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Ray, el robot que 'conduce coches' en la fábrica de Audi

Ray, el robot que 'conduce coches' en la fábrica de Audi
La marca Audi ha comenzado a utilizar dos robots para mover coches dentro de sus fábricas. Conocidos bajo el nombre de Ray, estas máquinas forman parte de una fase piloto del sistema de transporte autónomo en logística.

El robot de Audi que conduce coches es una de las nuevas tecnologías que la marca alemana está ensayando de cara a la factoría inteligente del futuro. Concretamente, se trata de  un proyecto piloto que comenzó el pasado mes de febrero en la planta de Ingolstadt: dos robots, de nombre Ray, transportan de forma independiente los coches desde la línea de producción hasta un área interna de almacenaje, donde son posteriormente colocados de acuerdo con sus lugares de destino, de modo que los empleados de logística puedan cargarlos en sus respectivos vagones de tren. Audi está preparando la primera aplicación industrial de este proyecto, y examinando posibles áreas adicionales de aplicación para estos robots.

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"El transporte autónomo de nuestros automóviles puede permitirnos eliminar largas distancias de recorrido caminando a nuestros empleados, y mejorar así las condiciones de ergonomía de esos puestos de trabajo" ha declarado Hubert Waltl, responsable de Producción de AUDI AG. "Sistemas como éste también tienen potencial para ofrecer significativos crecimientos en la eficiencia de nuestros procesos de producción".

La idea de estos robots procede de la compañía bávara Serva Transport Systems, que ya en 2013 le hizo merecedora del galardón German Founder Award. Los robots de Audi, Ray, se mueven libremente y con gran flexibilidad: constan de un marco de seis metros de largo por tres de ancho con sensores que les permiten determinar tanto la posición como las dimensiones de un coche, procediendo entonces a ajustarse a él. Entonces, los robots se ajustan cuidadosamente a las ruedas y levantan el vehículo hasta unos diez centímetros. Un software de control asigna un espacio en el cual Ray puede aparcar el coche. De este modo, automóviles de hasta 5,3 metros de longitud pueden ser rápidamente desplazados y temporalmente almacenados, de forma que se consigue un ahorro de espacio. Tan pronto como un suficiente número de coches clasificados con dirección a un mismo destino está listo, el robot los mueve hasta su lugar de embarque para el transporte.

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