Prueba del Mitsubishi Colt 160 HEV, híbrido urbanita
Rodrigo García Vita
Con un diseño dinámico y alma francesa, el Mitsubishi Colt vuelve con una nueva generación que continúa la historia desde 1962.
Este modelo es uno de esos grandes buques históricos japoneses. Nacido en 1962, el Mitsubishi Colt se posicionó como un turismo del segmento B ciertamente interesante con multitud de versiones, tanto para suelo nipón como para países como Reino Unido. Pero en 2013 se dejó de fabricar.
Regresa ahora después de un buen letargo gracias a la alianza con Renault. Algo evidente, porque hereda muchos elementos de su primo, el Clio, tanto de diseño como a nivel tecnológico.
Se diferencia por una parrilla menos geométrica, con zonas cromadas a los lados, un diseño de ópticas con segmentos cuadrados, los emblemas de Mitsubishi, las llantas de 15, 16 o 17 pulgadas y... ya. Eso es todo. Compararlo es inevitable, pero hablemos de él.
Además de un diseño dinámico y un tamaño comedido, tenemos un interior bien rematado. No es de lujo ni mucho menos, pero observamos plásticos duros, asientos cómodos y bastante tecnología.
El coche de esta prueba, el Mitsubishi Colt 160 HEV Kaiteki+, cuenta con cuadro de instrumentos digital y una buena pantalla multimedia vertical que se eleva sobre la consola central y parte del salpicadero. Es simple, pero intuitiva y rápida. También compatible con Android Auto y Apple CarPlay de forma inalámbrica.
Por otro lado, no prescinde de botonería física, de conexiones USB y... ¿Jack de 3.5 mm? No, yo tampoco lo entiendo. En pleno 2024 esto es una reliquia que me deja entre extrañado e ilusionado por ver uno otra vez, aunque nadie lo vaya a usar.
El espacio en las plazas traseras es suficiente, pero no especialmente cómodo para gente alta. Lo normal en su segmento. Y para cuando vayas a hacer la compra, tendrás disponibles 391 litros de capacidad de maletero. Algo menos en el híbrido que en las versiones gasolina.
A la hora de la conducción, su hábitat natural son las calles y avenidas de las ciudades. Es silencioso, suave y calmado. Tiene incluso una palanca para activar el modo EV, que nos permitirá circular usando solo energía eléctrica durante algunos kilómetros a baja velocidad.
Todo ello con unos consumos que, dependiendo de las condiciones, oscilan los 5,0 l/100 kilómetros en ciclo mixto. Algo más en autovía, donde también se muestra como un vehículo bastante rápido y vivaz, gracias a esos 36 kW extra de potencia que se añaden a su motor 1.6 de cuatro cilindros.
Solo remarcar que la caja de cambios automática, en modo Sport hace algunos extraños durante las aceleraciones fuertes o frenadas. Rápidamente rectifica, pero ese retardo de un segundo es notable en marcha.
El Mitsubishi Colt 160 HEV está disponible desde 25.490 euros en el acabado Kaiteki y se eleva hasta 27.990 euros con el tope de gama (Kaiteki+). El Clio, con su misma mecánica, desde 21.974. No hay mucho que añadir.
Valoración
El Mitsubishi Colt híbrido es un utilitario perfecto para entornos urbanos y viajes esporádicos. Fácil de conducir y aparcar, con buen equipamiento y, en general, agradable. Sin embargo, su hermano, el Renault Clio, es bastante más barato.
Lo mejor
Interior bien rematado. Funcionamiento de su motor. Consumo.
Lo peor
Plazas traseras sin mucho hueco para gente alta. Caja de cambios hace extraños durante las aceleraciones fuertes o frenadas, Más caro que el Clio.
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