Prueba del Ford Puma ST Powershift: trueno azul con etiqueta ECO

Los deportivos urbanos que antes nos hacían vibrar casi han desaparecido. Por suerte, no del todo, sino que han sido sustituidos por sus musculados hermanos SUV. En principio, un coche más alto y pesado no es lo ideal si quieres las mejores prestaciones y un gran dinamismo, pero modelos como el de esta prueba, el Ford Puma ST Powershift, están aquí para demostrar que tienen mucha diversión que ofrecer.

No te voy a hablar de las características prácticas o del diseño del Ford Puma, porque es un modelo ya conocido. Y sí, no se puede negar que por su tamaño (4,2 m) y su maletero (456 l), resulta bastante idóneo como coche práctico para el día a día e incluso para escapadas fuera de la ciudad.

No, lo que aquí importa son las sensaciones que transmite al volante y cómo se comporta en zonas de curvas, así que arranco y te cuento.

Y lo primero que te quiero aclarar es que esta es la nueva versión 1.0 EcoBoost de 170 CV con sistema de hibridación ligera y cambio Powershift de siete velocidades, porque antes estaba disponible con un 1.5 EcoBoost de 200 CV con cambio manual de seis marchas. Te dejo la prueba en vídeo:

Ambos son motores turbo de tres cilindros, pero el cambio es importante, desde luego. ¿Ha supuesto una merma en las prestaciones? Luego te doy datos.

Antes te cuento que las sensaciones siguen siendo vibrantes. Me gusta incluso el sonido, que te pone los pelos de punta tanto al arrancar como cuando aceleras. Y lo mejor es que no es nada artificial que se escuche por los altavoces, sino que procede del escape.

Comparativa del Volkswagen Taigo vs Ford Puma: dos SUV pequeños con picante

Llego a una de mis carreteras favoritas para probar coches de corte deportivo y doy rienda suelta al pie derecho y empiezo a subir marchas como loco por medio de unas levas del volante que pienso deberían ser más grandes. 

Como ahora es un modelo mild hybrid, es decir que cuenta con el apoyo de un pequeño motor eléctrico de 11,5 kW (16 CV), se muestra más enérgico de lo que me hubiera imaginado. Sobre el terreno no noto una merma en las prestaciones, aunque repasando datos del modelo anterior con 200 CV sí que las hay. Antes pasaba de 0 a 100 km/h en menos de siete segundos y en este test ha necesitado 7,5 s. La parte buena es que antes gastaba algo más de siete litros y ahora 6,4 l/100 km.

Lo que no cambia es su afinado comportamiento, que es sorprendentemente ágil para un todocamino. Este nuevo Puma ST pesa 1.394 kilos, unos 50 kg más que antes, debido al conjunto híbrido ligero, pero se muestra realmente firme en las curvas y en los cambios de dirección incluso te invita a pisar el acelerador para atacar el siguiente giro.

Se apoya en una dirección dura, rápida y precisa, justo lo que se necesita en un coche así, que logra hacerte disfrutar en cada kilómetro que recorres.