Ford Fiesta EcoBoost Hybrid, 7 virtudes y 2 defectos

El Ford Fiesta EcoBoost Hybrid es la incorporación más reciente a la gama del utilitario (sin conta a la versión especial ST Edition presentada hace escasos días). Supone la llegada de la microhibridación al modelo, lo que siempre es algo positivo. Sin embargo, no todo pueden ser beneficios: aquí van sus 7 virtudes y sus 2 defectos.

Dos motores a elegir

Ford ha introducido la tecnología MHEV abriendo opciones para sus clientes, ya que está disponible para dos versiones del 1.0 EcoBoost, una con 125 CV, de acceso, y otra de 155, para aquellos que además de eficiencia busquen un mayor rendimiento.

Rebaja de consumo y emisiones

La presencia del sistema eléctrico de 48V con el arrancador/generador integrado impulsado por correa (BISG) permite que ambos motores reduzcan tanto el gasto de combustible como sus emisiones contaminantes. El pequeño homologa 5,0 l/100 km (un 5% más eficiente que el bloque sin tecnología MHEV) y 112 g/km de CO2, y el superior el mismo gasto y unas emisiones de 114 g/km.

Mayor rendimiento

Con esto en mente el de 155 CV parece mejor opción, pero es que también tiene otro argumento a favor: la presencia del sistema hace que puede generar 20 Nm de par extra respecto al bloque sin hibridar.

Etiqueta ECO

Los fabricantes utilizan los sistemas mild-hybrid como vía rápida para acceder a la etiqueta ECO de la DGT, que aporta considerables ventajas a sus poseedores: exención de pago del impuesto de matriculación, descuento en el ‘numerito’ que varía según la ciudad, descuento en las zonas del Servicio de Estacionamiento Regulado (SER), etc.

Más barato que con motores menos potentes

Esto es consecuencia del punto anterior. Echando un vistazo al configurador de Ford es fácil comprobar que el Ford Fiesta EcoBoost Hybrid de 125 CV arranca (sin descuentos) en 17.500 euros, mientras que el motor de 95 CV sin microhibridación y menos potente parte de los 18.501 euros.

En los cuatro acabados de la gama

En ocasiones cierto motor se limita a un acabado específico dentro de la gama de un modelo, algo que por suerte no ocurre aquí: el de 125 CV está disponible con los cuatro niveles de equipamiento de la gama (Trend, ST-Line, Active y Vignale). Eso sí, el de 155 CV se limita, como es lógico, al ST-Line, que es el que tiene el enfoque más deportivo.

Defecto: Solo con la caja de cambios manual

Tanto la versión de acceso como la más potente se combinan en exclusiva con la transmisión manual de seis velocidades, lo que puede ser un punto negativo para quienes prefieran un cambio automático, ya que dentro de la gama del Ford Fiesta el motor 1.0 Ecobooost de 125 sin microhibridación si se puede combinar con la caja de cambios automática de doble embrague y siete velocidades. 

Defecto: ¿Por qué no un HEV o PHEV?

Ford ha “tirado” de la nueva tecnología estrenada por el Ford Puma, que es más limpia y útil, pero es posible que a más de uno se le quede corto en el panorama actual y prefiriera una versión más electrificada, como por ejemplo PHEV… que no parece que vaya a llegar en un futuro próximo.