EXCLUSIVA: así es el fraude masivo en las emisiones de los camiones de España

La Guardia Civil mantiene una operación abierta para medir el alcance de un fraude masivo en las emisiones de los camiones. AUTOBILD.ES ha tenido acceso en exclusiva a los resultados de esta investigación, que se ha llevado a cabo con la tecnología de medición remota de la empresa Opus RSE por la dificultad de detectar esta manipulación. 

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Según los resultados preliminares de este examen contra el fraude de las emisiones en el transporte de mercancías, se ha confirmado que el 15% de los camiones Euro V medidos circulan con el catalizador de AdBlue desconectado, una tasa que podría llegar hasta el 30% según los investigadores. Esta manipulación podría así a entre 120.000 y 240.000 camiones Euro V y a un número indeterminado de vehículos Euro VI. 

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Este miércoles, el SEPRONA y Europol -la operación se extienda por varios países dado que los no todos los camiones trucados que se han detectado están matriculados en España- han revelado las primeras actuaciones detenidas de esta operación contra el fraude masivo en las emisiones de camiones, en la que se ha actuado contra al menos una empresa de transportes de Madrid. En este caso se encontró que había hasta 30 vehículos con emuladores de AdBlue instalados, lo que podría haber generado unas emisiones adicionales de hasta 90 toneladas de óxidos de nitrógeno. 

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Desde el año 2008, los sistemas anticontaminación por oxidación catalítica selectiva (SCR) son obligatorios en todos los camiones Euro V y Euro VI (2014). La empresa Opus RSE está colaborando con la Guardia Civil en el marco del proyecto europeo LIFE GYSTRA, que trata de identificar a grandes emisiones mediante una tecnología capaz de medir las emisiones en tiempo real de manera remota. 

El equipo, una vez instalado a pie de carretera, es capaz de hacer 'una fotografía' de todos los gases de escape de un vehículo y detectar así sus contaminantes con total fiabilidad y en medio segundo, incluso el NOx, que no se mide en las ITV. En el operativo, se han 'auscultado' con esta tecnología 2.257 camiones. Aunque los agentes del Seprona no pudieron proceder a inspeccionar todos los camiones que resultaron sospechosos de circular con el SCR desconectado, por diversos motivos como no encontrar un lugar seguro en la vía donde detener el vehículo.

En todo caso, según los datos de Opus RSE, hasta en el 15% de todos los camiones con una tasa superior a la 1.000 partes por millón de NOx -donde se estableció el límite para hacer un control visual- que fueron revisados se encontró que el SCR estaba anulado ilegalmente. Su detección, por otro lado, no es infalible, ya que solo es posible en camiones Euro V -y algunos Euro IV-. 

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Por ello, puede inferirse que el fraude de las emisiones en los camiones pueda fácilmente alcanzar a un 30% de los vehículos en circulación. En los camiones Euro VI, al hacerse la manipulación a través de una modificación en el software del vehículo, su detección resulta más compleja y no ha sido objeto de búsqueda en este operativo. 

De acuerdo con las mediciones realizadas en los vehículos en los que, posteriormente, se confirmó la manipulación por la Guardia Civil, cada uno de los camiones con el SCR apagado podría estar emitiendo entre 0,5 y 1 tonelada de NOx de más al año. La multa a la que se enfrentan los propietarios o los conductores de estos camiones es de solo unos 200 euros, por incumplimiento de las condiciones técnicas del Real Decreto 2822/1998.

¿Por qué los camioneros apagan el SCR?

Como sucede con los coches diésel modernos, desde hace 10 años, los camiones equipan sistemas de reducción catalítica selectiva (SCR) en los que hay dos piezas clave: un catalizador que contiene metales preciosos y un tanque de AdBlue, que es una solución a base de urea. 

Cuando el motor alcanza una temperatura elevada y a determinada presión en el escape, el sistema comienza a inyectar este AdBlue en el catalizador, que consigue convertir los nocivos óxidos de nitrógeno en nitrógeno, agua y dióxido de carbono, que son inertes. Sin embargo, el sistema SCR de los camiones es delicado y puede estropearse, por ejemplo, si la proporción de urea en el AdBlue no es la justa o se ha repostado un biocombustible con una elevada cantidad de potasio. 

La reparación de un SCR de camión completo, que pesa unos 200 kg, puede alcanzar el 40% del precio de un motor y se dan casos en los que la vida útil del catalizador no muy larga y debe ser sustituido cada 150.000 km. Una distancia que es la que recorren anualmente algunos de estos vehículos. Además, por cada camión, el gasto anual en AdBlue -depende de los kilómetros recorrido- oscila entre 1.000 y 2.000 euros. 

