Cinco trucos para lavar el coche que funcionan de verdad

Es posible que no lo sepas, pero moverte con el vehículo demasiado sucio puede ser motivo de multa. No de las que quitan puntos, pero si quieres evitar tener que pagar 200 euros (100 con descuento por pronto pago) te aconsejamos tomes nota de estos cinco trucos para lavar el coche que funcionan de verdad. 

Antes de seguir es importante hacer otra aclaración: el lavado del coche se debe llevar a cabo en un lugar adecuado, si empiezas a tirar cubos de agua en plena calle te exponer a ser sancionado, no por la DGT, pero sí por el ayuntamiento de la localidad en la que te encuentres. La cuantía depende del lugar; en Madrid, por ejemplo, la multa por ensuciar la vía pública oscila entre 750 y 2.000 euros.

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Cinco consejos para lavar el coche

Es cierto que para que te multen por llevar el coche sucio debes llevarlo muy sucio. La razón por la que te pueden sancionar ya no es tanto porque el vehículo no luzca bien sino porque la suciedad puede restar visibilidad al conductor, algo que sí está tipificado como infracción leve.

Sea para evitar la multa o sea porque no te gusta que tu vehículo no luzca en todo su esplendor, aquí van cinco consejos para dejarlo reluciente por dentro y por fuera.

1. Elige bien el lugar

Si vas a lavar el coche a mano y por tu cuenta es importante que selecciones el lugar adecuado. Esto no va solo por la multa que ya te hemos explicado, también para que el resultado sea óptimo.

Por ejemplo, es muy recomendable buscar un lugar en el que no dé mucho el sol ya que si este incide con fuerza sobre el coche el jabón se secará antes de que puedas retirarlo dejando marcas en la carrocería y en las llantas.

2. Elimina los restos de arena y polvo 

Dicen los expertos que para lavar el coche a mano lo ideal es contar con tres cubos de agua: uno con agua y jabón para limpiar la carrocería; otro con agua limpia para aclarar; y un tercero en el que aclarar las esponjas.

Pero antes de empezar a aplicar agua y jabón es muy importante retirar los restos de polvo y arena que quedan en la carrocería ya que de lo contrario al pasar la esponja o el trapo podríamos arañar la pintura. La manera más eficaz es con una lanza de aire a presión que además, te ayudará a eliminar los restos de excrementos de pájaros, altamente corrosivos para la pintura.

3. Escoge bien los productos

Los trapos, mejor de microfibra; el jabón, si puede ser especial para carrocerías mejor, sino, al menos que sea neutro; también es conveniente usar limpiacristales; y un producto específico para llantas.

Para el habitáculo olvida por completo la idea de usar lejía u otros productos corrosivos.

4. Limpio por fuera y por dentro

Hay algunos trucos para limpiar la carrocería que conviene destacar:

• Siempre se debe limpiar de arriba a abajo, para que el agua que cae vaya arrastrando la suciedad hacia el suelo
• Para aclarar la espuma puedes recurrir a los cubos de agua pero si tienes la opción siempre será mejor con la manguera
• Es importante secar el coche para que no queden marcas. Lo ideal es utilizar un paño o toalla de microfibra
• Para las ventanillas, el mejor truco es un limpiacristales y papel de cocina o periódico

En lo que se refiere al interior del coche, es importante eliminar los restos de ácaro y polvo, especialmente si hay algún alérgico en la familia. Lo mejor es utilizar un aspirador que, además, te ayudará a llegar a los espacios menos accesibles.

Presta atención a las salidas de aire que es donde acumula más polvo y suciedad. Para el salpicadero, el volante y la palanca de cambios recurre a un producto específico que además de dar más brillo creará una película protectora que reducirá los daños ocasionados por el sol y el uso.

5. Las llantas merecen especial cuidado

Un coche no está del todo limpio si no lo están sus llantas. Este elemento es especialmente complicado porque acumula, por un lado, la suciedad de la carretera y, por otro, se ensucia por culpa de las pastillas de freno.

Para limpiar las llantas es aconsejable empezar con agua y un producto específico que, como norma general, habrá que dejar actuar unos minutos. Después, habrá que retirar el exceso de producto con una bayeta (mejor de microfibra) y aclarar con agua abundante.