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Prueba del Mazda MX-30 e-Skyactiv en el día a día: perfecto para ciudad… ¿y para escapadas?

Prueba Mazda MX-30

Esta es la prueba de un Mazda MX-30 e-Skyactiv en un uso cotidiano: ¿realmente merece la pena un coche de capricho como este?

Seamos honestos: realmente no necesito un Mazda MX-30 e-Skyactiv, ni ningún otro coche . Estoy perfectamente conectada con el transporte público de mi ciudad, ya sea metro, autobús o tren ligero. Incluso puedo elegir cuando hay obras o huelgas.

Si es necesario, voy en bici eléctrica. Y suelo ser más rápida con el transporte público que con el coche en hora punta. Soy soltera, sin hijos, solo un gato a mi cargo, y estoy a poca distancia de médicos y tiendas, y de mi oficina. ¿Realmente necesito pagar lo que cuesta este Mazda?

Para empezar, tengo que reconocer que me encantan los coches eléctricos. Así que en realidad soy un excelente ejemplo del público objetivo del MX-30

 

Cuando entro, inmediatamente me embarga la euforia: qué interior tan genial. Los asientos, el cuero vegano, los paneles de tela de las puertas… todo esto no solo se siente muy bien, sino que también es sostenible. Y el corcho de la consola central es realmente algo diferente a todo lo visto hasta ahora.

El sistema de sonido Bose es impresionante

Desafortunadamente, el control de clima está demasiado abajo y solo se puede operar al tacto. Eso distrae del tráfico. Así que durante las dos semanas que he tenido este coche, solo he regulado el clima cuando estaba parado en un semáforo.

Después de conectar mi teléfono (desafortunadamente todavía por cable) a Apple CarPlay, el sistema de sonido Bose me alucinó. Y como soy una melómana irredenta, he pasado los atascos más felices de mi vida, como si estuviera en un concierto, cantando a voz en grito. 

Puertas del MX-30

El Mazda también tiene las ventajas de todos los coches eléctricos: una aceleración suave pero enérgica te permite adelantar de forma relajada, pero también navegar relajadamente entre el tráfico. 

Tengo que decir que no me ha hecho falta hacer más de 100  kilómetros en las dos semanas, de modo que su autonomía es más que suficiente. Ir al trabajo, de compras, transportar cosas o llevar a mi gato al veterinario… el Mazda es bueno para eso.

Maletero del MX-30

El Mazda MX-30 también sirve para una escapada

También va bien para una escapada de fin de semana, siempre que no te vayas muy lejos. El maletero es suficientemente para eso, incluso con una línea cupé que le roba algo de espacio. La alfombrilla de goma también es práctica si, por ejemplo, el cable de carga se moja.

La única recarga que le hice en dos semanas fue solo para experimentarlo, porque el nivel de la batería había caído por debajo del 50 por ciento. No puedo evaluar la autonomía en autopista y carreteras rurales, pero es perfecto para un uso diario urbano.

Cable del MX-30

En el tráfico diario, me gustó mucho el head up display, con una buena cantidad de información sin estar demasiado sobrecargada. La cámara de 360 grados también es muy práctica, y muy necesaria dadas las complejas formas del vehículo. 

Las puertas tipo portal, esto es, enfrentadas, por otro lado, son poco prácticas para la ciudad. En espacios de estacionamiento reducidos, simplemente arrojar algo en el asiento trasero o incluso subirse a la parte de atrás no es tan fácil. 

Y para ser honesta, el Mazda es simplemente demasiado grande para encontrar espacios de estacionamiento rápidamente.

Puntuación sobre 5

Desplazamientos: En la ciudad, perfectamente adecuado. Puntos: 4 /5

Compras: Puntos: 5/5

Movilidad: suficiente, pero el hatchback ocupa mucho espacio para aparcar. Puntos: 3/5

Vacaciones: Mejor no te vayas muy lejos. No está pensado para eso. Sí para una escapada corta. Puntos: 1/5

Vida familiar: He podido llevar al gato fácilmente al veterinario. Pero claro, otra cosa es tener una familia numerosa. No es mi caso. Puntos: 4/5

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