Logo Autobild.es

Dacia Spring, cinco virtudes y dos defectos

Prueba Dacia Spring

El Dacia Spring supone la introducción de Dacia en terreno eléctrico y la marca rumana ha sido fiel a sus principios, presentando un coche cumplidor y de tarifas ajustadas, asequible para todo el mundo. Éstas son sus cinco virtudes y sus dos defectos.

Un precio para todos

La firma prometió un coche eléctrico del pueblo y ha cumplido pues, aunque no es el EV más barato del mercado (título que corresponde al Invicta Electric D2S), su precio es realmente bajo: está disponible desde 18.105 euros, montante que se puede reducir hasta los 11.105 euros si emplean los 7.000 euros de las ayudas del Plan Moves III.

Comparándolo con sus rivales, nadie ofrece más por esta cantidad y, aunque lógicamente peque en materias como acabados y equipamiento, supera a modelos más caros en aspectos como la autonomía. 

Espacio interior

El Spring es un modelo bastante pequeño, incluso más de lo que puede parecer en imágenes: solo tiene 3,73 metros de largo y su peso total es de 970 kilos. Queda encuadrado dentro de los modelos urbanos y, como tal, su espacio interior es algo justo, aunque el rumano consigue aprovecharlo muy bien.

Prueba del Dacia Spring: un eléctrico que te puedes plantear

Su maletero de 290 litros está por encima de la media y es ampliable hasta los 620 si se abaten los asientos traseros. Además, se suman otros 23 litros repartidos en huecos de almacenaje por todo el habitáculo.

Un equipamiento de serie que cumple

Con un precio tan asequible, no tiene la dotación de equipamiento de serie más completa que se pueda imaginar, pero sí que tiene todo lo imprescindible y necesario.

Las llantas son de acero de 14 pulgadas, pero los tapacubos lo disimulan muy bien; tiene climatizador, radio, elevalunas eléctricos en las cuatro puertas, asistente de arranque en pendiente, luz diurna LED, frenada automática de emergencia, seis airbags, etc.

Eso sí, resulta recomendable, por el salto de precio existente (1.500 euros), dar el salto al acabado superior, que añade elementos como la pantalla central de 7 pulgadas, el asistente de aparcamiento trasero o los toques naranjas exteriores, que le dan un aspecto más llamativo.

Compatible con cargas “rápidas”

Aunque no llega a los niveles de modelos de Porsche o Mercedes, el humilde Dacia también es compatible con estaciones de carga rápida, en su caso de hasta 50 kW de potencia, con los que recupera 184 kilómetros de alcance en 50 minutos. 

La opción del Wallbox también es recomendable (7,4 kW, 3 horas y 42 minutos), pero con alternativas de menos potencia (ya sea de 3,7 kW o con una toma doméstica de 2,3 kW) el proceso se eterniza (11 horas y 25 minutos en el peor de los casos para recargar esos mismos 184 km).

Una autonomía urbana interesante…

El Dacia Spring utiliza una pila de 27,4 kWh, que no es excesivamente grande, pero está bien aprovechada, sobre todo en ámbito urbano, donde puede llegar a homologar hasta 305 kilómetros de autonomía, una cifra que cumple con las necesidades semanales estándar de alguien que se mueva por ciudad exclusivamente.

Defecto: … pero escasa fuera de ciudad

Pero la cosa cambia en cuanto se deja atrás la urbe, puesto que queda patente que el Spring ha sido concebido eminentemente como urbanita y que las salidas de la ciudad es mejor que sean ocasionales. Para empezar, su rango de acción disminuye considerablemente en ciclo mixto: 230 kilómetros.

Además, su mecánica se queda corta en dichas situaciones: con solo 45 CV, “cumple” en la aceleración de 0 a 50 km/h (5,8 segundos), pero necesita 19,1 segundos para alcanzar los 100 km/h desde parado, ofreciendo unas prestaciones bastante limitadas.

Defecto: Un interior austero

Con un precio tan ajustado, tampoco se pueden esperar unas calidad interiores superiores, siendo lógico que abunden los plásticos duros al tacto por todas partes, así como que en conjunto el habitáculo sea bastante sencillo y sin alardes.

Descubre más sobre , autor/a de este artículo.

Conoce cómo trabajamos en Autobild España.