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Portabicis de maletero de coche, todo lo que debes saber si pones uno

portabicis de maletero de coche
Una alternativa a la baca de toda la vida.

Si te gusta el ciclismo y realizar escapadas con tu bici, seguro que ya tendrás una opción para llevar tu montura allá donde quieras ir. Lo cierto es que es hay diversas opciones, desde la típica baca del techo hasta llevar las bicicletas dentro del coche desmontada (obviamente cuando el vehículo sea suficientemente grande como para poder acogerlas). Sin embargo, hay un nuevo tipo que está ganando cada vez más popularidad: el portabicis de maletero de coche.

Su uso no está extendido, pero va ganando adeptos gracias a algunas ventajas:

  • Dado que va anclado en el portón trasero, mediante un soporte y cinchas que lo aseguran, su acceso es mucho mejor que el del techo, al que subir las bicicletas cuesta más
  • Al encontrarse “dentro” del cuerpo del vehículo, sobre todo si hablamos de modelos grandes con una zaga voluminosa (véase por ejemplo un Toyota Verso, un Audi Q5, un Volkswagen Tiguan o un BMW X6 2020), no afectan de manera tan negativa a la aerodinámica ni producen efecto vela lateral
  • Las bicicletas se pueden colocar estando montadas
  • Por norma general su capacidad va de 1 a 4 bicis

Lógicamente, también tiene algunos inconvenientes, como el hecho de estar limitado el peso que pueden llegar a cargar (depende del modelo), que se pueden golpear con relativa facilidad al aparcar, que con ellos montados, al menos con las bicicletas encima, no se puede abrir el portón trasero; y en función de cómo sea, puede tapar elementos de la zaga como la matrícula o los pilotos, por lo que en ese caso deberá incluirlos.

Una alternativa: portabicicletas de bola de remolque

Es una opción bastante similar a la del portabicis de maletero de coche, puesto que sitúan a las monturas más o menos en la misma zona. La diferencia radica en que, en lugar de ir anclado al portón, utilizan la bola de remolque como principal punto de anclaje.

Esto abre el primer inconveniente, y es que hay que tener uno antes, homologado por el coche. De tenerlo, no hay ningún problema, salvo por el hecho de que hay que respetar las especificaciones técnicas del fabricante con objeto de no sobrepasar el peso máximo que pueda soportar.

Su capacidad varía entre una y cuatro bicicletas, que no tienen porque desmontarse y la mayoría de los que se venden se pueden inclinar para facilitar la apertura del portón trasero.

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