Comparativa: Skoda Kodiaq/Hyundai Santa Fe/Mercedes GL
Motorizaciones comparadas:
Hoy hemos salido de casa dispuestos a hacer una comparativa diferente. Y es que enfrentamos al Kodiaq a dos rivales realmente duros. Por un lado, el Hyundai Santa Fe. Un líder en relación calidad/precio, que suele marcar la referencia en este aspecto en su categoría. Por el otro lado, el Mercedes GLC. Es claramente más lujoso y también más caro, pero queremos comprobar cuánto de más tiene que ofrecer sobre el Skoda Kodiaq. ¿Preferimos el espacio y la practicidad o la exclusividad? Comparativa: Skoda Kodiaq/Hyundai Santa Fe/Mercedes GL.
Pero empezamos con el Hyundai. Un modelo que ha ido potenciando sus valores, con una imagen cada vez mejor y su excelente calidad/precio. El Santa Fe es 4,70 metros de largo, lo que lo pone por delante. Tiene un gran maletero con 560 litros, y 1.615 litros si plegamos los asientos. Hay, por tanto, espacio de sobra para personas y equipaje. El problema es que para esta prueba no hemos cogido el modelo básico, sino el diésel con cambio automático y tracción integral. Y eso, claro, cuesta caro. Bajo el capó esconde un 2,2 litros de cuatro cilindros con 200 CV, que lo sitúan entre sus dos rivales. En aceleración y velocidad punta, sin embargo, se queda por detrás. También en consumo se queda el último de la tabla. Por supuesto, el Hyundai tiene sus puntos fuertes: cinco años de garantía, y mantenimiento solo cada dos años. Pero hay otros aspectos en los que debe puntuar.
¡Aquí tienes la comparativa en vivo!
Especialmente has conducido antes los otros dos, sientes que la dirección no es tan precisa, que el chasis no está tan equilibrado, y que las suspensiones no son lo firmes que uno desearía. Y si moro a mi alrededor, no parece muy moderno. Sus rivales se ven más jóvenes. Pero la ventaja de esto es que, cuando te sientas por primera vez, todo es sencillo e intuitivo en el manejo, en ese aspecto es impecable. Y en equipamiento puntúa al máximo. Sencillamente, porque tiene cosas que los otros dos no tienen. ¿Un ejemplo? Los asientos ventilados.
El Hyundai está especialmente bien equipado, incluida cámara de aparcamiento o portón eléctrico. También unos espejos de gran tamaño que agradecemos todos los conductores de un SUV grande. Además, es el que más puede cargar de los tres. En definitiva, es un buen compañero de viaje. Tiene todo lo que puedas desear, es bastante equilibrado sin necesidad de ser espectacular.
El Mercedes GLC es justo lo contrario. Sin duda, destaca en esta comparativa por la estrella, la imagen de marca y el diseño. Eso, por un lado. El equipamiento y el precio, es otra cosa. Da la impresión de que el Mercedes va demasiado trajeado en esta comparativa respecto a sus rivales, aunque en el fondo, no se aleja tanto de ellos. Cubica 550 litros de maletero, y si pliegas los asientos llega a los 1.600. En motor también anda cerca: ok, es el más potente, pero solo tiene cuatro CV más que el Hyundai. También es más prestacional. Le saca más de un segundo al Santa Fe en el 0 a 100 km/h, y es mucho más veloz con 222 km/h, la mayor punta de las tres. Y además, es el que menos consume. Su mayor desventaja está en el precio. Con XXXXX euros, por desgracia, también está el que más arriba de los tres. Lo mismo pasa con el seguro y los impuestos. A cambio, también, es con el que más recibes.
El Mercedes, más exclusivo
Al conducir el GLC uno se siente en una categoría superior. El volante se siente diferente, el cuero también, la calidad general es, sencillamente, superior. Todo es más lujos aquí dentro. Y solo tengo buenas palabras para su head-up display. Pero tienes sus debilidades, claro: los espejos exteriores deberían ser más grandes, especialmente para quienes quieran llevar un remolque, y eso no es tan raro en un SUV. Y es que una superficie más amplia en los espejos casa mejor con un coche grande. Y además, aquí uno va menos desahogado. Mide casi lo mismo que el Kodiaq, pero tengo menos espacio y eso se debe a que se basa en el Clase C, y por eso lleva un motor longitudinal y propulsión trasera. Ok, lleva tracción integral, peor el túnel central es tan grande como el del Clase C, y como pasa con la ubicación del motor, eso le cuesta espacio. A cambio: tiene un comportamiento excepcional. Puedo elegir entre Sport y Confort gracias a su chasis adaptativo. Si elijo el modo Conofort, tengo la suavidad que le pido a un Mercedes. Si elijo Sport, me olvido de que estoy conduciendo un SUV.
