Prueba del nuevo Nissan Qashqai 2021: fue el primero y ahora es de los mejores otra vez

Empezar la prueba de un coche nuevo como este Nissan Qashqai 2021 es algo que siempre apetece. Te acercas al coche con una imagen preconcebida y con muchas ideas en la cabeza. Es lo que me ocurre ahora, cuando estoy ante la tercera generación de un modelo que presume de haber sido el 'inventor' del segmento en 2007. No sé si es para tanto, pero lo cierto es que muchos nos reíamos de la idea de Nissan de sustituir en cierto modo el compacto Almera por "otra cosa"

El caso es que el Nissan Qashqai , que se fabrica en Sunderland, Reino Unido, fue un éxito absoluto desde su lanzamiento. Curiosamente, a pesar de sus indudables buenos atributos, rara vez ha logrado la primera posición en las comparativas de AUTOBILD. ¿Quizá estamos ante la injusticia de las tablas de puntuación? No lo sé con seguridad, pero lo cierto es que ahora esto puede pasar a la historia, porque este seguro superventas de Nissan llega con cartas completamente nuevas. 

Interior del Qashqai 2021: parece más ancho... y lo es

Una de las cosas que más me ha llamado la atención la potenciación de la vida interior. No es ninguna tontería: muchas veces los fabricantes se olvidan de pequeños detalles que simplemente hacen la vida más fácil. Por eso me encanta ver que las puertas se abren en un ángulo de casi 90 grados. Los que tenemos niños en edad de ir en sillitas infantiles lo vamos a agradecer.

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Interior del Nissan Qashqai 2021 (6 imágenes)

Los que se sienten en las plazas traseras van a disfrutar de una postura cómoda y de espacio para las piernas y la cabeza. En la unidad de prueba, un Tekna con techo solar, se pierden unos pocos centímetros, pero yo creo que no va a ser dramático para nadie.

Como es unos pocos centímetros más largo, ancho y alto, también lo vas a notar cuando te pongas al volante. Lo que más me gusta es que la pantalla principal, la del sistema de infotainment, pasa de la parte central de la consola a la superior, por lo que ahora se ve y se maneja mucho mejor porque está en una posición mucho más natural.

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También da un buen cambio el cuadro de relojes. Hasta ahora han sido analógicos y de gran visibilidad y lectura, pero ahora le toca el turno a las pantallas, las animaciones y demás, que será de serie desde el acabado medio, el N-Connecta, que se va a llevar él solito la mitad de las ventas en España, según la marca.

Uno siente que este coche vale lo que cuesta: la sensación de calidad de los materiales no tiene reproche alguno, y solo encuentro unos pocos bordes de plástico poco acertados en los paneles de las puertas traseras y un ajuste que podría ser más firme en la zona de la pantalla central. 

Pero hay mucho de lo que maravillarse. Por ejemplo, el sistema de infoentretenimiento, completamente nuevo, aparte de los relojes digitales, estrena gráficos (creo que los hay mejores, pero tampoco están tan mal). Lo mejor es que se leen bien y con claridad y la lógica del manejo está bastante conseguida. Además, hay botones físicos que te facilitan eso de llegar a un determinado menú de manera rápida. Pero a mí lo que me emociona de verdad es encontrarme un equipo de climatización con ruletas y botones físicos. Qué maravilla.

Comienza la prueba del nuevo Nissan Qashqai: solo motores de gasolina

Como casi es norma en estos nuevos tiempos, las motorizaciones serán todas de gasolina y de un modo u otro van a estar electrificadas. En un principio habrá tres versiones, todas ellas 'mild hybrid', que compartirán el mismo motor 1.3 de cuatro cilindros turboalimentado:

• Qashqai 1.3 140 CV
• Qashqai 1.3 158 CV
• Qashqai 1.3 158 CV X-Tronic (2WD y 4WD)

Para empezar la prueba me pongo al volante de la versión de 140 CV. Te adelanto que es la que más me ha gustado, ya que ofrece una agilidad más que suficiente, funciona muy bien junto al cambio manual de seis velocidades y el consumo no es una locura.

Según me contaron en la marca, todos los modelos 2WD con llantas hasta 19" llevan un eje trasero de torsión rediseñado con amortiguadores más verticales. Precisamente, el que pruebo tiene ruedas de 19, así que llevo esa configuración. Me da la sensación de que la extensión es un tanto brusca a la hora de pasar por badenes, pero también tengo que reconocer que pasaba un poco más fuerte de lo normal para ver qué pasaba.

En circunstancias normales es suficiente fino y cómodo. De hecho, me sorprende el tacto de la dirección (recalibrada y con el motor en la cremallera y no en la barra de dirección) que es muy bueno a baja y media velocidad. No me gusta tanto en curvas rápidas, ya que me falta feeling y quizá me sobra asistencia. En todo caso, no es un coche que pida una conducción deportiva, así que no lo veo como un inconveniente.

 VÍDEO: El nuevo Nissan Qashqai, al detalle

Con el buen sabor de boca del 140 sigo la prueba del Nissan Qashqai con el 158 CV y cambio X-tronic. Uno de los ingenieros encargados de la dinámica del coche me contaba que se trata de un CVT con un convertidor de par. Cuando pisas poco el acelerador (hasta un 30%) funciona con la suavidad de un variador continuo, mientras que cuando hundes más el pie derecho un convertidor hace que funcione como una caja automática convencional. Además, tiene siete marchas prefijadas que no tienen por qué coincidir con las que electrónicamente el cerebro del coche decide aplicar. De locos.

En marca eso se traduce en que es un CVT "poco CVT". Sí que tienes esa sensación de que "lo que pisas" no es exactamente lo que recibes, pero no importa cuando vas tranquilo. Al hundir el pedal esperaba esa desagradable sensación de motor muy revolucionado que no gana velocidad, pero el salto a modo convertidor hace que la experiencia sea mucho más grata.

Si buscas el feeling al variador de un scooter lo vas a encontrar, pero dado el grandísimo aislamiento del coche, creo que ya no es un impedimento si quieres un Qashqai automático y no te decides por el CVT. Pruébalo.

Por qué el nuevo Qashqai no lleva el nuevo logo de la marca

Para terminar, salto al Qashqai 158 manual. Como la versión automática, sus ruedas de 20 pulgadas le permiten tener una suspensión multibrazo detrás que le hace ganar confort a pesar de llevar (por primera vez en este SUV) esos rodillos de 235/45 R20 (montaba unos Premacy 4). Dinámicamente es seguro que también le ayudará, pero no sabría decirlo, ya que conduje todo el rato por carreteras abiertas al tráfico.

Lo que si encontré mejor es su aplomo a alta velocidad y el tacto de su dirección. ¿Quizá me había acostumbrado a ella? Veremos más adelante cuando caiga el coche en mis manos durante más tiempo.

Con 158 CV no se puede decir que el coche sea lento, pero ganar 18 CV en la zona alta del cuentavueltas no me parece suficiente reclamo para optar por el más potente con el cambio manual. Aún así, empuja con ganas, sube de vueltas con alegría desde la zona media y entra en el terrenos de las 5.000 rpm donde se deshincha, aunque sigue hasta la zona roja en el '6'.

Como conclusión de esta primera prueba del Nissan Qashqai 2021 diría que esta tercera generación es mucho más madura y que ha dado un importante salto en calidad (también en algunos precios). Tanto que no me extraña que en la marca estén orgullosos de que hay un buen puñado de clientes que han reservado ya el coche y que vienen de SUV premium. Quizá esta vez el Qashqai sí que se alzará con más de un primer puesto en nuestras comparativas...