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Coches míticos solo para verdaderos amantes del motor: Honda Integra Type R

Rodrigo García Vita

Uno de los deportivos JDM más infravalorados

Si te gustan los coches deportivos, es muy probable que también te gusten los coches japoneses. En mayor o menor medida, pero es innegable que la cultura JDM ha supuesto un pilar fundamental en la evolución internacional de la automoción y el automovilismo. Hoy hablaremos de uno de esos coches que no están en el olimpo de los nipones, pero que es toda una máquina: el Honda Integra Type R.

Quizá con una buena preparación esté a la altura de los clásicos homónimos más conocidos, como el Toyota Supra MK.4, el Mazda RX-7 o el Nissan Skyline GT-R R33, pero no subestimes a este pequeñín. Honda es experta en dos cosas: hacer coches con bajo peso y pequeños motores, pero potentes y fiables.

La historia del Honda Integra Type R

Honda Acura Integra Type R

La versión Type R del Honda Integra (o Acura Integra en el mercado estadounidense) se presentó enmarcada en la tercera generación durante 1995 y 1996. La versión JDM (Japanese Domestic Market) contó con faros alargados, mientras que para el resto de países contó con los famosos 'bug eyes' de cuatro ópticas redondas y pequeñas.

El diseño era en esencia el mismo, con un parachoques frontal diferente del modelo estándar, un alerón trasero de doble anclaje y una mejora mecánica evidente: el motor B18C de 4 cilindros en línea DOHC atmosférico de 1,8 litros rindió a, dependiendo del país, entre 200 y 190 CV de potencia.

Su caja de cambios manual de 5 velocidades era la clásica de los deportivos de Honda, capaz de estirar las marchas hasta el infinito y que no ha parado de llenar internet de memes durante años. De hecho, el corte de inyección llegó a estar en las 8.600 rpm en la versión japonesa.

Chasis reforzado, reducción de peso general, mayor compresión en los cilindros... En definitiva, un coche de poco más de 1.100 kg con una relación peso potencia sensacional, tracción delantera y un bajísimo centro de gravedad que lo convertían en un bestia en curvas.

Después de esa primera versión vino el Honda Integra Type R Spec R, con un nuevo restyling, nuevas ruedas, frenos con discos de mayor diámetro y una nueva relación de marchas y mecánica interna que mejoró la entrega de par a bajas revoluciones, donde muchos Honda sufrían antes de llegar a su ratio óptimo (entre las 5.500 y 8.000 rpm).

Esta versión fue capaz de firmar un 0 a 100 km/h en 6,5 segundos y alcanzar 231 km/h de velocidad máxima. Nada mal para la época, y respecto al rendimiento en curva, habría que verlo frente a muchos compactos deportivos modernos...

Aclamado y desaparecido... Más o menos

No es ningún secreto que Honda llegó a perder dinero con cada unidad que vendían, pero hablamos de tiempos en los que la reputación de una marca valía oro. Era una inversión en imagen de la compañía, aunque no dejase beneficios financieros.

En gran medida, su producción se debió también a las necesidades de homologación FIA para diversos campeonatos, en unos años en los que Honda tenía una enorme presencia en competiciones de turismos, Fórmula 1 y resistencia.

El compacto deportivo fue aclamo por pilotos y prensa de la época. De hecho, fue nombrado como 'El coche de tracción delantera con mejor rendimiento de la historia' por la revista Evo, entre otros muchos grandes titulares de la época.

Desafortunadamente, el Integra fue ensombrecido por el Honda Civic. La aparición de otras grandes apuestas en los años siguientes como el Honda NSX o el Honda S2000 junto a la fama de los Civic Type R, acabó por relegar al Integra a un segundo plano.

Acura Integra A-Spec 2023

La cuarta y última generación se produjo entre 2001 y 2006 para Japón, América del Norte y Australia con diferentes versiones del motor K20, y existió la versión DC5 Type R con un K20A de 2,0 litros i-VTEC de 225 CV de potencia. Una joya algo más moderna, pero de la que existen pocas unidades y únicamente japonesas.

Este año Honda volvió a presentar un nuevo Integra, que llegará en 2023 como un compacto deportivo premium de poco más de 200 CV con un motor 1.5 VTEC Turbo y disponible con caja de cambios manual de 6 velocidades.

Su estética no defrauda, pero aún no se ha hablado de una versión Type R que suponga un verdadero salto cualitativo y de rendimiento respecto a la tercera generación de los años 90'. Tiempo al tiempo y quién sabe, quizá Honda haga como Toyota con las versiones GR de sus deportivos y nos de una alegría...