Las ventas de motos eléctricas en España se desploman en mayo

Las motos eléctricas no terminan de despegar en nuestro país. En mayo, las ventas de motos eléctricas en España en mayo 2019 se hundieron, representando, con apenas 86 unidades matriculadas, un 0,5% del total de motos vendidas en nuestro país y que encabezan las 10 motos más vendidas en mayo en España. Para poner en contexto: es una cifra incluso menor que la de los coches eléctricos, ya que estos representan un 0,72% del total (tampoco es una cifra para echar cohetes).

Y es que en el mes de mayo de 2019, las ventas de motos eléctricas cayeron más de un 80% respecto al mismo periodo del año pasado, una bajada muy importante que puede ser consecuencia de una disminución de las compras de motos eléctricas por parte de las empresas de motosharing. Pasar de 445 motos eléctricas en mayo de 2018 a 86 en 2019 es una disminución demasiado notable como para tratarse de una variación normal del mercado.

Los ciclomotores eléctricos se venden más

Por otro lado, los ciclomotores eléctricos sí que tuvieron un buen resultado en el mes de mayo, matriculando un total de 205 ciclomotores eléctricos, lo que representa un crecimiento del 115% respecto al mismo periodo del año pasado. Este fenómeno se puede explicar también por una variación de las compras de las empresas de motosharing y por unas ventas de motos eléctricas muy enfocadas a ciudad: para muchos, un ciclomotor eléctrico, más barato, es suficiente para sus desplazamientos urbanos.

Lo que está claro es que las motos eléctricas todavía están lejos de ser una realidad en España y es una pena, porque cada vez hay opciones más recomendables sobre la mesa. En el caso de los ciclomotores, el impacto de la electricidad sí que es mucho más importante. En lo que llevamos de año, los ciclomotores eléctricos han incrementado sus ventas en un 56%, mientras que las motos eléctricas han bajado en el cómputo anual un 61%.

Esto se traduce en que uno de cada cuatro ciclomotores que se matriculan en España son eléctricos, una cifra que resulta mucho más prometedora para el bienestar y la calidad de aire en nuestras ciudades. Creo firmemente que son una gran opción de movilidad y creo que los Ayuntamientos, las Comunidades Autónomas y el propio Gobierno de España deberían incentivar el uso de este tipo de transporte limpio, barato y funcional.