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La increíble historia del Citroën Traction Avant, el coche de las 100 patentes

Historia del Citroën Traction Avant

Apodado el coche de las 100 patentes, el Citroën Traction Avant combinaba las soluciones más modernas de la época. Además de tracción delantera, contaba con una estructura monocasco, frenos hidráulicos y suspensión independiente en las cuatro ruedas.

Cualquier verdadero aficionado al automovilismo, especialmente, a los coches clásicos, sabe que hay modelos que son algo más que un simple automóvil. Auténtico icono francés, el Citroën Traction Avant es uno de los pocos coches considerados por muchos como un verdadero monumento histórico. 

Llamado inicialmente Citroën 7, en alusión a su clasificación fiscal, se presentó en sociedad el 18 de abril de 1934 y, desde entonces, forma parte de la vida francesa. Y también podríamos decir internacional. 

Fue diseñado con el objetivo de relanzar a la marca de los chevrones y poner de relieve el espíritu innovador de un fabricante que había sido el primero en importar automóviles de serie a Europa en 1919, y que había inventado, entre otras cosas, el vehículo de semiorugas en 1921, la carrocería totalmente de acero en 1924 y el motor flotante en 1932. 

La principal característica de la innovadora berlina francesa era que reunía en un solo coche todas las soluciones técnicas más modernas de la época, como la tracción delantera, la estructura monocasco, los frenos hidráulicos y la suspensión independiente en las cuatro ruedas.

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La revolución del Traction Avant, el coche con 100 patentes

Historia del Citroën Traction Avant

En su momento, fue considerado el coche con mejor comportamiento en carretera, el más seguro y el más confortable. A lo largo de su carrera, se benefició de avances tecnológicos y fue apodado el coche de las 100 patentes.

Sin embargo, la vida del Citroën Traction Avant no fue nada fácil. Nació en una época extremadamente convulsa, en plena Gran Depresión y auge del totalitarismo, con la amenaza de un nuevo conflicto bélico en el horizonte. 

Amenaza que se cumplió el 1 de septiembre de 1939, con la invasión de Polonia por parte del ejército nazi, sin olvidar la Guerra Civil española iniciada tres años antes, que sirvió de antesala de la Segunda Guerra Mundial.

A principios de 1933, mientras el presidente de la República de Weimar, Hindenburg, nombraba canciller a Adolf Hitler, André Citroën decidió sustituir los Citroën 8, 10 y 15, que se habían presentado en octubre de 1932, con la intención de causar un impacto significativo y superar a toda la competencia, lanzando un coche completamente revolucionario

El objetivo del genio de la automoción francesa era ganar al menos dos años de ventaja para protegerse también de los efectos que la crisis económica azotaba al mundo entero desde principios de los años 30, tras el crack de 1929 en la bolsa de Nueva York. 

Un coche increíblemente moderno y avanzado

Historia del Citroën Traction Avant

Por ello, este nuevo Citroën sería especialmente notable y reuniría el máximo de innovaciones técnicas: una carrocería monocasco de acero que eliminaba la necesidad de un chasis y bajaba significativamente el centro de gravedad, tracción delantera, un motor de válvulas en culata con manguitos desmontables, control hidráulico de los frenos, suspensión de barra de torsión independiente en las cuatro ruedas y transmisión automática

Sin embargo, por falta de tiempo, la transmisión automática se omitió en los primeros modelos de producción de 1934. Además de estas innovaciones técnicas, el Traction sin chasis presentaba una carrocería rebajada y aerodinámica tanto en sus líneas como en su fondo plano. 

Por último, su compacto conjunto de motor y caja de cambios, además de su bajísimo centro de gravedad, permitían la máxima distribución del peso delantero. Los primeros periodistas y conductores quedaron impresionados con el nuevo modelo de la marca. 

Hasta ese momento, ningún coche había ofrecido una conducción tan segura y fácil en todo tipo de situaciones. El Traction Avant estableció un nuevo estándar en cuento a comportamiento en carretera y, gracias a todas sus cualidades, constantemente mejoradas, alcanzó una ventaja técnica sobre todos los demás.

