7 virtudes y 3 defectos del Mitsubishi ASX

Durante muchos años, ha sido el modelo más vendido de la marca de los diamantes y por algo será. Vamos a ver siete virtudes y tres defectos del Mitsubishi ASX.

Desde su llegada al mercado, allá por 2010, el Mitsubishi ASX se ha convertido en uno de los modelos más exitosos de la marca japonesa, destacando sobre el resto de la gama. 

Mitsubishi comprendió el auge de los SUV compactos y supo crear un modelo muy competitivo, jugando con dos importantes bazas: el diseño y la tradición de la firma en el mundo off-road. 

A lo largo de estos años ha sabido ganarse al público y se ha ido poniendo al día con sucesivas actualizaciones. Cierto es que se mueve en un segmento muy duro y exigente, donde encuentra rivales como el Dacia Duster, el SsangYong Korando o el Nissan Qashqai 

El nuevo ASX es un vehículo SUV que apuesta por combinar un diseño atractivo, unas dimensiones moderadas y un carácter polivalente. Es por eso que este es uno de esos coches que puede enfrentarse a los grandes retos del día a día sin apenas sudar.

Virtudes del Mitsubishi ASX: un SUV compacto y polivalente

Con unas medidas de 4,36 metros de longitud, 1,81 metros de ancho y 1,64 metros de alto, el ASX es uno de los SUV más compactos de su categoría. 

Esto lo convierte en un modelo bastante polivalente, ya que se desenvuelve fenomenal en ciudad y cumple correctamente fuera de ella. Además, ofrece una buena habitabilidad y un maletero normal, con 406 litros. 

Diseño atractivo

Como hemos deslizado antes, una de las bazas del Mitsubishi ASX es su diseño. A la tradicional apuesta de la marca por la durabilidad en todos sus modelos, añade ahora un gran trabajo en el apartado estético. 

El todocamino japonés se desmarca de los estándares más convencionales y ofrece un gran equilibro entre sofisticación, dimensiones compactas y una cierta apariencia deportiva. 

Tracción total

Otra de las grandes virtudes del Mitsubishi ASX es que puede disponer de tracción a las cuatro ruedas. este es un aspecto importante en un mundo en que los SUV dominan el mercado, pero  pocos ofrecen tracción 4x4.

Esto acentúa el carácter polivalente del modelo que mencionamos en el primer punto, ya que permite circular fuera del asfalto con mayor seguridad que algunos de sus principales competidores. 

Precio competitivo

Si hablamos de ventajas, no podemos dejar pasar su precio. El SUV compacto de Mitsubishi es uno de los más económicos del mercado, a igualdad de potencia y equipamiento. 

El Mitsubishi ASX tiene un precio que empieza en 20.700 euros con el acabado básico y tracción delantera. 

Un vehículo equilibrado

Esto se puede ver como algo positivo o negativo, según la visión de cada uno, pero creemos que es una virtud. El ASX no destaca en ninguna faceta dinámica particularmente. No es el mejor todoterreno, ni el más ágil, ni el más compacto, ni el más polivalente, ni el mejor insonorizado, ni el más potente…

Sin embargo, podemos decir que tiene un poco de todo y, en su conjunto, es un vehículo muy versátil que cumple de manera solvente de muchas situaciones diferentes. 

 Cómodo en la mayoría de situaciones

El comportamiento dinámico del ASX destaca por priorizar el confort de los pasajeros. Las suspensiones tienen un ajuste más bien blando y resultan muy efectivas absorbiendo las imperfecciones que se presenten en la carretera. Esto, además, beneficia a la hora de salir a campo.

Por otra parte, el interior está correctamente insonorizado, sin ser tampoco sobresaliente en esta faceta. Salvo en fases de fuerte aceleración con el cambio automático, donde el motor sube mucho de vueltas, se siente poco ruido dentro.

Buena respuesta del motor

El Mitsubishi ASX monta un motor de 2.0 litros atmosférico con 150 CV. Es una potencia más que de sobra para rendir bien en cualquier circunstancia. 

Pese a la ausencia de un turbo, gracias a la gran cilindrada ofrece una gran respuesta cuando se pisa el acelerador. 

Defecto 1 del Mitsubishi ASX: solo una motorización

El primer defecto del Mitsubishi ASX guarda relación con la última de sus virtudes. Es verdad que el motor ofrece una buena respuesta, pero, el problema es que solo hay una opción disponible. 

Efectivamente, el crossover japonés solo está disponible con una única motorización que, además, es de gasolina, un bloque de 2.0 litros atmosférico, con un comportamiento bastante progresivo. Anteriormente, se podía elegir entre un motor menos potente y otro diésel, pero dejaron de venderse. 

Defecto 2: consumo elevado

Precisamente, al ser un motor atmosférico de 2.0 litros y con 150 CV hace que el consumo del ASX sea elevado. 

Homologa una media de entre 7,1 y 8,2 l/100 km, dependiendo del tipo de transmisión y si tiene tracción delantera o total. Aunque, en la vida real, es claramente más alto

Defecto 3: cambio automático

El último defecto del Mitsubishi ASX tiene que ver con su cambio automático. Se puede elegir entre uno manual de cinco relaciones y uno automático de tipo variador continuo con seis relaciones fijas, que no funciona del todo bien. 

Es un cambio suave, pero cuando se demanda más potencia, por ejemplo en un adelantamiento, el motor sube mucho de revoluciones y aumenta claramente el ruido, sin que haya un incremento de la velocidad acorde con el régimen del motor. 

A veces, la sensación es la de conducir un coche de menos de 150 CV. Es preferible la opción con cambio manual.