Prueba Opel Astra PHEV: el paso que necesitaba

No haya sexto malo ‘no electrificado’. Lo admito, este refrán (muy malo, por cierto) me lo acabo de inventar sobre la marcha, pero ilustra perfectamente la realidad del actual Astra, el compacto de siempre que ha sabido adaptarse como pocos al paso del tiempo y aprovechar las tendencias para seguir dando guerra. La prueba del Opel Astra PHEV lo deja claro.

Es otro que el primer Opel Astra electrificado de su historia, con un sistema híbrido enchufable de 180 CV (más adelante llegará una versión todavía más potente llamada GSe de 224) que hereda del grupo Stellantis. 

Del exterior del Astra 2022 seguro que te has hartado ya a ver fotos y explicaciones, así que en lo que me voy a centrar yo realmente es en contarte cómo va y sobre todo, dónde se posiciona con respecto a sus rivales. 

El sistema PHEV, que traslada toda la fuerza a las ruedas delantera, cuenta con el motor gasolina 1.6 turbo de 150 CV que va asociado a una transmisión automática de 8 relaciones (también vieja conocida de la casa, la caja EAT8) y un módulo eléctrico de 81,2 kW que se nutre de una batería de 12,4 kWh. 

En total son 180 CV que le proporcionan unas prestaciones más que convincentes, con un 0 a 100 km/h en 7,6 segundos y una punta de 225 km/h. 

La autonomía del Opel en modo eléctrico puro llega hasta los 60 km oficialmente (y hasta una velocidad de 135 km/h), aunque en el caso de trayectos puramente urbanos la vas a poder estirar hasta más allá de los 70 km (y viceversa, si haces recorridos largos por autovía, difícilmente vas a llegar a los 45 tal y como me ha pasado a mí). 

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Prueba Opel Astra PHEV (8 imágenes)

En marcha, es destacable el buen trabajo que se ha llevado a cabo en cuanto a aislamiento acústico. Rueda con un silencio y una calidad tremenda. Pero, sin duda, lo mejor de este Astra PHEV es que ha sabido desligarse mucho del tarado más o menos blando y comodón de muchos de sus compañeros de grupo. 

Su chasis ofrece uno de los comportamientos más equilibrados de su segmento, con un eje delantero incisivo y obediente que te permite avivar el ritmo con confianza. En ese sentido me recuerda mucho a un Volkswagen Golf, con un uso muy polivalente. 

Su dirección es rápida, pero no hace falta tiempo de adaptación como ocurre en un Mercedes Clase A o en un Peugeot 308 (con su volante tan minúsculo) y lo único que sí que habría que mejorar es el tacto de los frenos, sobre todo en maniobras y a baja velocidad, ya que es bastante difícil realizar una frenada gradual sin que aparezcan tirones. 

En cuanto a consumos, más alegrías: 17 kWh/100 km en modo eléctrico y 5,2 l/100 km de gasto medio (lejos de los 1,1 oficiales).

Mi opinión

El Astra ha sabido aprovecharse de la tecnología del grupo Stellantis para ofrecer una sofisticada versión PHEV de 180 CV que te va a conquistar por su polivalencia, calidad de rodadura y beneficios de su módulo eléctrico.