesionario; la ventaja es que puedes encontrarlo de segunda mano a buen precio: desde 4.000 euros los hay de primera generación, incluso los de la última hornada, y por menos de 10.000 euros, los de segunda generación.

Materiales de primera en el interior 

Como nos tiene acostumbrados Land Rover en sus modelos, los materiales del habitáculo son destacados. Además, se suma que las piezas tienen unos ajustes muy logrados. Añade puntos el tacto que tienen los botones físicos. Por cierto, encontrarás un gran número, algo que agradezco, más aún viendo como son las consolas de los coches actuales, que carecen de ellos...

Comodidad a bordo

Sus suspensiones consiguen que el Land Rover Freelander sea un coche muy, muy cómodo. No tiene la agilidad de otros vehículos de la competencia, ni invita a recorrer de forma alegre un puerto de montaña debido a sus balanceos, pero es el precio a pagar por tener un automóvil realmente confortable, perfecto para realizar viajes largos.

Test de los 50.000 km: Land Rover Freelander TD4 Automático

Terrain Response

Land Rover Freelander

Es un Land Rover y como tal tiene que superar pistas de dificultad. Para ello, las versiones con tracción total equipan de serie el sistema 'Terrain Response' con varios modos: 'Normal', 'Barro y Roderas', 'Hierba, Gravilla y Nieve' y 'Dunas y Arena'. Para ser más eficaz en conducción off-road se suma el control de descenso de pendientes.

No puede equipar reductora

Sí, equipa el sistema 'Terrain Response' y el control de descenso de pendientes, como te he comentado, pero no reductora. De hecho, en ese momento era el único todoterreno de la compañía que no la montaba ni como opción -o, en su defecto, un sistema similar en funcionamiento-. En la actualidad existen dos SUV, el Land Rover Evoque y el Discovery Sport, que tampoco la traen.

Todas las pruebas del Land Rover Freelander

Solo dos motores diésel

Poca variedad en al gama de motores. En el Freelander más moderno, solo existían dos motores diésel: el eD4 y el SD4, ambos 2.2 con 150 y 190 CV, respectivamente. Este bloque era una evolución del del Freelander de 2006, solo que con mejoras para optimizar su funcionamiento, consumo y emisiones. 

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