El Mercedes se desliza con armonía, y el nuevo cambio automático 9 G-Tronic demuestra cómo deberían ser todos los cambios. Pero sobre todo los frenos merecen loas: 38 metros de 100 km/h a 0 con neumáticos de invierno es un valor excepcional.
Y llega la hora del Skodiaq. Lo curioso es que entra, por tamaño, en el segmento de sus rivales. Aunque la marca lo posiciona en los SUV compactos, con otros oponentes como el Hyundai Tucson o el Mercedes GLA, si nos ceñimos al precio. Pero claro: por sus dimensiones, entra en la categoría superior. 4,70 metros de largo, 1,8 toneladas de peso. Y un maletero de 650 litros y, con los asientos plegados, más de 2.000. Aquí entran 30 cajas de botellas de agua, lo que le da la mejor puntuación en esta comparativa, porque supera en dos cajas a sus rivales. Bajo el capó lleva un conocido del grupo Volkswagen: el dos litros con cuatro cilindros de 190 CV y 400 Nm de par. Eso lo sitúa por detrás de sus rivales. El motor, eso sí, responde con ímpetu y es bastante silencioso. Una pena que el cambio DSG se lo piense un poco en las arrancadas, y eso le penaliza el kick-down. Con todo, pasa de 0 a 100 km/h en 8 segundos, y llega a los 210 km/h de punta. Hemos medido un consumo de 7,4 litros, si bien el dato de fábrica es de 5,7. Con esto, se sitúa entre sus rivales.
Así va el Kodiaq
Aqui tienes una prueba a fondo del nuevo Skoda Kodiaq
Aquí estoy, al volante del nuevo Skoda Kodiaq, y tengo que decir que no se siente tan moderno o espectacular. Esto es porque el coche se basa en la plataforma modular transversal. Y claro: es la plataforma del Golf, el Seat Leon, el Skoda Octavia, el Tiguan, el Ateca y eso significa que se basa en tánica del grupo Volkswagen, por eso no se ve tan nuevo. Lo que sí es espectacular es que este coche comparta plataforma con el Golf y, si miro hacia atrás, pienso: "Este coche es gigantesco". Pero no se siente así al conducirlo. Y eso está bien porque no transmite que conduces un gigante, sino un coche compacto. Eso lo han hecho muy bien. Y añade este nuevo interior, con el nuevo touchpad en el medio, y me gusta porque ya casi no hay botones y todo se maneja de forma táctil. No tiene cockpit virtual, como Audi o Volkswagen, pero seguro que acabará llevándolo. Hay que decir que no es tan confortable ni deportivo como en Mercedes, y es en esto donde marca la diferencia.
Conclusión
La hora del podio. El tercer puesto lo ocupa el Hyundai Santa Fe. Un SUV, eso sí, con sus punto fuertes, y quien priorice el equipamiento, deberá fijarse en él. Por desgracia no es el más barato de los tres, y eso le cuesta puntos decisivos. El Mercedes es el más caro, pero en comportamiento está en otra liga. Una pena que al ser más lujoso y tener los más avanzados asistentes y sistema multimedia, le resta puntos en el apartado de costes. El Kodiaq no tiene un comportamiento tan bueno como el Mercedes, ni el equipamiento del Hyundai, pero en puntuación global se pone por delante, gracias en parte a sus menores costes. Y su espacio, claro.
El Kodiaq gana porque ofrece mucho espacio y es un coche confortable. Es grande, pero tiene un comportamiento aplomado y es seguro con elementos como las luces de LED o el sistema de llamada de emergencia. El Skoda es más barato que los otros dos, pero ya no es un chollo. Pero en definitiva, es un buen coche.
¿Estás buscando SUV? Encuentra el tuyo rápidamemte en nuestro recomendador.
Descubre más sobre AutoBild, autor/a de este artículo.
Conoce cómo trabajamos en Autobild España.