Así se compra un Lamborghini Aventador SV Roadster, ni más ni menos. Lo más complicado, sin duda, es reunir el ‘pastizal’ que cuesta, más de medio millón de euros de precio base. Pero como en todo coche exclusivo, las opciones que se puede equipar generalmente hacen que el precio base pueda incrementarse hasta límites insospechados. La protagonista de este vídeo se llama Heather Ballentine, gerente o vendedora, no me queda muy claro, del concesionario Grand Touring Automobiles, en Maple, Ontario, Canadá.
Te interesa: ¿Quieres saber lo que se siente conduciendo un Aventador SV? Mira aquí
En este vídeo se puede ver cómo se compra un Lamborghini desde le minuto uno, desde que entras por la puerta hasta que sales con el coche bajo el brazo. Como puedes ver, lo más complicado en la compra de un superdeportivo es elegir la combinación de colores. Las marcas lo ponen difícil y Lamborghini es una excepción: azul, rojo, amarillo, ¿verde? Las opciones son casi infinitas, especialmente cuando entran en juego los departamentos de personalización, como es el caso de Lamborghini AD Personam.
Color exterior, llantas, tapicería, costuras, detalles tanto en el exterior como en el interior. No es fácil elegir todos estos elementos, pero para ello, las marcas ofrecen la opción del configurador, que es básicamente lo mismo que podemos utilizar nosotros en nuestro ordenador, pero con mucho más detalle para que el cliente compre estando completamente seguro de su elección.
En este caso el elegido es un color que personalmente me apasiona, y que en Lamborghini tiene mucha historia, ya que fue desarrollado en exclusiva para el Lamborghini Diablo VT 6.0 SE: se llama Oro Elios y es un tono de dorado muy interesante. Si eres de los que te comprarías un Ferrari Rojo, este color no es para ti, pero si quieres algo distinto, algo con personalidad y con mucha historia, es una magnífica opción.
No te voy a destripar el resto, simplemente siéntate y disfruta viendo como otros se compran tus sueños de cuatro ruedas. Eso sí, al final del vídeo, cuando veas la factura final, seguro que no tienes tanta envidia.
