Logo Autobild.es

¿Por qué han empeorado los resultados de Fernando Alonso y Aston Martin?

Fernando Alonso Singapur

Aston Martin no puntúa en un fin de semana en el que Fernando Alonso soñaba con luchar por la victoria 33. ¿Qué está ocurriendo?

Singapur no fue el Gran Premio que Aston Martin y Fernando Alonso esperaban. Esta era una de esas carreras, como Mónaco o Hungría, donde el equipo veía opciones de pelear por una victoria que, en realidad, cada vez parece estar más lejos. Alonso acabó 'técnicamente' último, sin puntos por primera vez este año y muy lejos del ganador, Carlos Sainz. ¿Cuál es el problema?

Hace seis meses, el Gran Premio de Bahréin confirmaba la sorpresa de Aston Martin vista en los test de pretemporada. El equipo había pasado de ser el séptimo de la clasificación de constructores de 2022 a estar en el podio en el debut de un nuevo concepto de monoplaza. Alonso volvía a sonreír y toda España se ilusionaba con la posible consecución de la victoria 33.

El equipo hacía referencia a la llegada de mejoras en un futuro cercano, las cuales podrían reducir la ventaja de 20 segundos que Red Bull era capaz de sacar a Aston Martin. Alonso se mantuvo en el podio de Arabia Saudí, de Australia, lo rozó en Azerbaiyán, volvió a ser tercero en Miami, casi gana en Mónaco... y llegó el primer susto.

Fue en el GP de España, donde Alonso finalizó en un discreto séptimo puesto que el año pasado habría parecido positivo por añadir puntos al casillero, pero que en una temporada plagada de podios dejaba un sabor de boca agridulce. El segundo lugar en Canadá, de nuevo cerca de Verstappen, hizo pensar que el bajón era cosa solo de una carrera y de las peculiaridades de Barcelona... pero no.

A posteriori se ha creído que aquella caída de ritmo pudo estar relacionado con una supuesta mayor flexibilidad del alerón delantero del monoplaza británico. 

Al parecer (porque son rumores), el equipo fue advertido sobre el hecho de que esta parte del coche flexionaba en exceso y por ello se le pidieron cambios. No se ha dicho que sea así públicamente, pero algunos, como Toto Wolff, de Mercedes, creen que la pérdida de competitividad está directamente relacionada con esta 'adecuación'.

Al séptimo de Barcelona le siguió una quinta plaza en Austria, el séptimo en Silverstone y el noveno de Hungría. No fueron carreras fáciles para Alonso, que regresaba momentáneamente al lugar donde estaba el año pasado con Alpine. Aston Martin había sido adelantado en la carrera de la evolución por equipos como McLaren e incluso Williams.

Pero, además, la introducción de una nueva construcción de los neumáticos por parte de Pirelli en Gran Bretaña, parecía haber afectado negativamente a Aston Martin. El regreso del verano fue mucho más positivo, pero las alegrías duraron poco. 

Tras las vacaciones, Alonso fue segundo en Zandvoort, de nuevo solo tras Verstappen... y, después, en Italia, llegó otro golpe de realidad en forma de noveno puesto. 

El golpe sobre la mesa de Carlos Sainz en Singapur

¿Cuestión de alerones?

Fernando Alonso Singapur Pit Lane

Sobre el papel, Singapur era un circuito positivo para el Aston Martin AMR23... o quizás el anterior Circuito de Singapur, pues recordemos que desde este año la configuración del trazado ha cambiado y ahora es menos ratonero tras la eliminación de cuatro curvas. A eso le unimos que el AMR23, en realidad, no funcionó bien en el circuito.

No fue el único al que le ocurrió. Solo hay que ver cómo el Red Bull que sacaba veinte segundos a otros coches o metía tres o cuatro décimas en clasificación al resto, esta vez no estaba. Hay quien cree que fue un problema de configuración en el box de los de Milton Keynes.

Pero otro factor que pudo alterar la clasificación habitual de la F1 en Singapur fue la directiva TD018 y que también pudo afectar a Aston Martin, además de a otros equipos... como Red Bull. Esta directiva 'aclara' y pone límites a lo que dice la normativa en sí sobre la flexibilidad de los alerones, y pone fin a los vacíos legales existentes en el nuevo reglamento técnico. 

También se introdujo la directiva TD019, con el objetivo de limitar la flexibilidad del suelo del monoplaza.

Y, además, Alonso corrió con el coche 'tocado' 

Pero más allá de la cuestión de los alerones, está claro que no pasas de soñar con la victoria al último puesto de una carrera. El AMR23 era un coche difícil de conducir en Singapur, e incluso "inconducible" según el propio Alonso. Aparte de todo lo expuesto anteriormente, de los neumáticos, de los alerones, del DRS... el monoplaza tenía daños.

Lo ha admitido Mike Krack, jefe del equipo británico, que ha confirmado las imágenes que circularon desde ayer por redes sociales sobre unos posibles daños en la suspensión. "Tuvimos unos daños en el coche que tenemos que analizar. Fue en uno de los carenados de la suspensión, una pieza aerodinámica. Lo vimos en la parada en boxes y en imágenes", dijo, según Motorsport.com.

Al parecer, esos daños estuvieron ahí desde la segunda vuelta de la carrera, y aunque no se ha especificado cómo afectó en el ritmo del monoplaza, está claro que podrían ser causantes de algunos de los problemas para controlar el coche durante la carrera... y que explicarían el decimoquinto puesto final.

¿Qué habría pasado de no haber sido por ese problema, por la sanción y por la salida de pista? Quizás habríamos visto a Alonso en los puntos, en un noveno o décimo puesto, puede que peleando con Red Bull. Sin ser brillante, al menos habría sido una carrera mucho más positiva.

El GP de Japón, este próximo fin de semana, será clave para saber si la directiva de los alerones ha sido el detonante de la caída de rendimiento de equipos como Aston Martin o Red Bull... o, quizás, esta vez sí, sea cosa de una carrera; porque Singapur, como bien sabemos, es único. Y si es la tónica de lo que queda de curso, tocará sufrir y aprender para 2024...

Descubre más sobre , autor/a de este artículo.

Conoce cómo trabajamos en Autobild España.