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Un problema en la unidad creada por Huawei hace que tres fabricantes de coches tengan retrasos en su producción

Coche de Huawei

Un problema en la unidad informática fabricada por Huawei ha provocado que tres fabricantes de coches chinos tengan retrasos en su producción. Se trata de una unidad que se utiliza para almacenar sistemas avanzados de asistencias a la conducción.

Tres fabricantes de coches chinos han sufrido retrasos en su producción debido a un problema en la unidad creada por Huawei, lo cual ha provocado retrasos en las entregas.

El fallo se ha producido en una unidad informática fabricada por el gigante tecnológico chino y conocida como MDC 810, Esta unidad se utiliza para alimentar los sistemas avanzados de asistencias a la conducción

Según una fuente a la que ha accedido Reuters, el problema de producción se ha debido a la escasez de uno de los componentes utilizados en dicha unidad. 

Un problema en la unidad creada por Huawei hace que tres fabricantes de coches tengan retrasos en su producción

Coche de Huawei

El MDC 810 permite a los fabricantes de automóviles ofrecer las denominadas funciones de conducción inteligente, que incluyen la conducción autónoma en autopistas y la ayuda a los conductores a sortear atascos de tráfico, de forma similar a lo que ofrece el Autopilot de Tesla.

Según el medio británico, el retraso afecta a tres vehículos, entre los cuales, podría estar el Avatr 12 de Changan lanzado a finales del año pasado, que había asegurado 20.000 pedidos hasta el 1 de diciembre, así como el sedán Chery Luxeed S7, que también está demostrando ser popular y tenía aproximadamente 20.000 pedidos hasta el 28 de noviembre.

Coche de Huawei

Luxeed informó el mes pasado a los clientes de que se les reembolsarían hasta 10.000 yuanes (1.300 euros) si no podían recoger las llaves de su nuevo coche en la fecha prevista.

El tercer vehículo afectado por el retraso es el SUV Seres Aito M9, que se estrenó a finales de diciembre y es un coche eléctrico de gran tamaño y seis plazas que incorpora el sistema de conducción autónoma ADS 2.0 de Huawei. Se ofrece con un tren de propulsión compuesto por dos motores que producen 530 CV y una batería de 97,7 kWh que le proporciona 630 kilómetros de autonomía.

Los problemas en la unidad informática llegan en un momento en el que Huawei está tratando de conseguir más inversores para su unidad de negocio Intelligent Automotive Solution (IAS), que tiene cuatro años y que planea escindir. 

En China (el mayor mercado automovilístico del mundo) estas funciones se han convertido en un importante argumento de venta y son una razón clave por la que los fabricantes de automóviles han buscado asociarse con Huawei, según los analistas.

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