Diferentes tipos de carrocerías

Historia del Citroën Traction Avant

Desde su lanzamiento, el Citroën Traction Avant estuvo disponible con diferentes tipos de carrocerías. Se ofreció en versión sedán de cuatro puertas, pero también en otras dos versiones más exclusivas: coupé (o falso descapotable) y descapotable con parabrisas abatible (o roadster). 

Más tarde apareció el 11, que añadía una nueva variante con carrocería larga de seis ventanillas, configurada como coche familiar de siete a nueve plazas, taxi o berlina de cinco a seis plazas, así como en carrocería larga de cuatro ventanillas configurada como coupé urbano de cinco plazas. 

A partir de abril de 1938, el 11 también estuvo disponible en una versión comercial mixta utilitario-turismo de cinco plazas o 500 kg de carga útil. La producción de las versiones coupés del 7 y 11 finalizó en septiembre de 1938, mientras que la de los descapotables 7 y 11 concluyó en noviembre de 1939. 

En octubre de 1938 salió el 15 Six, con carrocería berlina de cinco o seis plazas, y en mayo de 1939 se ofreció también en limusina de cinco o seis plazas y en familiar de ocho o nueve plazas. También se llegaron a montar una docena de descapotables, pero no llegó al mercado.

Evolución del Traction Avant: de 1934 a 1957

Historia del Citroën Traction Avant

El 7

El primer modelo de la Traction, el 7 A, comenzó a fabricarse el 18 de abril de 1934. Incorporaba un motor de cuatro cilindros con un diámetro por carrera de 72 x 80 mm, 1.3 litros y 32 CV para 7 CV fiscales. Fue el único modelo de 7 CV reales.

En junio de ese mismo año llegó el 7 B, con un nuevo motor que tenía un diámetro por carrera de 78 x 80 mm, aumentando la cilindrada a 1.5 litros y la potencia a 35 CV con un régimen fiscal de 9 CV. El 7 B alcanzaba entonces velocidades de 100 km/h. Luego llegaron el 7 S, con 46 CV, y el 7 C, con 36 CV.

El 11

El primer 11 tomó el nombre de 11 A y salió a la venta en agosto de 1934, un mes después que el 7 S, utilizando el mismo motor de 1.9 litros y 78 x 100 mm de diámetro por carrera que producía 46 CV para 11 caballos fiscales. Exteriormente, se distinguía del 7 por su carrocería más espaciosa, 12 cm más ancha y 20 cm más larga.

En octubre de 1934, en el Salón del Automóvil de París, el 11 AL sustituyó al 7 S con el mismo motor, pero con un nivel de acabado interior superior al del 11 A. En 1937, los 11 B y 11 BL sustituyeron a los 11 A y 11 AL. 

En abril de 1938, se lanzó una versión utilitaria del 11 conocida como 11 C, era un vehículo polivalente convertible a voluntad que ofrecía una configuración turística o utilitaria con una carga útil de 500 kg. 

A partir de marzo de 1939, todos los modelos del 11 recibieron un nuevo motor denominado 11 Performance que elevaba la potencia hasta los 56 CV. Ya en mayo de 1955, cuando Citroën trabajaba en el DS, llegó la última evolución de los 11 B, 11 BL y 11 C con la adopción de un nuevo motor llamado 11 D, con potencia aumentada a 68 CV

El 22

El 22 es la versión más prestigiosa y enigmática de todos los Traction Avant. Presentado en el Salón del Automóvil de París en 1949, representó el modelo de alta gama con un motor V8 de 3.8 litros totalmente nuevo con 100 CV de potencia, que le permitía alcanzar los 140 km/h de velocidad máxima.

Exteriormente, se distinguía por unos faros aerodinámicos, una parrilla marcada con el número ocho y unos parachoques superpuestos de media hoja. Sólo se fabricaron una veintena de unidades de prueba, pero, a pesar de diversos rumores y de las apasionadas investigaciones de coleccionistas e historiadores, todas parecen haber desaparecido definitivamente...

