Renault Sport, una historia de culto a la deportividad
El Megane R.S. Ultime es el último modelo desarrollado por Renault Sport, con el que cierra una historia de prestigio que ahora seguirá en Alpine.
Hace unos días, la marca francesa presentó el Renault Megane R.S Ultime, una edición limitada a 1.976 unidades que simboliza el cierre a una historia de prestigio, la de Renault Sport, volcada ahora en la aventura Alpine.
El último modelo de Renault Sport representa la culminación de 20 años de pasión y savoir faire desarrollados en la oficina de proyecto de Les Ulis, Francia. Laurent Hurgon, piloto de pruebas y desarrollo de Renault Sport y Alpine Cars, repasa el culto a las altas prestaciones y a la deportividad que anima a todos los equipos de la marca.
“Me considero afortunado por haber trabajado para Renault Sport durante todos estos años. Es el sueño de muchos entusiastas del automóvil estar en mi posición, con la tarea de desarrollar coches de carretera de alto rendimiento”, comenta Hurgon.
Renault Sport, una historia de culto a la deportividad
Esta historia comienza en la primera mitad de la década de los 90 con el desarrollo del proyecto ‘W94’, que culminó en el Renault Sport Spider, presentado en el Salón de Automóvil de Ginebra de 1995. Aquel deportivo causó sensación y rompió varios moldes.
Con su chasis de aluminio y su motor central trasero, este biplaza carente de techo (y de luna delantera en algunas versiones), fabricado en los talleres Alpine de Dieppe entre 1995 y 1999, era toda una declaración de intenciones.
La misma receta se aplicó a numerosos modelos con el mismo enfoque: la exigencia de prestaciones y el placer de conducir. En el año 2000 se aplicó esta filosofía a la segunda generación de Renault Clio y el resultado fue el Clio R.S., que ofrecía prestaciones superiores a Clio Williams con un diseño discreto.
La tercera y cuarta generación de Clio también recibieron el mismo tratamiento aunque, quizás, la hazaña más memorable fue Clio V6, con su motor de 230 CV en posición central trasera y sus aletas ensanchadas.
Del Clio al Megane
Luego, Renault Sport puso su atención en el Renault Megane. Entre los distintos productos, destaca el R26.R: “Este coche marcó el inicio de una nueva era para nosotros. El pliego de condiciones era sencillo: partir de un Mégane II R.S. y desarrollarlo como un coche de competición. Así que quitamos el asiento trasero, pusimos ventanillas de plexiglás, escapes de titanio, un capó de carbono, etc.”, explica Hurgon.
Otro desarrollo tecnológico que dejó huella en Laurent fue la dirección a las cuatro ruedas. “La primera vez que conduje con esta tecnología, fue como redescubrir el coche. Era revolucionaria y el Mégane R.S. podía beneficiarse de ella”.
El Megane R26.R batió el récord de vuelta rápida en el circuito de Nürburgring en 2008, en la categoría de tracción delantera, con Vicent Bayle al volante. Posteriormente, el propio Laurent Hurgon consiguió otros tres: en 2011 con un Mégane III Trophy, en 2014 con un Mégane III Trophy-R y en 2019 con un Mégane IV Trophy-R.
Tras la transformación de Renault Sport Cars en Alpine Cars el 1 de mayo de 2021, el Megane R.S. cierra una historia de prestigio, pero todo el saber hacer desarrollado a lo largo de estos años no se ha perdido: ahora se concentra en la gama Alpine.
Etiquetas: Coches compactos deportivos, Coches deportivos
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