Lada Niva 2022, dónde va a mejorar y dónde podría hacerlo

No será hasta 2024 cuando veamos por fin una nueva generación del Lada Niva, que traerá consigo novedades de todo tipo. Pero, hasta entonces, el pequeño todoterreno ruso ha recibido una puesta al día que introduce algunos retoques, pero que se queda corto en otras áreas. Te contamos donde va a mejorar y donde podría hacerlo el Lada Niva 2022.

El mismo exterior de siempre

Hay que romper una lanza a favor de esos coches que se muestran impertérritos al paso del tiempo y mantienen su esencia, pero en el caso del Lada quizá hasta se pase en este aspecto. Su diseño es exactamente el mismo que antes, con nulas variaciones, lo que tiene parte de encanto pero inevitablemente hace que luzca algo anticuado.

Mayor comodidad de los pasajeros

En un ‘low-cost’ de manual como el Niva 2022 no puedes esperar asientos con función de masaje, pero es una buena noticia que los delanteros se hayan rediseñado y tengan apoyos laterales, y que los traseros incorporen por fin reposacabezas, lo que también suma en seguridad.

Un interior ¿tecnológico?

En la puesta al día, el todoterreno ha renovado elementos como el cuadro de instrumentos, aunque se queda a años luz de lo que se estila hoy en día: dos relojes analógicos, muy sencillos, que incorporan luz para mejorar la visibilidad nocturna. Y hasta tiene una pequeña pantalla central que muestra datos del ordenador de a bordo.

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Lada Niva 2020 (6 imágenes)

Detalles que mejoran el conjunto

Son pequeños elementos, pero que se agradecen porque hacen del Niva y un coche más amigable: el aislamiento del habitáculo se ha mejorado, el sistema de refrigeración es completamente nuevo, los controles de éste se han rediseñado, se han añadido dos posavasos, cuenta con dos tomas de corriente de 12V, etc.

El motor se queda corto

Aunque no se trate de un todoterreno enorme (mide 3,74 metros de largo), el hecho de contar solo con una motorización y que encima sea la que es, le penaliza. Solo puede montar un bloque 1.7 gasolina atmosférico de 83 CV que es meramente cumplidor. Opciones más potentes o incluso una electrificación que aquí parece inalcanzable, serían de agradecer.

Travel, ¿el anticipo de cómo será su futuro?

Es sin duda la novedad más grande para el ruso: la incorporación a su gama de una versión SUV, más refinada, pero que sigue teniendo algunas de las fallas típicas del todoterreno estándar.

Su diseño es mucho más moderno (es fácil ver algo del Toyota RAV4 en él, sobre todo en el frontal), sus formas están más elaboradas y cuenta con detalles pintones como los refuerzos inferiores de aluminio. De hecho, hasta tiene detalles interesantes como los faros tipo LED.

Aunque su enfoque es más de un SUV, lo cierto es que mantiene intactas las capacidades off-road del Niva, pues mantiene la tracción integral y la reductora, pero también conserva el motor 1.7 de aspiración natural que, como ya hemos dicho, se queda un poco corto.