Comparativa: Peugeot 308 SW vs Volkswagen Golf Variant

Con un diseño de lo más atractivo, el nuevo Peugeot 308 SW se extiende hasta los 4,64 metros de largo, mientras la parte trasera delgada le da a este Peugeot bastante elegancia y dinamismo.

Diseño

El Volkswagen Golf Variant, de 4,63 metros de largo, se presenta con un acabado R-Line que también le da cierta garra a su aspecto, y la parte trasera se ve armoniosamente integrada en el diseño general. 

De un vistazo, las pequeñas diferencias en las dimensiones externas no se notan nada. Por dentro, los asientos deportivos del Volkswagen no solo ofrecen un agarre firme, sino también un buen confort.

El Peugeot exige algunas concesiones de los conductores altos, con su pequeño volante con la instrumentación por encima y sus asientos más pequeños y poco contorneados: pero una vez te haces a su puesto de conducción, es un coche cómodo. 

Un cubicaje de maletero de hasta 1.600 litros es más que suficiente para la vida cotidiana de la mayoría de las personas. Ambos prestan atención a las virtudes que se le suponen a un familiar de manera ejemplar. 

No faltan el piso de carga doble, el desbloqueo remoto del respaldo trasero, la toma de 12 voltios y el compartimento debajo del piso para la persiana trasera. El de Wolfsburgo, sin embargo, puede cargar 72 kilos más y también arrastrar objetos más pesados con la bola de remolque (200 kilos de ventaja).

Habitáculo

A pesar de la mayor distancia entre ejes, entrar en el 308 es más difícil. Y es que cuando hablamos de espacio para los ocupantes, el Peugeot está unos centímetros por detrás de su competidor alemán en todos los sentidos. En la parte trasera, los adultos realmente van más relajados que en el 308. 

Prueba a fondo del Volkswagen Golf Variant

Por otro lado, los galos no tienen debilidades en lo que respecta a la conectividad. Al igual que en el Golf, además del sistema de navegación y la radio, el aire acondicionado y los asientos con calefacción se controlan por voz. 

Lo que nos gustó especialmente del 308 fue que las superficies táctiles debajo del monitor para una selección rápida se pueden asignar libremente (aparte del botón de inicio).

Típico de Volkswagen: controles táctiles en el volante y monitor, y con el navegador Discover opcional, también se ahorra la rueda del volumen. 

Motores y comportamiento

El Peugeot pasa un poco más suave que el Golf sobre los baches. Por un lado, porque su tarado es más blando (lo que, a plena carga, lo acerca a tocar fondo), por otro lado, porque el Volkswagen, como R-Line, trae suspensión deportiva y llantas de 18 pulgadas. Esto hace que parezca más manejable y ágil, pero al mismo tiempo pierde en confort. 

El rendimiento de ambos es prácticamente el mismo. Ambos pasan de 0 a 100 en unos 10 segundos con sus 130 CV, y la punta está justo por encima de los 200 km/h. 

Gracias a los cuatro cilindros, el Volkswagen funciona con menos gruñidos que el Peugeot y su motor de tres, y el sistema de a bordo de 48 voltios apoya el comportamiento de arranque del (no siempre perfecto) doble embrague del Golf.

Aquí Peugeot brilla más con un buen convertidor automático. Ambos pueden navegar, aunque el 308 solo lo hace en modo eco.

Factores para decidir la compra

2° puesto: Peugeot 308 SW PureTech 130. La alternativa atractiva y económica, si bien, mejor cuando la parte de atrás vaya a estar ocupada habitualmente por personas no muy altas. El tres cilindros tiene un funcionamiento más que correcto. 

1er puesto: Volkswagen Golf Variant 1.5 eTSI. Incluso como familiar, el Golf demuestra una gran madurez y equilibrio. Si no optas por el acabado R-Line, ahorra en dinero y ganas en comodidad.