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Mercedes Clase T: un multiusos para los que buscan algo premium

Probablemente no sea el Mercedes de tus sueños, pero sin duda te dejará muy satisfecho...

Se podría decir que el Mercedes Clase T de esta prueba es una navaja suiza con ruedas. Lo cual es bueno, porque te da una idea de lo que puede hacer, pero también tiene algo malo: no es precisamente barato.

En Mercedes lo saben, pero no parece importarles lo más mínimo. De hecho, con un frontal muy trabajado y que se parece al resto de modelos de la marca y con una lista de equipamientos que te podría dar a entender que estás ante un Clase A, el nuevo MPV ofrece mucho espacio, capacidad y rendimiento.

Diseño e interior

Precio del Mercedes Clase T

Seguramente ya sepas que el Clase T se ha desarrollado junto al Renault Kangoo. De hecho se fabrica en la línea, lo que puede llevar a alguno a torcer el gesto. Y no seré yo el que le culpe, ya que en interior recuerda bastante a su hermano francés, mucho más barato.

Pero he venido a hablar de este modelo, así que me voy a centrar en él. Empiezo la prueba acomodado en el asiento delantero de cuero sintético ARTICO que pertenece al acabado intermedio Style. Se regula en altura y también tiene ajuste lumbar, lo que es de agradecer.

Tres poderosos rivales para el Mercedes Clase T

A mi alrededor disfruto de mucho espacio tanto a lo ancho como, especialmente, a lo alto. La consola central es aparente y, aunque no dejo de percibir cierto aire a industrial, tiene un buen acabado, materiales decentes y un diseño agradable.

En cuanto a la pantalla central, tiene el mismo diseño gráfico de cualquier Mercedes y además cuenta con el sistema MBUX con reconocimiento de voz natural que funciona muy bien. La parte mala es que hay funcionalidades que no están disponibles. Por ejemplo, el "Hey, Mercedes, tengo calor" no actúa sobre el climatizador porque no está disponible.

Según Mercedes, el Clase T es un modelo enfocado a familias activas. Por capacidad de maletero y opciones para ello cumple bien: desde accesorios para llevar animales a una pletina en la que encajar un par de bicicletas en el interior.

Prueba Mercedes Clase T 2022 ABE

Sin embargo, pienso que pincha en las plazas traseras. No es que sean incómodas, pero el asiento te hace ir sentado muy erguido y el mullido es tirando a duro. Además, no hay donde apoyar los brazos porque las puertas correderas no tienen un hueco específico para ello y en el respaldo no hay un reposabrazos.

Sin embargo, este Clase T gana puntos en la prueba gracias precisamente a las puertas, ya que permiten un acceso bastante bueno. Otra cosa es cerrarlas desde dentro, que exige un movimiento poco natural y que por ejemplo a niños les puede resultar complicado.

Motor y prestaciones

El Clase T está disponible con cuatro opciones mecánicas. Dos de ellas son de Gasolina: T 160 y T 180, y otras dos diésel. T 160d y T 180d.

Yo he podido probar los dos modelos más grandes, aunque fue el T 180d el que conduje más tiempo. Tanto en el Clase T de gasolina como el diésel tienen una gran calidad de rodadura. El motor está razonablemente bien aislado y ni a velocidades de autobahn se muestra forzado. 

Quizá la principal diferencia, aparte del consumo (el 180d arrojó una cifra de ordenador de 6,1 litros mientras que el gasolina subió la marca a 7,3) sea el desarrollo de la séptima marcha (en ambos casos conduje el Clase T con la caja 7G-DCT de doble embrague), que en el diésel se sitúa en unas 2.000 rpm a 120 km/h y en el gasolina sube hasta las 2.250.

En cuanto a prestaciones, ninguno de los dos te va a dejar impresionado, pero suben de vueltas con alegría y ganan velocidad de manera más que suficiente.

Dinámica

Si el motor es tranquilo, el comportamiento lo es del mismo modo. La prueba del Mercedes Clase T transcurre por algún tramo de autopista sin límite de velocidad donde muestra una buena estabilidad en línea recta y una calidad de rodadura que no te a dar ningún quebradero de cabeza.

Cuando llegan las curvas, sí que tendrás que tomártelo con calma, pues aunque la suspensión contiene los balanceos y los cabeceos, no está nada cómodo si intentas practicar algo parecido a una conducción dinámica.

Lo cual no debería sorprender a nadie. Es un modelo que te lleva a conducir tranquilo y que no está pensado para dejar atrás a cualquier compacto deportivo: la dirección no es especialmente rápida, pero sí precisa y adecuada para el tipo de coche que es y el tacto de los frenos no es el ideal.

Precio/rivales

A nadie se le escapará que 28.000 euros son muchos euros para un coche de este tipo, y eso sin tener en cuenta que es una cifra "para empezar a hablar", pues es el modelo base, T 160, con cambio manual y sin opciones de ningún tipo. 

El Clase T que he probado, un T 180d con cambio automático, coquetea con los 34.000 euros, lo que te lleva a un terreno donde hay muchas buenas opciones donde elegir... aunque es cierto que pocas con esta capacidad adaptación que ofrece este modelo.

En cuanto a acabados, el básico no tiene nombre y lleva aire acondicionado, acceso y arranque por llave, aviso de ángulo muerto y un buen surtido más de ayudas a la conducción. 

Por 1.300 euros aparece el Clase T Style con llantas de aleación de 16", tapicería símil cuero, mesas plegables en los respaldos delanteros o iluminación ambiental seleccionable en ocho colores.

El superior es el Clase T Progressive y cuesta 2.700 euros adicionales al Style. Suma faros de led, algunos detalles cromados en el exterior y un tapizado en un material parecido al neopreno para la parte superior de la consola central.

En todos los casos, el cambio automático (no se puede montar en el T 160) de siete marchas y doble embrague cuesta en torno a los 2.200 euros.

Cuando llegue al mercado tendrá rivales duros como el Volkswagen Caddy, que es algo más capaz y espacioso por dentro. También serían opciones interesantes y más baratas los Berlingo o Partner que queden con motores de combustión (ahora solo se venden las versiones eléctricas), o incluso el Citan en su versión de pasajeros, aunque con un aspecto más industrial y acabados más básicos.

Sin duda, si te quieres hacer con un Clase T como el de esta prueba, es porque te gusta Mercedes y porque te cuadra el precio. Así, por unos 30.000 euros vas a disfrutar de un modelo cómodo, con una gran capacidad de carga y muchas posibilidades de personalización. No, no en cuanto a colores y demás (que algo hay), sino en cuanto a utilidad: barras de techo, cofres, enganches, bola de remolque...

Valoración

Nota8

Probamos el Mercedes Clase T, que empieza a entregarse a mediados de 2022. Es un MPV muy espacioso, de aire premium y con muchas posibilidades de utilización.

Alternativas a Mercedes Clase T

Etiquetas: Coches nuevos

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