Un suma y sigue que hace que el mantenimiento del SCR pueda llegar a superar los miles euros cada año por camión. Esto lleva a que muchos transportistas y camioneros opten por anular totalmente el sistema de AdBlue mediante un dispositivo que se encuentra en internet desde 60 euros y que, con instalación incluida, no sale por más de 300. 

Opiniones contrapuestas de marcas y transportistas

"Los problemas con el SCR son enormes, los vehículos no padecen de motor, pero sí de varios de los componentes del sistema SCR: el filtro cuesta 3.000 y el resto del sistema de 1.500 no te baja. Son averías que se presentan con una frecuencia mucho más allá de lo razonable. No digo que no haya gente que pueda estar incumpliendo, pero el que lo haga es por pura desesperación. Nosotros no queremos contaminar, pero es que nos han vendido camiones que fallan nuevos, y vuelven a fallar", afirma Jose Carlos López Jato, vicepresidente de la Unión de Pymes y Autónomos del Transporte, Upatrans. 

Para Luis, ingeniero técnico industrial y jefe de taller de una red de los principales fabricantes de camiones, el problema no alcanza en absoluto tales cotas y defiende: "No es cierto que en Euro V y VI el sistema SCR esté planteando tantos problemas, que sí fueron más frecuentes en la primera fase de los camiones Euro IV que lo instalaron. Cuando vemos un camión con una avería en el SCR, hoy por hoy, lo más probable es que se deba a que se ha utilizado un AdBlue de baja calidad o con una concentración de urea que no es la debida. Hay camioneros que buscan ahí el ahorro y al final les sale caro".

Anuncios que ofrecen saltarse la ley

AUTOBILD.ES también ha llamado a varios de quienes ofrecen sistemas para anular el AdBlue en camiones, que ofertan sus productos en la conocida web de anuncios Milanuncios.com. Sin ambages, en los textos se explicita para qué son estos dispositivos y cómo funcionan sin indicar que la práctica está completamente fuera de la ley. 

Es más, entre las ofertas de particulares que se limitan a enviar el dispositivo, hay varias de empresas que, se supone, tendrán un taller especializado en el mantenimiento de camiones detrás. "Emulador de AdBlue", "todas las marcas", "imposible de detectar" son algunas de las frases con las que se reclama la atención en una especie de guerra de ofertas para anular el sistema SCR de los camiones. 

"No vas a tener problemas, nuestra instalación es indetectable", contesta una voz al otro lado del teléfono que aparece en uno de estos anuncios ante las preguntas y reticencias. El precio de la instalación en este taller ¿clandestino? tiene el valor orientativo de 250 euros porque la dificultad varía según el fabricante del camión cuyo circuito de SCR se vaya a anular. 

¿Qué impacto puede tener esta práctica en el medio ambiente?

Los AdBlue Killers o emuladores de AdBlue solo pueden detectarse en carretera si se instalan en un camión Euro V, por eso la operación de la Guardia Civil se ha centrado en estos vehículos, aunque el fraude puede alcanzar por igual a los Euro VI. Si el 12% de estos vehículos se ha constatado que van con el SCR anulado, se estima que la cifra real podría ser del 30% de la flota. Este cálculo también estima que puede haber vehículos no trucados que circulen con este sistema averiado. 

Así, si desde Opus RSE calculan que cada uno de estos camiones puede estar vertiendo a la atmósfera entre 0,2 y 1 tonelada de NOx de más al año y dado que, en España hay unos 800.000 camiones diésel Euro V, el impacto que esta práctica puede tener en el medio ambiente es colosal. En el escenario más negativo, estas emisiones llegarían a las 240.000 toneladas al año, en el más optimista, 60.000 toneladas/año. 

Según el inventario de emisiones del Ministerio de Transición Ecológica, en 2017, las emisiones totales de NOx asignadas al sector del transporte fueron 343 kilotoneladas. Esto significa que la práctica de la manipulación de los sistemas de catalización de los camiones podría estar elevando hasta un 60% el total de los óxidos de nitrógeno que el sector emiten en España.

Los investigadores, por ahora, no quieren confirmar estas cifras dado que, consideran, necesitan seguir recogiendo más datos. Sin embargo, hay una mala noticia: en operaciones similares en otros países de Europa, los resultados del fraude de las emisiones de NOx de los camiones han sido muy similares. 

Entre ellos, uno de la Universidad de Heidelberg, que tasa la cantidad de camiones trucados en circulación por Europa en el 20%, lo que haría que el impacto de este fenómeno en lo que a contaminación se refiere fuera, aproximadamente, el doble de lo que provocó el escándalo de las emisiones de Volkswagen.