Consejos de expertos para camperizar tu furgoneta y convertirla en un hotel de lujo

El caravaning lleva algunos años en su máximo apogeo. Sin embargo, no es una afición económica a pesar de que se estila el “hazlo tú mismo”. Saber cómo camperizar una furgoneta es clave para ahorrar algunos euros, aunque todo el proceso requerirá de un buen presupuesto, de tiempo para invertir en el proyecto y de algunos conocimientos básicos.

Convertir en un hotel de lujo tu furgoneta camper no es fácil, seamos honestos. Afrontar este proyecto supone hacer frente a numerosos quebraderos de cabeza que pueden provocar frustración. Sin embargo, deberás ser paciente, tratando de disfrutar de todo el proceso al mismo tiempo que visualizas tu meta: vivir la experiencia de viajar en furgoneta camper.

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En este artículo hemos recopilado una serie de consejos expertos que te ayudarán a tener éxito a la hora de camperizar tu furgoneta. Son unas pautas clave con algunos detalles que deberás tener en cuenta para que todo salga según lo planeado. Y más importante aún, que funcione para que nada arruine tu viaje o escapada de fin de semana en tu furgoneta camper.

Consejos de expertos para camperizar tu furgoneta y convertirla en un hotel de lujo

Escoge la furgoneta adecuada

Empecemos por lo esencia. La base de todo el proyecto. Escoger correctamente la furgoneta que vas a camperizar. Aquí te presentamos algunas de las mejores furgonetas de segunda mano para camperizar, pero antes de que te lances a comprar, debes realizar un pequeño estudio de mercado basado en tus necesidades y, sobre todo, lo que te puedes permitir sin agotar el presupuesto.

¿Buscas una furgoneta para acampadas esporádicas que puedas usar como turismo entre semana? ¿Prefieres un vehículo más grande, pero que sea más fácil de conducir? ¿O vas con todo y quieres tener la furgoneta camper más grande, espaciosa y capaz del mercado? Si respondes afirmativamente a algunas de estas preguntas, esa es la furgoneta que debes comprar. 

Por ejemplo, si prefieres una furgoneta con la que vas a acampar algún fin de semana al mes, pero que el resto del tiempo vas a usar como coche particular, puedes elegir un modelo pequeño, una furgoneta ligera tipo Citroën Berlingo. Además, existen módulos extraíbles que te permiten camperizar la furgoneta en cuestión de minutos y retirarlos cuando ya no los vayas a utilizar.

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Sin embargo, las furgonetas ligeras son ideales para una o dos personas. Por tanto, si viajas en familia, necesitas un vehículo algo más grande, con algo más de espacio. Una furgoneta tipo Volkswagen Transporter o Renault Trafic con una excelente opción por equilibrio entre espacio, usabilidad y precio.

Y si lo tuyo es ir a lo grande, en una furgoneta de tamaño completo, modelos como el Mercedes Sprinter, el Ford Transit o el Opel Movano son ejemplos de lo que debes comprar. Sin embargo, si vas a recurrir a este tipo de vehículos, debes tener en cuenta que son algo más caras de adquirir y que necesitarás un presupuesto más holgado para afrontar la conversión a furgoneta camper.

Por último, evalúa tus opciones en base al presupuesto a invertir. Una furgoneta nueva es mucho más cara que una de segunda mano, pero evitas posibles averías o comprar un vehículo usado que, por su naturaleza de vehículo comercial, lo más probable es que acumule una buena cantidad de kilómetros.

Planificación: fija un presupuesto

Ya has comprado la furgoneta. ¡Enhorabuena! Ahora es el momento de planificar el proyecto. Dentro de esta fase de planificación, lo más importante es fijar un presupuesto. Si empiezas a comprar materiales y componentes, y no controlas el gasto, podrías verte obligado a parar hasta reunir más fondos para continuar.

