Así puedes transformar tu coche diésel a GLP para obtener la etiqueta ECO y evitar las restricciones en ciudades

La transformación de vehículos a Gas Licuado de Petróleo (GLP) ha ido aumentando a medida que se ha podido comprobar que es una alternativa más sostenible y económica en el ámbito de la movilidad. Dicho proceso implica la adaptación del sistema de combustión de un vehículo para que pueda funcionar tanto con gasolina como con GLP. 

El principal motivo de que los usuarios tiendan a realizar este tipo de transformaciones en sus vehículos se debe a los beneficios ambientales y económicos, sobre todo porque el GLP es considerado un combustible limpio que emite menos gases contaminantes en comparación con la gasolina. 

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Además, ciudades como Madrid o Barcelona han implantado restricciones de movilidad para aquellos vehículos que no cuenten con los distintivos menos contaminantes de la DGT, tales como el Cero o el ECO. Y esta es una de las razones por las que los usuarios apuestan por realizar el cambio. 

Y no sólo eso, sino que en muchas gasolineras se puede comprobar cómo el precio del GLP tiende a ser más estable e, incluso, en ocasiones, más económico. Sin embargo, hay que saber que este tipo de transformaciones las deben hacer profesionales cualificados para poder garantizar y asegurar el rendimiento del vehículo. 

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Muchos conductores ya conocen el cambio de la gasolina a GLP, pero es cierto que no todos conocen el posible cambio de un motor diésel a uno sobrealimentado con GLP. El proceso es diferente y su coste es mayor al de las transformaciones de motores gasolina pero, oye, también cuenta con algunas ventajas. 

¿En qué consiste el cambio de diésel a GLP?

¿Puedo transformar mi vehículo diésel a GLP? Sí, lo único es que, como usuario, debes barajar si te es rentable a nivel económico. Cuantos más kilómetros hagas, más lo amortizas. Pero también es cierto que la transformación no es sencilla y mucho menos barata. 

En primer lugar, cabe aclarar que la instalación de diésel a GLP no implica ningún tipo de modificación importante en el motor. De hecho, al revés, ya que alarga la vida útil de éste puesto que hablamos de una combustión más limpia. 

Se trata de un sistema Dual FueL, es decir, no se sustituye la mayor parte del combustible original por GLP, sino lo contrario, se sustituye una parte del diésel que usa el vehículo por GLP, resultando una combustión final de mezcla diesel/GLP, y donde el principal de los carburantes seguirá siendo el diésel. 

Esta transformación suele rondar los 2.000 euros, y el ahorro en términos de consumo es, grosso modo, del 15%, de tal manera que es necesario un continuo uso del automóvil para poder amortizar los miles de euros invertidos. 

6 ventajas de la Etiqueta Eco sobre la Etiqueta C

Ventajas de transformar un vehículo diésel a GLP

Pero, aunque no salga de lo más barato, existen una serie de ventajas que podrían convencer al usuario de que lleve a cabo dicha transformación: 

• Etiqueta ECO: los motores diésel homologados bajo normativa Euro 6 que originalmente cuentan con la pegatina C, pasan a ser considerados como ECO. 
• Circulación sin restricciones en las Zonas de Bajas Emisiones (ZBE) 
• Mayor autonomía: al disponer de un sistema de doble combustible, aumenta la autonomía del vehículo, ya que tendrás un depósito adicional de combustible.
• Reducción del Impuesto de vehículos de tracción mecánica (IVTM) en función de cada ayuntamiento, aunque la mayoría cuentan con bonificaciones para este tipo de vehículos 
• Reducción de la contaminación: el GLP reduce de manera notable las emisiones de NOx y partículas por lo que contribuye a reducir la contaminación atmosférica