El Subaru Crosstrek Desert Racer es una bestia de la Baja
Si vives al este del Océano Atlántico es bastante probable que o no hayas oído hablar nunca de las carreras de baja o que no despierte en ti mucho interés. Sin embargo, en América es una disciplina que cuenta con una legión de seguidores. Una de las pruebas con más renombre es la Baja 500, que se celebra en Baja California, Méjico, y cuya edición 2019 quiere asaltar Subaru con su Subaru Crosstrek Desert Racer.
No es la primera vez que el fabricante lo lleva a la competición. Fue desarrollado junto a Crawford Performance y debutó en 2017, consiguiendo en 2018 el segundo puesto en su categoría, la Class 5 Unlimited. La idea es mejorar el registro este año, algo para lo que han exprimido un poco más de potencia a su motor.
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Se trata de un bloque bóxer 2.5 de aspiración natural que ahora entrega 300 CV. Lógicamente, también cuenta con elementos de altas prestaciones en lo que respecta, por su puesto, a la suspensión, los frenos, etc. Además, eliminando todo lo superfluo se ha conseguido contener su peso al mínimo.
Quirt Crawford, de Crawford Performance, explica que “Subaru es más conocida por su éxito en rallyes, pero sus motores se han utilizado en buggies off-road durante años. Mi objetivo con el programa Crosstrek Desert Racer era demostrar lo que se podía hacer con un motor bóxer sin turbo en una categoría ilimitada, y los resultados han sido potentes”.
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