Comparativa: Porsche Panamera Sport Turismo, Panamera, Cayenne

En Porsche también se puede elegir entre un sedán, un familiar y un SUV. El primero, el Porsche Panamera, el segundo el Panamera Sport Turismo, pero que sus apariencias no te lleven a engaño: ambos tienen el rendimiento de conducción de los superdeportivos. 

Interior

Y enormes dimensiones, con la cantidad de espacio correspondiente, que por supuesto también se aplica al tercero, el Porsche Cayenne. Hay una sorprendente cantidad de espacio en la parte trasera del Panamera, que también es cómodo para personas adultas. El Sport Turismo da un paso más allá, con tres centímetros más de aire por encima de las cabezas.

En el Cayenne, no hay mucho más espacio que en el Sport Turismo, pero la sensación es más aireada y te sientas más elevado. En la parte trasera, el banco se puede mover longitudinalmente y el ángulo del respaldo se puede ajustar, y el maletero traga de 656 a 1.708 litros.

El Sport Turismo solo puede cargar un poco más que el sedán: su maletero cubica de 515 a 1.384 litros, el Panamera de 495 a 1.334.

Apenas hay diferencias entre los tres en el puesto de conducción. Como era de esperar, ambas variantes de Panamera tienen el mismo cockpit, y la parte delantera izquierda del Cayenne también es muy típica de la marca en términos de diseño. 

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Y, por supuesto, el encendido está en el lado izquierdo del volante también en el Cayenne, que impresiona con su dirección exacta y precisión en curvas. Como muy pocos otros SUV.

Pero el Panamera y el Sport Turismo son aún mejores en comportamiento, los puedes conducir de manera suave e increíblemente ágil, mientras son tremendamente cómodos, con una dirección sensible y una transmisión de doble embrague ultrarrápida.

Y el V8 de 4.0 litros en los tres Porsche es un motor único en su clase, con aceleración bruta, capacidad de giro espontáneo y buenos modales. 

¿Con cuál nos quedamos?

Los tres Porsche, aquí como GTS, ofrecen un rendimiento de conducción excepcional y una asombrosa cantidad de espacio. Pero el Cayenne es más variable y práctico… y cuesta significativamente menos. La balanza, al menos por puntos, se inclina hacia el SUV.