Más allá del dinero, un consejo de expertos es que planifiques el diseño que deberá tener el interior de la furgoneta camper. Hay empresas especializadas que se dedican a esta parte del proyecto, pero si prefieres hacerlo por tu cuenta, te recomendamos que te documentes acerca de todo lo relacionado con cómo camperizar una furgoneta.

Mira otros ejemplos y estudia detenidamente la normativa para homologar todo el proyecto una vez concluido. Evitarás posibles sorpresas desagradables al pasar la ITV y cumplirás con la normativa vigente en todo momento.

La clave: aislamiento

Si bien hay numerosas partes dentro de un proyecto de camperización, el apartado de aislamiento es clave. Es esencial porque evitará que tú y los tuyos paséis frío en las noches de invierno, cuando pernoctes en tu furgoneta camper, además de que reduce el ruido que accede al interior del vehículo. Por eso, es importante que pongas especial atención en esta fase del proyecto.

El aislamiento debe hacerse en paredes, suelo y techo, y, sobre esta primera capa de aislante, es recomendable instalar una segunda capa impermeable para evitar la condensación por la diferencia de temperatura.

Hay diferentes tipos de aislamiento para furgonetas camper, como el corcho, las placas de poliestireno, también conocidas como poliespán, y una de las más recomendadas por los expertos, la espuma de caucho sintético con 20 mm de grosos junto a un material de aluminio y plástico de burbujas multicapa.

Instalación eléctrica y de fontanería

Otro punto crítico de un proyecto de camperizar una furgoneta es la instalación eléctrica y de fontanería. En ambos casos, si no tienes experiencia en este tipo de trabajos, lo mejor es recurrir a un electricista o un fontanero que pueda afrontar toda la instalación, asegurándote así de que todo estará en orden y será seguro.

En el caso de la instalación eléctrica, es uno de los mayores desafíos cuando vas a camperizar una furgoneta. Y es que requerirá de instalación de baterías auxiliares, cableado de diferente grosor y otros elementos como reguladores o inversores que permitan que toda la instalación sea operativa.

Además, puedes instalar placas solares, que es bastante habitual en las furgonetas camper, lo cual te permite recargar las baterías auxiliares y abastecer de energía eléctrica la furgoneta durante las horas de luz.

Por otro lado, la instalación de fontanería requerirá de especial atención también. Serás más compleja o menos en función de cuántos elementos instales en la furgoneta. Lo más habitual es contar con depósitos de aguas limpias y grises, una bomba de agua para tener presión, inodoro, lavabo y plato de ducha (estos son algo menos comunes), y un sistema de calentador para agua caliente.

¿Cuántos extras necesitas?

Llegamos al apartado de extras y aquí es donde más opciones de personalización encontrarás. Puede que tan solo quieras tu furgoneta camper para viajar y acampar en casi cualquier sitio. Pero también podrías querer practicar tu deporte favorito allá donde vayas, como puede ser ciclismo, surf o esquí.

En este caso, dispones de soportes específicos para bicicletas, compartimentos para tablas de surf y snowboard, o baca para esquís, entre otros. Incluso puedes instalar un porta moto en la parte trasera donde llevar una motocicleta con la que desplazarte en tu día a día cuando estés de viaje.

Otros extras destacables son la calefacción estacionaria o el aire acondicionado, que ayuda a que la experiencia sea más confortable. También se suelen instalar componentes como todos laterales para disfrutar del exterior protegidos del sol y la intemperie, claraboyas, televisión, conexión WiFi o incluso iluminación auxiliar para el exterior.

No te olvides de homologar

Por último, la homologación. Esta fase es crucial para evitar que tengas problemas en la ITV una vez hayas camperizado tu furgoneta. Como te decíamos al principio, en el apartado de plantificación del proyecto, hay empresas donde un ingeniero te ayudará en toda la fase de homologación, guiándote y resolviendo cualquier duda.

Si recibes el visto bueno, podrás acudir a la ITV y que un ingeniero revise toda la instalación para verificar que todo cumple con la normativa antes de darte el aprobado.