Gloria y caída en 20 años, la dramática evolución de los coches diésel en España
Otrora ensalzados, no pasan por su mejor momento.
Cualquiera que peine canas ya sabrá que en la vida todo parece ser cíclico, pero que también hay modas que llegan y se van para no volver nunca. También habrá experimentado en alguna ocasión el auge de una tendencia, que incluso habrá contando con apoyo del público y las instituciones, para luego ser denostada.
En el sector del automóvil hay un ejemplo clarísimo de ello: los coches diésel. En los últimos 20 años (quizá un poco más cerca del cuarto de siglo) este combustible ha pasado de ser la aparente panacea a ser considerado como la fuente de todos los males.
Vamos a repasar la dramática evolución de los coches diésel en España.
Ascenso y caída
Gracias a los datos recogidos por EPData, la evolución por tipos de carburante durante los 10 últimos años se puede apreciar de manera muy detallada, mes a mes, lo que muestra de manera precisa el auge y caída que han experimentado estos vehículos.
Lo primero es puntualizar el hecho de que, aunque los diésel comienzan en una posición muy elevada, hablamos de 2014, así que ya habían empezado a descender en popularidad y en años previos la diferencia existente entre los tipos de combustible eran incluso mayores.
En enero de 2014 los coches de gasóleo suponían el 70,6% de las matriculaciones del mercado, con los gasolina ocupando el 27,7% y el conglomerado de “alternativos” significando apenas el 1,7% de las ventas de coches nuevos.
Desde ese momento ambos combustibles empezaron trayectorias inversas hasta quedar prácticamente igualados en junio de 2017, momento en que el diésel supuso el 47,6% de las matriculaciones, siendo superado por primera vez por los gasolina, que llegaron hasta el 47,7.
Desde ese punto, salvo por unos meses puntuales, no hubo retorno, cambiándose los papeles, aunque el predominio de los gasolina nunca ha llegado a ser absoluto, puesto que su ascenso, paralelo a la caída de los diésel, ha ido acompañado de la irrupción e las mecánicas híbridas de todo tipo, que se han abierto hueco en el mercado hasta conseguir un reparto más homogéneo.
Así, los modelos de gasolina han aguantado el tipo hasta el ultimo año, cuando han sido superados por los automóviles impulsados por energías alternativas, que se han asentado en entorno al 50% de las matriculaciones totales del país.
Los vehículos diésel, por su parte, han ido viendo este enfrentamiento desde una posición cada vez menos relevante en el mercado. Han caído progresivamente y ahora, mes a mes, se conforman con ser en torno al 10 – 12% de las ventas de coches nuevos, un dato que si bien no llega a hacer que sean residuales, si dista del dominio que ostentaron hace no tanto.
A pesar de la paulatina caída de los coches de gasóleo, el éxito que tuvieron en los años anteriores hace que todavía supongan una parte de importante del parque automovilístico Español.
Con datos recopilados por UNESPA en 2020, de los 24,5 millones de turismos asegurados en el país, unos 15 millones utilizaban diésel de combustible, frente a los 9 millones de gasolina. De manera progresiva, conforme se den de baja los coches más antiguos, la cifra se equilibrará, pero todavía falta hasta que llegue ese momento.
La situación actual
Esto lleva a la situación en pleno 2024, en el que se confirma que la presencia de los coches diésel entre las ventas de automóviles nuevos es cada vez más reducida: en España en 2023 solo el 12,5% fueron coches de gasóleo, claramente por detrás de los de gasolina (40,8%) e incluso a todavía más distancia del conglomerado de “otras mecánicas” (46,7%).
De hecho, una vez comenzado el año, el panorama no es mucho mejor: en el mes de enero se matricularon 7.553 turismos con motor diésel, lo que supone un descenso del 10,19% en comparación al mismo periodo del año anterior.
A futuro, la tendencia debería seguir los mismos derroteros, puesto que la implantación de las Zonas de Bajas Emisiones (ZBE) hará que los compradores se decanten cada vez más por vehículos con etiquetas ECO o CERO.
En Europa la situación es similar
Aunque las condiciones de los mercados europeos vecinos difieren bastante de los españoles, según el caso, los resultados de ventas de coches ordenados por combustibles dejan bastante claro que el diésel está prácticamente fuera de juego.
El año pasado fue la primera vez que los coches eléctricos superaron a los de gasóleo, y no porque hayan tenido un desempeño espectacular, si no porque el papel de estos últimos ya es meramente testimonial.
De las matriculaciones registradas en Europa en 2023, los cero emisiones supusieron el 14,6% del mercado, mientras que los diésel se quedaron en un 13,6%. Todavía más evidente es la diferencia si se compara con los que han sido sus eternos rivales, los coches de gasolina, que tuvieron una cuota de mercado del 35,3%.
Etiquetas: Diésel
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