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Comparativa de dos ahorradores: Renault Megane y Hyundai i30

Estos Renault Mégane y Hyundai i30 economizan: uno con enchufe y el otro con función de navegación, ¿quién puede hacerlo mejor? Nuestra comparativa da la respuesta

En Renault, E-Tech significa: motor de gasolina de 1,6 litros está apoyado por otro eléctrico integrado en la transmisión automática multimodo y un generador de arranque por correa de 48 voltios, alimentado por la batería de 9.8 kWh debajo del piso de carga. 

Eso es suficiente en este Renault Mégane E-Tech para 53 kilómetros totalmente eléctricos. Si el conductor pone la palanca selectora en "B", el generador de arranque se recupera lo máximo posible y alimenta la batería. Esto funciona bien en carreteras rurales; algunos conductores se toman casi como un deporte el ganarle una o dos líneas en el indicador de carga.

Barrido Mégane

Olaf Itrich / AUTOBILD

Sin embargo, el coche se siente extrañamente frenado en la marcha "B". La transmisión automática sin embrague es una pieza de ingeniería exigente; desafortunadamente, mantiene el efecto de goma elástica, que recuerda a una transmisión por variador continuo. 

¿Y cómo le va al Hyundai i30? Se basa en un robusto 1,5 litros turbo de gasolina y en general se siente más ligero y no tan frenado. También muestra cierta creatividad tecnológica: una caja de cambios manual con función de navegación, una especialidad coreana.

Así se conducen

Barrido i30

Olaf Itrich / AUTOBILD

Este modo de navegación del Hyundai es toda una experiencia: cuando navega a alta velocidad, el embrague eléctrico se abre cuando se levanta el acelerador, y el coreano rueda casi sin resistencia con el motor apagado, con cero emisiones. 

En la prueba de consumo medio ha requerido 6,5 ​​l/100 km, que el Mégane socava fácilmente con sus 4,1 l/100 km… siempre que la batería esté llena. Cuando está vacía, la sed aumenta a 6,8 litros, más que en Hyundai. 

Zaga Mégane

Olaf Itrich / AUTOBILD

La suspensión y el comportamiento de conducción parecen muy equilibrados en el Renault. La batería pesada en la parte trasera mejora la distribución del peso, de modo que el híbrido compacto sigue los movimientos de dirección del conductor de una manera ejemplar. En la prueba evasiva, parece seguro. 

Por último, pero no menos importante, el Mégane suma puntos en la prueba de frenada, en cuyo buen resultado los Michelin Sport Pilot hacen su parte.

Por dentro

El cockpit del Renault no es tan convincente. El paquete de infoentretenimiento con pantalla táctil de 9,3 pulgadas opcional no tiene la navegación por menús más intuitiva del mundo.  ¿Y por qué el modo híbrido no se llama así? Ellos han preferido llamarlo "My Sense".

Cockpit Mégane

Olaf Itrich / AUTOBILD

El concepto operativo coreano nos parece más lógico y más fácil de aprender. En general, el infoentretenimiento de 10,25 pulgadas es más agradable de usar. 

El volumen, por ejemplo, reacciona a un mando giratorio, y otra media docena de funciones importantes se seleccionan de manera rápida y lógica. 

Cockpit i30

Olaf Itrich / AUTOBILD

Hay pocas diferencias en la calidad de los asientos. En ambos son firmes en la parte delantera y bastante cómodos, mientras que la parte trasera del Hyundai brilla con más altura de asiento por encima del piso del vehículo y aún más altura por encima de la cabeza, mientras que en el Renault la fila dos va más justa. 

Conclusión

2º puesto: Renault Mégane E-Tech Plug-in 160. Suspensión refinada, a la transmisión hay que acostumbrarse: ¡un auténtico francés! Muy económico en modo eléctrico. 

Estática Hyundai y Mégane

Olaf Itrich / AUTOBILD

1er puesto: Hyundai i30 1.5 T-GDI 48V-Hybrid. Un compacto económico sin modo eléctrico. Conducción agradable, y gana más puntos en términos de espacio, calidad y garantía.

Etiquetas: Coches compactos

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