Coches con un nombre verdaderamente desafortunado: Chevrolet Nova

Que sí, que ya sabemos que hay 'genialidades' todavía peores. Pero aunque las connotaciones de una palabra sean tan subjetivas que a unos les remita a cosas estupendas y a otros, a lo peor de lo peor, creemos que en nuestro particular recopilatorio de coches con un nombre verdaderamente desafortunado, el Chevrolet Nova no puede ser un excepción. Al menos, para los hispanohablantes... 

¿Por qué? ¿Era un automóvil tan malo? En realidad, no ha pasado a la historia por eso. Y no es de los modelos que a uno le vienen a la cabeza en un primer momento, ya que en España, por ejemplo, no es precisamente popular, ni siquiera entre los que vivieron activamente la década de los años 60 y algo sabían de fabricantes americanos.

Sin embargo, no deja de ser gracioso que un modelo de cierta importancia para Chevrolet y con  ínfulas de novedad en su concepto, dentro del mercado americano -con gran cantidad de hispanohablantes entonces y ahora- se denominara Chevrolet II y, en un alarde de originalidad para suplir la poca imaginación de este primer nombre, pasara a llamarse finalmente 'Nova'. 

A algunos les parecería muy oportuno por aquello de la raíz latina que da origen a la palabra "innovación"; a otros, quizás la pronunciación anglosajona les atraería lo suyo al sonar como "nouva" o "noufa" o incluso "nofa". Pero lo que está claro es que en castellano, lo de Nova remite más bien a un vehículo que "no va", es decir, que no funciona. 

Sería injusto pues quedarse con esta idea para el pobre coche producido entre en EEUU de 1962 a 1979 (y que tuvo una segunda vida desde 1985-1988 gracias a una joint venture creada entre General Motors y Toyota, así como una reinterpretación como prototipo, en 2015, llamada Chevrolet Nova 2.0 Concept). 

De hecho, el Chevy II original, bautizado siete años después como Nova, sustituyó al Chevrolet Corvair para competir contra el Ford Falcon. La fórmula fue un compacto con una carrocería semi-monocasco (chasis unido a carrocería monocasco), con motor delantero, carrocería de 2, 4 y 5 puertas y una descapotable y potencias que oscilaban entre los 90 y los 300 caballos.