Por todos es sabido que Elon Musk tiene la capacidad de hacer afirmaciones audaces sobre todo lo que tiene que ver con sus empresas, independientemente de si se trata de un viaje espacial de SpaceX o de un vehículo de la marca Tesla. 

Sin embargo, esta visión de futuro a veces juega malas pasadas y de eso sabe mucho Musk. Por ejemplo, de las promesas incumplidas con el Tesla Cybertruck, o lo que es lo mismo, todo lo que prometió que ofrecería el vehículo de producción cuando presentó el prototipo en 2019, y lo que se quedó por el camino cuando llegó al mercado a finales del año pasado.

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El error en las previsiones de futuro de Elon Musk

Algo parecido le ocurrió también al CEO de Tesla en 2019, cuando hizo una de sus declaraciones más extrañas. Musk afirmó que quienes compraran un Tesla nuevo entonces, estarían adquiriendo “un activo que se aprecia, no un activo que se deprecia”. Estas palabras afirmaban que un Tesla comprado en 2019 valdría más en 2024 a pesar de ser un vehículo usado.

Pero está afirmación ha quedado muy lejos de la realidad. Y es que, cualquiera con un conocimiento básico del mercado del automóvil sabía ya entonces que no había posibilidad alguna de que Tesla pudiera desafiar las normas de la industria y que de alguna forma se revalorizara con el paso del tiempo.

Según Carscoops, que ha indagado en Edmunds, una web de compraventa de vehículos usados de EE.UU., el valor medio de un Tesla Model 3 de segunda mano es de 29.552 dólares, cuando el vehículo nuevo cuesta 40.630 dólares en su versión de acceso a gama, a lo que habría que añadir otros 6.000 dólares por el piloto automático mejorado y 12.000 dólares por la capacidad de conducción autónoma total.

Los Model 3 más antiguos incluso se venden por menos de esos 29.000 dólares de media, y eso que son coches con, incluso, más de 90.000 millas (145.000 kilómetros).

Los Tesla usados se han depreciado mucho este último año

Una depreciación como esta es común en el mercado del automóvil y, en el futuro, el valor de los Tesla usados podría verse aún más afectado. Tan solo en 2023, el Model 3 de 2021 se ha devaluado un 29%, pasando de 40.522 dólares en enero de 2023 a 28.700 dólares en enero de este año. Esto se sitúa por encima de la depreciación media de 2021, que fue del 19,5%.

La justificación para entender esta enorme devaluación está relacionada con la agresiva estrategia de precios que ha llevado a cabo Tesla estos últimos meses, con bajadas de precios de sus productos nuevos que han afectado directamente al coste de las unidades de segunda mano. Tampoco ayudó que Hertz decidiera vender 20.000 de sus vehículos eléctricos, la mayoría Tesla, de su flota de alquiler.

“Se puede pensar en cada coche que vendemos o producidos que tiene capacidad de autonomía total como algo que en el futuro puede valer cinco veces más de lo que vale hoy”, afirmaba de nuevo Elon Musk durante la conferencia de resultados de Tesla del tercer trimestre de 2023.