El 15

Tras abandonar los proyectos del 22, Citroën seguía aspirando a hacer una versión de lujo del Traction Avant y lanzó el 15 Six en octubre de 1938. Contaba con una mecánica de seis cilindros en línea y 2.8 litros que entregaba 77 CV (16 CV fiscales). 

Estéticamente, era idéntico al 11 B, pero el nuevo motor obligó a alargar 11 centímetros el capó, dotándolo de una personalidad distintiva. Potente y silencioso, ofrecía unas cualidades excepcionales en carretera y confort, por lo que rápidamente fue apodado la Reina de la Carretera

El 15 Six alcanzó el éxito de la posguerra y se impuso como el coche francés de gama alta hasta la cima del estado, donde adquirió un verdadero estatus de icono. En mayo de 1954, se comercializó un nuevo 15 Six, el 6 H, que estaba notablemente equipado en el eje trasero con una suspensión hidroneumática que luego equiparía el DS 19.

Una vida de aventuras por todo el mundo

Historia del Citroën Traction Avant

Desde su lanzamiento, el Citroën Traction Avant se distinguió en diferentes eventos y pruebas deportivas. Durante el verano de 1934, atrajo la atención en los concursos de elegancia de Bagatelle, Bois de Boulogne y Deauville donde, ya fuera como berlina, descapotable o coupé, sus líneas rebajadas y aerodinámicas le permitieron ganar varios Grandes Premios, Primeros Premios, Premios de Excelencia y Premios del Jurado.

También en 1934, con François Lecot y Maurice Penaud, demostró sus cualidades mecánicas realizando impresionantes incursiones de resistencia como una Vuelta a Francia y Bélgica recorriendo 5.007 kilómetros en 77 horas y la primera conexión postal París-Moscú-París, con 3.200 kilómetros recorridos en ocho días. 

Del 22 de julio de 1935 al 26 de julio de 1936, bajo el control del Automóvil Club de Francia, François Lecot partió en solitario y realizó un raid de 400.000 kilómetros, esencialmente entre París y Montecarlo, con una media de 1.000 kilómetros diarios.

Historia del Citroën Traction Avant

Del 18 al 23 de julio de 1934, un Traction Avant llamado Rosalie VII y decorado con los colores de los aceites Yacco salió a la pista en el autódromo de Linas Montlhéry y estableció cinco récords internacionales de clase E, entre ellos los de seis días a 111.183 km/h y el de 10.000 millas en 14 horas, 43 min, 14 segundos y 09/100 para una distancia total de 16.093,420 kilómetros. 

Otro Traction, esta vez bautizado Rosalie IX, realizó un raid de resistencia en carretera abierta de marzo a mayo de 1936 con los concesionarios de la red Citroën y el equipo de pilotos Yacco al volante. Recorriendo un mínimo de 1.500 kilómetros diarios, su raid terminó frente a la sede del Automóvil Club de Francia, tras haber recorrido 104.000 kilómetros.

Más recientemente, entre julio de 1988 y enero de 1990, dos Traction Avant 11 B de 1953, llamados Chrome y Cambouis, completaron una vuelta al mundo de 100.000 kilómetros por los cinco continentes con cuatro jóvenes franceses.

Un emblema para la marca francesa

Historia del Citroën Traction Avant

El Citroën Traction Avant no fue el primer coche de la historia con tracción delantera, ya que ese honor le corresponde al Cord L-29 estadounidense de 1929. En Europa, antes que el francés apareció el DKW F1, con tracción delantera. Pero no hay duda de que el coche que popularizó este modo de transmisión fue el Citroën.

Su producción finalizó el 1 de enero de 1957, con un total de 758.948 unidades de todos los modelos fabricadas a lo largo de poco más de 23 años. El último ejemplar producido abandonó la cadena de montaje el 24 de julio de 1957.

Todavía hoy sigue siendo un emblema para la marca francesa, encarnando su promesa de diseño y confort para la movilidad del mayor número de personas posible.

Su estilo aerodinámico distintivo, inspirado en el Streamline, lo convirtió rápidamente en un modelo emblemático de Citroën que perduraría en el tiempo y evocaría un imaginario de resistentes y gángsters que se perpetuó en numerosas películas.

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