Teresa Ribera contradice a Alemania y sigue defendiendo la prohibición del coche de combustión en 2035

La semana pasada, Alemania frenaba la medida impulsada por la Unión Europea que pretende acabar con los coches de combustión en 2035. Esto ha retrasado la votación para aprobar la norma y algunos Estados ya se posicionan en contra del país germano. Es el caso de España, donde Teresa Ribera ha contradicho a Alemania y sigue defendiendo la prohibición del coche de combustión en 2035.

La ministra de Transición Ecológica y Reto Demográfico asegura que modificar la propuesta tan tarde en el debate podría alterar la forma en que el bloque elabora políticas clave en el futuro y enviar señales confusas a los inversores y las industrias que planean el cambio a la energía limpia, según recoge Automotive News.

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Teresa Ribera contradice a Alemania y sigue defendiendo la prohibición del coche de combustión en 2035

En Alemania, la industria automovilística es una de las piezas clave en su economía y solicitó a la UE que incluyera los coches propulsados con combustibles sintéticos dentro de los que estarán permitidos más allá de 2035, junto a los coches eléctricos y de pila de combustible de hidrógeno.

A esta petición se unió Italia, donde la primera ministra Giorgia Meloni argumentó que la decisión de prohibir los coches diésel, de gasolina, de gas e híbridos tiene poco sentido y pone en riesgo miles de puestos de trabajo.

“Es decepcionante”, señaló Ribera, “¿Qué pasa si otros gobiernos deciden hacer algo similar en cualquier tema? Las reglas de procedimiento son para todos”.

La Comisión Europea no debería retrasar su decisión final sobre la prohibición propuesta para 2035, dijo Teresa Ribera. La disputa podría resolverse en otro lugar, como las negociaciones sobre la norma de emisiones Euro 7, para evitar romper la propuesta actual y comenzar las negociaciones desde cero.

A su vez, la vicepresidenta cuarta de España atribuyó las objeciones de Alemania a los conflictos dentro de la coalición gobernante del país. “Pueden tener una dificultad política interna, pero ahora han exportado su dificultad interna a toda la Unión Europea”, aclara.

España es el segundo productor de coches de Europa y la industria automotriz nacional es responsable del 11% de PIB. Mientras tanto, en Alemania el sector del automóvil emplea a 800.000 personas y tiene unos ingresos de 411.000 millones de euros al año.