Este es el coche más bajo del mundo y, sí, tiene conductor

Imagina por un momento que un vehículo alcanzara una altura máxima de 20 centímetros. Es algo que parece una locura. Seguramente, estarás pensando en algún coche de juguete. Pero no. Es el coche más bajo del mundo y, sí, tiene conductor.

En este momento, te estarás preguntando cómo es posible que una persona entre en un coche que mide 20 centímetros de altura, pero tiene su truco y el canal italiano de YouTube, Carmagheddon, lo ha hecho posible. 

Hay que decir que este canal es muy conocido en la red social por hacer todo tipo de locuras y experimentos con los coches, como recorrer 100 kilómetros con un Citroën Xsara sin aceite o instalar en un vehículo el tubo de escape más grande del mundo. Retos que hacen que este canal acumula cientos de miles de visitas.

Este es el coche más bajo del mundo y, sí, tiene conductor

Para construir el coche más bajo del mundo, han utilizado un Fiat Panda original, el de la primera generación, procedente de un desguace. Cortaron la carrocería longitudinalmente, a la altura de la línea de tensión, dejando los montantes, el capó, los marcos de las ventanillas y el techo que, más tarde, volvieron a unir.

A continuación, los chicos reforzaron la carrocería con un armazón en forma de caja, apoyando las esquinas del capó sobre unas ruedas, de tal manera que dejaba una altura libre al suelo de unos 2,5 centímetros. Lo justo para no rozar una china del asfalto.

Lo siguiente era instalar el motor para moverlo. Para ello, utilizaron un pequeño motor de dos tiempos procedente de un ciclomotor. Lógicamente, no hay espacio para un motor convencional con una transmisión y ruedas.

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A través de una GoPro

Finalmente, el coche más bajo del mundo ya estaba preparado para circular. Ahora sólo faltaba introducir al conductor, una tarea que, en un primer momento, se complicó, como puedes ver en los dos vídeos que te mostramos. 

En el segundo vídeo, el equipo encontró la solución, a través de una ingeniosa solución: puesto que todas las ventanillas están cubiertas por un vinilo que impide la visibilidad desde el interior, instalaron una cámara GoPro en el techo que envía la señal al móvil del improvisado conductor, con el que maneja el vehículo, y que debe permanecer tumbado en el interior.

Aunque sea un poco forzado y durante apenas unos metros, el coche más bajo del mundo funciona y es capaz de avanzar.